El mafioso italiano, de pronto sintió envidia del amor que el ruso y la bella mujer griega, se tenían, incluso eran esposos y tenían a un bello hijo, ella era lo que todo mafioso querría para él, muy hermosa, con carácter, además de inteligente — ¿Me quieres poner celoso? sabes que me gustas, y que te habría llevado conmigo a Italia para que fueras mi mujer — Ya te dije que los italianos no son lo mío, alguna vez estuve comprometido con uno y las cosas no salieron nada bien, tan fue así que el hombre terminó encerrado en un manicomio, ese fué el trato que su padre hizo con el mío para que no le matara a su único hijo — Interesante, aunque me sorprende que no lo hayan asesinado — Eso fue por qué su padre y el mío, habían sido mejores amigos por muchos años, fue solo por eso, así que no, los italianos no me van — Prefieres a los hombres crueles y de corazón oscuro.... hmmm, que gustos tan peculiares para una mujer tan bella e indefensa — Cuando el corazón habla, lo demás
El mafioso cortó la llamada con su informante, sabía que las cosas se habían salido de control, habiéndole dicho a Maurice, que dejara ir a la rehén, este se la había llevado con él a Italia, la única explicación era que había enloquecido o le había gustado la mujer De inmediato el hombre tomó su celular para marcar de nuevo a Deeguel, el mexicano estaba por salir al rancho a rescatar a Evelyn Ferreti, ya habían estudiado el terreno y el plan, lo mandaron todo con mucho cuidado para que no se las mataran — Otra vez tu teléfono está timbrando, Deeguel — Dante, mencionó — Carajo, es Madrigal, ¿por qué está volviendo a llamar? — Te voy a bloquear para que dejes de llamar, ¿Y ahora que demonios quieres? ¿Llamas para decir que te arrepentiste y estás de nuevo con los italianos? di que sí, así te vamos a partir el culo a ti también está misma madrugada — Te vas a quedar con las ganas por lo menos hoy, mis informantes me acaban de decir que los italianos se fueron del país, ello
Los mafiosos ya volaban por los cielos con destino a Italia, Logan Romanov, parecía una bestia enjaulada, sus hombres no podían ni hablarle Alessandro Ferreti, estaba más que preocupado por su hija, Evelyn, era su princesa, ella era su única hija — Papá, debes confiar un poco más en las habilidades de Evy, ella sabrá defenderse, yo lo sé, conozco sus habilidades, ese italiano, no sabe con quién está tratando, eso te lo aseguro — Por supuesto que entiendo, yo mismo los entrené, pero hay límites Dante, si mi princesa no puede con esos mafiosos puede pasarlo muy mal o incluso me la pueden matar El padre mafioso, no estaba tan equivocado, Evelyn, corría grave peligro, ella se encontraba en la habitación luchando con Maurice, él quería someterla y ella no iba a acceder tan fácilmente, forcejearon durante bastante tiempo — No creí que fueras tan hábil en la lucha cuerpo a cuerpo, querida, incluso tienes atada las manos y aún así me das pelea Evelyn, respiraba con dificultad,
El CEO Black, despertó a Joan, pronto estuvieron vestidos y preparados para abordar su avión privado, Joan, estaba muy emocionado de conocer al nuevo bebé de Alessandro y Dariana, le gustaban mucho los niños y volcaba todo su amor a los hijos de su hijastro a quien quería como a su propio hijo Las horas avanzaban, a Dary en una de las revisiones ya no la dejaron volver a que caminara en los pasillos porque ya estaba más dilatada y la llevarían a la sala de expulsión — Cariño, tu eres muy fuerte, resiste, va a pasar pronto, el bebé ya va a nacer — ¡Noooo, no quiere nacer, me está rompiendo por dentro, dile que ya salga, Alessandro, se firme, que te obedezca! — ¡¿Qué...?! ¿tú crees que me va a obedecer? — !Siiiiii! lo hará, él ya sabe quién eres — Bebé, mamá, ya no aguanta más, necesitas salir de su interior de inmediato, ya no la hagas sufrir, ha sido muy valiente, ya dale un descanso — Alessandro le hablaba a la barriga de su esposa Cómo si lo hubiese escuchado, el doct
El matrimonio Black, estaba disfrutando de su pequeño, lo cambiaron de pañal, y pusieron un enterito azul, el padre lo arrullaba y el niño permanecía quietecito Alessandro, tengo un nombre que me gusta para el bebé, ¿escúchalo y dime qué te parece? — Quiero escucharlo, ¿dime cuál es? — Axel, me gusta Axel — Axel Black Ferreira, me gusta, estoy de acuerdo en que le quede ese nombre, ¿Escuchaste, pequeño? te llamaras Axel Black — Ferreira, no te olvides — Dariana se fue quedando dormida ella estaba agotada, habían sido muchas horas de parto por las que había pasado, solo quería descansar Más tarde los Black, llegaron a la exclusiva clínica, El imponente Alexander Black, venía con Joan, a su lado, ambos estaban emocionados por conocer al bebé, tocaron a la puerta de la habitación, encontrando dentro a su hijo cargando al niño — Alessandro, ya estamos aquí, felicidades, eres padre por tercera ocasión, déjame conocer a mi nieto — El tercero y el último, Dariana y yo he
Sofía, se acercó a su hijo y le dió un par de besos en la mejilla, ella siempre era cariñosa con Alessandro, solo que había llegado muy emocionada a conocer a la criaturita — No seas celoso mi pequeño bebé, sabes que tu madre te adora, eres la luz de mis ojos, es solo que me moría por conocer a mi nieto, es igual a Alexander, un hermoso niño, todo un Black — Gracias por los elogios querida, lo mismo digo yo, es igual de apuesto que su abuelo — Felicidades Alessandro, ¿un tercer bebé, eh? quién diría que te vería convertirte en padre de tres niños, ahora sabrás por todo lo que nos hiciste pasar cuando eras ese niño travieso que hacía llorar a su madre por qué se sentía sobrepasada — Si no tienen pruebas contundentes de lo que se está mencionando de mi persona, me declaro inocente Las familias disfrutan del bebé, todos estaban al pendiente de Dariana, y del niño, así paso el día y los mafiosos por fin llegaron a Italia El hermano de Maurice, no lo había molestado durant
El mafioso italiano, rodó los ojos al ver que Evelyn, estaba decidida a no subir al coche con él, tuvo que apartarla de la calle por lo menos para que no la fuera a arrollar un coche — No seas obstinada, estamos muy a la vista aquí, nos estamos enfrentando a una mafia, que no se te olvide, es cierto que no son tan fuertes como nosotros, pero aún así pueden matarnos — No subiré al.coche con un psicópata — ¿Eso le dices a Logan Romanov, cuando van a salir en el auto a algún lugar? por qué el ruso también es un psicópata, al igual que Dante y tus otros hermanos, ¿por qué solo me juzgas a mí? cometí errores en el pasado, eso lo sé, pero ya no soy ese hombre, tuve tratamiento para los enormes celos que sentía por ti, eso fue lo más insano que me ha tocado vivir, y por esa razón te falte al respeto, y me arrepiento muchísimo por eso, tanto que la culpa todavía me deja vivir sin remordimientos, espero que algún día puedas perdonarme, Evelyn — No lo sé, quizás algún día, ahora l
Alessandro Ferreti, Dante, Joshua, y el mafioso Mexicano, Deeguel Rodríguez, no perdían de vista su objetivo, la mansión de los Sorrento, era su dirección El celular de Alessandro, timbró, se apresuró a contestar por si tenían alguna novedad — Suegro, soy yo, Logan — Sé que eres tú, ruso, ¿qué novedades hay? ¡habla! El señor Vitalli y... Santiago Vitalli, estaban esperando ya a los italiano, ellos los siguieron y lograron rescatar a Evelyn, el idiota de Santiago fue quien se las quitó, mi esposa ya está conmigo — ¿Santiago? ¿ya salió del psiquiátrico? vaya, no lo sabía, ¿cómo está mi hija? ¿La golpearon, le hicieron daño? no me mientas, Logan, dime las cosas como son — Ella está bien, por lo menos eso dice, vamos en camino para la mansión de los Sorrento, nos vemos allá Los esposos, llegaron a dónde se reunieron para planear la entrada a la villa, Evelyn, bajó del coche y fue a abrazar a su padre — Princesa, ya estás libre, me preocupé mucho por ti, sabes lo mucho