Doble traición
Doble traición
Por: Gisèle Wess
Doble traición

Double traición 

Episodio 1

Recientemente dejé una relación tóxica cuando conocí a Wilson, un hombre de gran corazón. Él me coqueteó, pero fui escéptica, pensando que todos los hombres eran iguales. Mi ex prometido, Féris, era un hombre violento. Viviendo en unión libre con él, me decepcioné por el poco tiempo que pasé a su lado. Me había ocultado su lado oscuro hasta que descubrí su verdadera naturaleza. Me golpeaba para su propio placer. Cansada de eso, finalmente un día tomé mis cosas y me fui de su casa. Mi madre, que desaprobaba mi matrimonio con Féris, está muy feliz de verme regresar a casa.

Después de esta ruptura, decidí no volver a creer en el amor. Prometí no volver a salir con nadie, hasta que conocí a Wilson, quien ahora es mi esposo y el padre de mi hijo. Wilson no es perfecto, pero es un buen hombre. El hombre perfecto no existe, él tiene sus defectos, al igual que yo que tampoco soy perfecta. A veces tenemos desacuerdos, pero nunca hasta el punto de separarnos. Eso es lo que significa estar en pareja. Las pequeñas disputas son inevitables en cada hogar, pero sabemos lidiar con ello. Nos amamos mutuamente, Wilson tiene su propio trabajo y yo tengo el mío. Hoy, nuestro hijo tiene 4 años, y organizamos una hermosa fiesta para él a la que invitamos a nuestras dos familias y algunos amigos.

Durante la ceremonia, noté que mi marido estaba conversando con una joven. Intrigada, me acerqué para entender la situación. Sé que Wilson me ama y estoy convencida de que no es infiel. Hasta ahora, nada me ha hecho pensar lo contrario. Su teléfono no está bloqueado con una contraseña, lo uso regularmente y eso no le molesta. Por su parte, él puede tomar mi teléfono y tenerlo durante horas sin problema. No tenemos secretos el uno para el otro, una verdadera complicidad nos une.

___ ¿Cariño, puedo hablarte un momento? Dije acercándome un poco más a ellos. 

Él se dio la vuelta y me abrazó antes de decir:

__ Mi amor, te presento a Belvida, la nueva novia de Kenneth. Se llama Tatiana.

¡Uf!

Cuando dijo eso, me sentí un poco aliviada. Tomé una gran respiración antes de darle la bienvenida.

__ Bienvenida Tatiana, yo soy Cindy, la esposa de Wilson.

__ Encantada señora, he oído mucho de usted. Es muy hermosa.

__ Me siento halagada, muchas gracias y gracias por estar aquí.

__ De nada señora, es un placer para mí participar en esta hermosa fiesta. Le deseo lo mejor y feliz cumpleaños a mi pequeño Junior.

__ Muchas gracias. Por cierto, aún no he visto a Kenneth. ¿Dónde está? Quiero decir, ¿no vino contigo?

__ Sí, sí, recibió una llamada y se fue, pero no se preocupe, estará aquí pronto.

__ Ah, me alegra saberlo. Está bien, gracias. También debo unirme a los demás.

__ Gracias a usted.

Me alejé de ella, Wilson me siguió. De vez en cuando, echaba un vistazo para ver si Kenneth había regresado, pero no lo veía por ninguna parte. Es realmente extraño. ¿Por qué aún no ha vuelto? Kenneth es el mejor amigo de Wilson, trabajan en la misma empresa. Es un hombre soltero y desde que lo conozco, cambia de mujer como de camisa. Así que cuando Wilson me presentó a esta chica, entendí que ella era otra de sus numerosas novias. Este chico nunca cambiará.

La fiesta de cumpleaños fue muy exitosa, Junior recibió muchos regalos. Al día siguiente, agradecí a todos los invitados presentes en la fiesta por mi hijo.

Los días pasan según lo planeado. Estoy satisfecha con mi matrimonio, Wilson es cariñoso y pasa mucho tiempo con nuestro hijo cuando no está en el trabajo.

Después de salir de la iglesia hoy, regresé a casa y noté que Wilson no había ido a trabajar como de costumbre. Estaba al teléfono, pero colgó tan pronto como me vio antes de venir hacia mí. Es inusual porque siempre toma sus llamadas en mi presencia. Me pregunto qué ha cambiado.

__ Eeeh, bienvenido mi amor, ¿has orado por mí? Dijo, sonriendo.

Le devuelvo la sonrisa. Me besa en los labios.

__ Pensé que estabas al teléfono, ¿por qué colgaste la llamada?

__ No, por nada, te vi llegar y solo quería darte la bienvenida. No me molesta tomar mi llamada frente a ti. Cariño, me conoces muy bien y sabes que no te oculto nada y nunca voy a ocultarte nada. Te amo y lo sabes.

__ Lo siento mi amor, estaba pensando cosas raras. Perdóname por dudar de ti.

__ No, no estoy enojado, al contrario estoy feliz, porque tienes celos y sé que los celos son una prueba de amor. Debes saber que te amo y te he jurado fidelidad. Por nada del mundo podría traicionarte.

__ Lo sé, y confío en ti, es solo que conoces a las mujeres, ¿no?

__ Sí, lo sé, yo simplemente te adoro.

__ Y yo, te amo.

Entramos adentro. Le conté lo que el pastor nos dijo en la iglesia. Luego, voy a la cocina y comienzo mi trabajo diario. Después de terminar de cocinar, serví la comida. Durante la cena, noté que había un número que no dejaba de llamar a mi marido, pero él no contestaba. Me pregunto por qué no quiere contestar la llamada.

__ Cariño, ¿no contestas tu llamada?

__ No, es Kenneth, seguramente me está llamando para molestarme mientras estoy en la mesa.

__ Pero si no contestas, no va a dejar de molestarte. ¿O eso es lo que quieres?

__ La boca que come no habla. Lo llamaré más tarde.

__ Entonces pon el teléfono en modo silencioso. Creo que es mejor así.

__ Tienes razón. Eso es lo que debí haber hecho desde el principio. Me acabas de dar una buena idea, gracias cariño.

__ ¿Me agradeces por qué? Es algo que casi todo el mundo hace, especialmente cuando estamos en la mesa, así que no me agradezcas.

__ Está bien, comamos, el teléfono no nos molestará más.

Comimos y recogí la mesa. Pasé un poco de tiempo con Junior antes de que se fuera a dormir. Luego me uní a mi marido en la habitación.

__ Te estaba esperando mi amor, tengo ganas de ti.

__ Y yo, soy todo tuyo.

Nunca he rechazado relaciones sexuales a mi marido. Cada vez que lo desea, le ofrezco todo mi amor y atención. Siempre ha sido así desde nuestro matrimonio. Quiero evitar a toda costa que él busque a otra. La simple idea de verlo con otra mujer me rompe el corazón. No podría soportar que me engañara. Mi relación con Wilson es tan importante para mí que estoy dispuesta a todo para que él se mantenga fiel y que ni siquiera considere tener una segunda esposa.

Hago todo lo que él aprecia, como mantener la limpieza porque no le gusta comer fuera. No importa mi agenda, me aseguro de prepararle comida, especialmente a la hora. Le gustan las prendas sexys y prefiere verme siempre bien cuidada, así que hago lo posible por mantenerme en forma después de la maternidad. Hago deporte dos veces por semana y utilizo otros métodos también.

En resumen, después de hacer el amor, cada uno tomó su ducha y regresamos a la cama. En medio de la noche, su teléfono sonó de nuevo. Me pregunté qué podría ser a esa hora. Eran las 2 de la mañana cuando miré la hora. Lo desperté, pero parecía demasiado cansado para reaccionar. Sin mover un músculo, tomé el teléfono y salí de la habitación para contestar la llamada en el baño.

          Al teléfono 

__Hola,

Era la voz de una mujer. ¿A esta hora?

__Hola, ¿quién habla?

Ella cuelga tan pronto como escucha mi voz.

No, no es lo que tengo en mente.

Al darme la vuelta, me encuentro cara a cara con mi marido.

__¿Qué te da el derecho de responder a mis llamadas a mis espaldas?

Continuará...

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