Los tres CEOS, se quedaron viendo uno al otro, el arreglo no era muy grande pero era muy bello, parecía tener mucho significado — Pero... ¿que es esto, Andrés Alcántara? ¿estás teniendo un amorío con alguien que además es muy detallista, y no nos has contado? wow, no lo puedo creer, ¿que pasó con lo de evitar ser abandonado por Cassandra? ¡ella se irá y te dejará con los cuatro niños, estás corriendo demasiado riesgo, Andrés, recapacita! — Alessandro, no podía creer que esto estuviese sucediendo — ¿Pero qué...? yo sería incapaz, ¿por quién me toman? ¡yo amo a Cassandra, amo a mis hijos y la familia que tengo, estás flores no pueden ser para mí! — ¿Entonces para quién son? aquí hay una tarjeta, quizás deberíamos leerla — Drago, sugirió — Buenos días CEOS, jefe, ya te tengo el documento que me pediste firmado, el oh, ¿ese bello arreglo para quien es? — El asistente Alexis, preguntó curioso — No lo sabemos aún, estamos por leer la tarjeta Cuando estaban a punto de abri
Para cuándo el CEO, dijo a su esposa, no te molestes déjame hablar, ella ya estaba muy molesta, sobre todo cuando escuchó el nombre de la señorita Leyva — Alessandro Black, ¿tú... quieres llevar a esa mujer al banquete? — la mirada de la señora Black, estaba entre furiosa y húmeda, casi a punto de derramar lágrimas — ¿Qué...? por supuesto que no, pero que imaginación tienes, nunca llevaría a otra mujer en tu lugar a un evento, a menos que... — !¿A menos qué?! — A menos que fuera mi madre, absolutamente nadie más — ¿Entonces por qué la mencionas? no entiendo — Es para comentarte algo que sucedió, antes de ese equivocado beso, Alexis, el asistente de Andrés, estaba flirteando con ella, había coqueteo y él realmente estaba interesado en la señorita Leyva, hasta que la vió besándose con Drago — Si, ese coqueto de mi hermano, cruzó la línea, todavía no lo perdono, está en mi lista negra — Dary, todavía estaba bastante molesta, había hablado con Aithana y ella se había desah
Ana Sofia, también rechazó la invitación de su esposo, le tocaba hacer pijamada con los niños esa noche, comenzarían desde las ocho, hasta las diez y media, prepararía chocolate caliente con malvaviscos, y verían una película de dibujos animados El pequeño Joshua, Emill, Alessandro y Oliver, ya tenían la pijama lista, esperaban la noche con ansias, ya que se les permitiría comer golosinas La noche del banquete llegó, los esposos salieron en sus costosos coches, elegantemente vestidos, cada uno parecía un Adonis que caminaba por la tierra como si fuera su dueño, su porte y su atractivo era tan único Uno a uno fueron llegando al exclusivo salón, los recibieron con una burbujeante copa de vino champaña, y fueron guiados hacía su mesa, los primeros en estar ahí, fueron Alessandro y Andrés — Me imagino por qué has venido solo está noche Alessandro, seguro que mi prima no quiso venir porque dice que está muy obesa, debería saber ya que aún embarazada se ve preciosa — Es lo mi
Los caballeros, sobre todo Andres, Alessandro y Drago, que en ese momento llegaba hasta ellos, estaban que no se lo creían, ¿como era posible que Dante Ferreti, estuviera casi ahorcando a una mujer en pleno banquete? ¿Qué acaso se había vuelto loco? todos ahí lo estaban mirando, y si esa mujer estaba ahí esa noche era porque de seguro era una socia o hija de algún millonario, oh, oh, Dante, iba a estar en serios problemas — ¿Qué demonios le estas haciendo a mi hija? ¡suéltala de inmediato maldito loco desquiciado¡ ¿Acaso no sabes quién es ella y que yo soy su padre? !Voy a hundirte en la carcel, pediré la pena máxima para ti miserable, nunca más verás la luz del sol¡ — El padre, por supuesto estaba furioso, Adela, era su princesa consentida, solo que ella no tenía buenos valores, era caprichosa y promiscua, acostumbrada a obtener todo lo que quería, y Dante, con su imponencia y extremo atractivo varonil, le había gustado al instante, Pablo Cevallos, era uno de los hombres mas rico
Alessandro Ferreti, se le quedó viendo a Andrés, de forma inexpresiva, el joven CEO, esperaba obtener una respuesta pronta ante la urgencia tan apremiante — ¿Me estás diciendo que Dante, estaba ahorcando a una mujer en público y que ahora lo están acusando de intento de asesinato? — Siiii, de feminicidio para ser más exactos, ya que así se le llama en México, al asesinato cometido por un hombre sobre una mujer, el padre la chica está furioso y quiere hundir a Dante, para toda la vida, algo así como cadena perpetua es lo que quiere que le den, que lo encierren en una celda de máxima seguridad — ¿Qué fue lo que alteró tanto a Dante, como para hacer tal cosa? por lo general siempre está al margen de todo solo observando, muy pocas veces llega a esos extremos — Sucede que una resbalosa chica se le acercó, y en ese momento recibió una llamada de Carolina, para decirle que la bebé seguía inquieta pero que estaba bien, a esa mujer se le ocurrió hablar e insinuar que Dante, estaba c
Los dos amigos permanecían en la celda, solo se veían el uno al otro, ya se habían quitado el saco y el moño, estaban sentados en la austera banca, ya les habían informado que el proceso de ambos todavía continuaba, a uno por intento de homicidio y al otro... para investigar sus crimenes como probable líder del Cartel del Golfo, a Deeguel, le tratarían de encontrar todo lo habido y por haber — Es que, en serio Dante, ¿tenías que ahorcar a la mujer? — Si, si tenía que ahorcarla por hablar lo que no debía, y no la maté solo porque Carolina, me pidió que no lo hiciera — Pero te arriesgaste a qué te condenen por homicidio, ¿qué no piensas en Carolina y en los niños? — Algunas veces uno tiene que hacer lo que tienen que hacer, eso un mafioso como tú debería de saberlo — Por supuesto que lo sé, ahora no queda más que intentar salir de aquí por las buenas, por qué no creo que te pienses quedar encerrado por años en este lugar, ¿o sí? — ¿Te refieres a destruir la prisión y fug
Adriano De Luca, era un joven abogado muy astuto e inteligente, tenía incontables doctorados en su currículum y un récord de cero perdidas en los casos que había llevado, estudiaba cada uno a profundidad, y se presentaba en la corte con todo lo necesario para no perder, era él a quien buscaban en situaciones muy desesperadas y complicadas, el atractivo hombre de ojos azules como su madre y el perfil de nobleza de abolengo de su padre, había llegado a México, por la llamada de auxilio de Alessandro Ferreti, su segundo y querido padre de crianza La esposas no pudieron evitar recorrer con la mirada al perfectamente bien vestido y atractivo hombre que hablaba, solo Carolina y Ana Sofía, sabían de quién se trataba — Ya tengo el contexto de los hechos, disculpen que no me quedé a hablar ahora, debo ver a los dos presos de inmediato, con su permiso — El abogado tramitó el permiso para entrar a ver a los dos mafiosos, cuándo se les paró enfrente, fuera de las rejas sucias y frías, se e
Una bella mujer rubia de ojos verdes, esa tenía que ser Alejandra, sin duda, Deeguel, le respondió al hermano de su amigo — No es mi prima y obviamente mi hermana tampoco, ella es mi esposa, así que mucho cuidado con acercarte de más a ella porque es mía, Dante, dile a tu hermano que se comporte o le daré una paliza — pedía el mafioso, nadie podía acercarse a su mujer — Adriano, compórtate, nunca debes intentar seducir a la esposa de un mafioso, eso podría costarte la vida, mejor dime qué tantas posibilidades tienes de sacarnos de aquí — La posesividad viene incluida en los mafiosos, ¿eh? ahh... bueno, para serles francos, no hay posibilidades para sacarlos de aquí por la via legal — ¿Qué...? ¿Y lo dices así tan... quitado de la pena? ¡pensé que buscarías algo, una solución, un recoveco en la ley! — Calma, calma, dije que jurídicamente no es posible que salgan, pero... nunca dije que no los iba a sacar, ahorita mismo papá Lizandro, está trabajando en algo que es importa