Dos años más tarde…— Señora Valeria, ya que hoy es su cumpleaños número 27 nosotros le hemos preparado una sorpresa y queremos que usted asista sin poner pretextos. — Dijo uno de los escoltas.— No muchachos, lo lamento mucho pero ustedes saben que yo no tengo ánimos para celebrar. — Le respondió Valeria.— Ándele Señora, no nos deje mal parados, mire que hemos sacrificado parte de nuestro sueldo para hacerle esa sorpresa a usted, si no la acepta pensaremos que es una presumida y que el poder la ha hecho cambiar.— No digan eso, yo sigo siendo la misma de siempre. — Está bien vamos todos a festejar. — Dijo finalmente, la doctora.— A las seis de la tarde nos vamos.Valeria se acostó a dormir un rato y cuando ya solo faltaba media hora se levantó porque la niñera estaba tocando la puerta para entrar a vestir a los pequeños traviesos e inquietos diablillos (así les llama el joven Gonzalo).A las seis y veinte minutos de la tarde ya todos sus guardaespaldas estaban esperando por ella, h
Al día siguiente…Valeria amaneció entre los brazos de su amado, ella aun no lo puede creer que él ya esté aquí con ellos. Con mucho cuidado para no despertarlo, se levantó y sacó un pantalón y una blusa de la maleta que ha traído, se colocó su ropa interior limpia y salió en busca de sus hijos para que cuando su marido se despierte, se encuentre rodeado de sus pequeños diablillos.— ¿Qué pasa mami, a dónde nos llevas? —Preguntó el pequeño Jafet, todo somnoliento.— Vamos a conocer a papá mi amor. —Le respondió ella con mucha emoción.— ¿A papá? Preguntó la pequeña Gaby.Ellos conocen a su padre pero solo mediante fotografías, ya sea en la televisión o en los periódicos. Son unos niños de dos años de edad, por eso Valeria teme que no se sientan tranquilos con su papá.La niñera se quedó en la habitación y Valeria se llevó a los niños, abrió la puerta y su esposo aún está dormido. Ella colocó a sus hijos en el suelo al lado del camarote y los niños traviesos hicieron de las suyas.Siem
Dos años más tarde… — Vamos mi amor, puja lo más que puedes para que salga el bebé. —Dice Balduin, tomando de la mano a su mujer que está dando a luz por segunda ocasión. — Mirá desgraciado, si no tienes una cosa buena que decir mejor cierra la boca. —Le respondió Valeria, pero muy enojada, producto de los fuertes dolores que las contracciones le provocan. — ¡Está bien! —Si quieres también me salgo de la sala de parto para que estés tranquila. —Dijo su marido en broma, tratando de relajar el ambiente. — ¡Vete! —Por tu culpa estoy aquí tratando de dar a luz a dos bebés que no quieren colaborar para salir. — ¡Perfecto, entonces me voy! —Pero te recuerdo que yo no tengo movilidad en mis piernas, y eres tú la que me hace el amor, cariño. —Le habló en su oído a la chica, en voz baja para que las enfermeras no le escucharan. — No mi amor no te vayas, no me dejes sola. Balduin sonrió y besó la frente sudada de su mujer, él le prometió que a pesar de las circunstancias él estaría prese
En un día soleado Valeria salió a caminar al parque y de paso se compró un par de ramos con flores para llevarle al cementerio a sus padres ya fallecidos.En el preciso momento en el que ella pagó por el producto y se dio la vuelta, cayó al suelo un señor que iba pasando a su lado; le han disparado.Muchos de los transeúntes se acercaron a observar al señor que estaba mal herido y ella aunque con los nervios de punta por imaginar que es un milagro que esa bala no le cayó a ella, se acercó también con la intención de ayudar a aquel hombre- Soy médico por favor hagan espacio para que él no se asfixie-.Les pidió Valeria mientras le practicaba los primeros auxilios y pedía que llamaran a una ambulancia.Cuando la ambulancia llegó lo trasladaron hasta un hospital, pero poco después se supo que falleció porque la bala atravesó sus pulmones.Un hombre estaba en lo alto de un edificio al otro lado de la calle y con su fusil de francotirador tiene en la mira a su víctima, desde esa distancia
- ¿Por qué nos estamos tardando tanto en llegar si se supone que el accidente era a pocas cuadras de la clínica?Preguntó Valeria, y es que ha sentido muy largo el viaje.- No se preocupe doctora, queda muy poco tiempo para que lleguemos.Le respondió el mafioso con una cara de pocos amigos.- Espero que no me estén engañando.- ¿Le he dicho que hable doctora?Preguntó el mafioso alzando sus cejas.- No pero la boca es mía y yo hablo cuando se me dé la gana-. Habló la chica desafiando al hombre que ya la veía con desprecio.- Tenga cuidado como me habla doctora, no quiero que salga lastimada.- ¿A qué se refiere con que saldré lastimada?- Solo cállese y eso es todo. Ya hemos llegado al lugar doctora-.Le comunicó el mafioso y se levantó para salir, seguido de él bajó Valeria quien ahora ya se siente asustada porque a donde la han traído no es a auxiliar un accidentado, no aquí es un rancho, un rancho en dónde lo único que se ve es monte, una casa de campo y hombres armados, muchos ho
A mitad de la noche el mafioso recibió una llamada de su padre y para poder contestar tuvo que salirse para afuera ya que sabe que la chica está despierta porque se escucha que llora desde hace rato.- ¿Qué pasa papá?- ¡Balduin estás loco hijo! por qué no te deshiciste de una sola vez de esa doctora.- Ella no va a hablar papá.- Eres muy ingenuo Balduin, tú no te imaginas el peligro al que estamos expuestos con esa mujer que ni siquiera conoces.- Me voy a casar con ella papá.- ¿Cómo que te vas a casar con ella?¿Desde cuándo tú y ella están saliendo?- No la conozco, no sé quién es ella pero lo haré para estar seguro de que no sé escape.- No lo hagas hijo, cometerás un grave error si lo haces.- No te preocupes papá, todo va a estar bien.Al día siguiente el mafioso se llevó a Valeria para su apartamento en la ciudad y se sorprendió al ver que su perro y esa mujer se llevan muy bien.- Este perro me ha dejado en ridículo y como un mentiroso porque yo le dije a la doctora que tení
- ¿Por qué le ha dicho a su familia que yo soy su prometida señor?- Porque eso es lo que será a partir de hoy doctora.- ¡No! usted está muy equivocado señor, quedamos en que yo sería su doctora personal, más no su prometida.- Pues ahora ya está enterada doctora.- ¡No lo acepto!- No me importa si lo acepta o no. Usted es la que decide si quiere vivir o morir.- ¿Por qué me tortura de esta forma Señor?- Yo no la mandé a espiar conversaciones ajenas doctora, usted misma se ganó ese castigo por andar de curiosa.- Usted está faltando a su palabra señor.- Al contrario doctora, la estoy cumpliendo porque mañana en horas de la tarde será nuestra boda.- Acaso no entiende que yo no me voy a casar con usted.- Me voy a hacer un trabajo doctora, espero que cuando yo vuelva usted ya haya tomado su decisión.- Espero que nunca vuelva viejo desgraciado.- Deseo no concedido doctora.No quiero que salga de esta habitación, he dado la orden de que la atiendan bien y a cada hora vendrá la much
- ¡Ya lo ves doctora, que bonita la sorpresa qué te he preparado y tú que ni querías salir de la habitación!-. Exclamó el mafioso mientras la toma de su brazo y caminan hacia la sala en donde todos están reunidos.- ¿Qué le ha dicho a mi familia Señor?- Nada malo doctora, les he invitado a su boda y ellos no se han negado a venir.- Me permite hablar con mi hermano por un momento por favor.- Claro que sí pero, ¡ay de usted si se atreve a decirle algo sobre mi! le recuerdo que él es un policía y no me gustaría que él se entere de que mi familia pertenece a la mafia.Valeria con mucha alegría se acercó a su familia y los abrazó a todos, fingiendo estar muy emocionada con su presencia.- Perdónenme por no haberles dicho que hoy me casaría.- Eso no se hace cuñada, debiste de haberlo comentado con tu hermano.- ¿Por qué lloras hermanita?Preguntó su hermano, y aunque su corazón está resentido por la decisión que ella tomó de no avisarles nada, él siempre se preocupa por ella.- Solo est