“Además, incluso si quieres manejar estos asuntos, no tienes la capacidad de hacerlo”. Chester miró de reojo a Hunter con indiferencia.

El rostro de Hunter se sonrojó de ira. “No importa que tan incapaz sea, no habrías nacido en este mundo si no fuera por mí”.

“Si no fuera por mí, la Corporación Jewell habría quebrado hace mucho tiempo”, recordó Chester nuevamente.

Hunter estaba exasperado. “Tú, hijo ingrato. Otras personas tienen hijos filiales. Mírate. Lo único que no has hecho es no tratarme como tu padre”.

“Siempre haz sabido que soy un c*brón”, dijo Chester con pereza, parecía que no le importaba.

Hunter se quedó sin palabras.

Chester incluso podría referirse descaradamente a sí mismo como un cabrón. ¿Qué más podría decir?

“Chester, realmente no sé por qué te has vuelto así”, dijo Hunter malhumorado. “Como mínimo, creciste en una familia con una sólida base financiera. No te faltó ropa ni comida. Usabas artículos de marca que la gente envidiaba. Cuando estás afuera, eres el