Señorita Cassandra:
Primero que nada quiero pedir perdón por mi extrema formalidad en las cartas, no puedo evitarlo.
En segundo lugar, sé que bueno, estos son tiempo difíciles para las dos, especialmente para ti, por lo que aunque no podamos vernos, quiero mandarte todas las ganas del mundo para que sigas viviendo, porque honestamente no quiero volver a pasar por esto.
No se en qué estabas pensando cuando decidiste dejar sobre mi esa tu carta tan aterradora, pero creo que fue mejor que la tuviera yo a alguien más, y aunque sueñe extraño y morboso, no me hubiera gustado no ser ese alguien que la recibiera.
¿Razones? Tengo muchas, pero realmente no quiero mencionarlas, lo sé, es muy extraño. Y bueno, se me hace imposible conservarla o tirarla, así que mejor la dejo en tus manos, como un recordatorio de tu promesa hecha en el hospital, que nunca más intentarás hacer algo parecido
Espero respuesta p
-PARA LUNA-Querida Luneta:No me molesta para nada que escribas de esa manera, es más, si gustas también lo hago yo; sirve que me ayuda para mejorar mi redacción, sobre todo cuando de trabajos escolares se trateQuiero decirte muchas cosas, y no se por donde inciar…En tu carta mencionas “momentos difíciles”, y si de algo me he dado cuenta en mi estancia acá, es que no son solo momentos, sino que toda la existencia es difícil, todo el contexto de la palabra. Sin embargo, no lo veremos por el lado negativo de las cosas para que nos derrumbe; sino ver esto como una oportunidad. Porque aún siendo difícil, vale la pena continuar, porque solo de esa manera se puede alcanzar las metas, entre ellas, la felicidad¡Pero qué digo!, esto no vale la pena, lo vale todo. La amistad, la familia, las risas y sonrisas, lo valen todo.Y créeme que a pesar de las dificultades, no cambiaría nada por ello.Te agradezco infinitame
-JUEVES 17 DE ENERO-Rutina… Si me pidieran describir mi presente en una sola palabra, esa sería la que escogería. Me resulta algo inquietante. ¿Qué tiene de especial? ¿Qué es lo que sucede para que algunos odien la rutina y otros no puedan vivir sin ella?Es irónico; todos queremos salir, vivir, tener viajes, aventuras, entre otras cosas, sin embargo, muy pocos están dispuestos a salir de su zona de confort; aun cuando nos quejemos de ella diariamente. ¿Por qué?Miedo Esa sería la respuesta correcta a la última pregunta.Pero, ¿Exactamente a qué le tenemos miedo? ¿Al rechazo? ¿Al fracaso? ¿O sería más acertado decir que al éxito?Se dice que antes de tomar una decisión, deben ser valoradas todas las posibles reacciones, pero podría decir que más del 80% de las ocasiones, solo valoramos las partes negativas“Quiero hacer esto, pero, ¿Y si no puedo? ¿Y si me ridiculizo?” Esos so
Domingo 27 de eneroLos días se pasaron más rápido de lo que imaginaba, y para cuando me di cuenta, ya estábamos saliendo de la clínica. Mi madre se encontraba radiante, con una sonrisa tan grande que podría jurar no haberla visto así antes, y papá, su felicidad se notaba en su tono de voz, en sus bromas y comentarios; y entre risas y relatos llegamos a casa. En otro momento habría pensado que era demasiado bueno para ser verídico y duradero, pero una parte de mí ya estaba harta de esos comentarios, y decidió que no importaría qué tan largo fuera, lo disfrutaría como no tenía idea.Mis papás habían organizado una reunión con los padres de Alfredo y los de Luna, y así fue como terminamos 3 familias comiendo en el patio de la casa donde me crie.Es extraño, pasaron tantas cosas, pero a la vez tan poquitas, que me es difícil recordarme a mí misma que aún no ha pasado el mes desde ese fatídico día, pero parece que llevo años lejos de casaLo sé, soy una dra
Después de clases, los 4 fuimos por helados, pero yo me sentía un tanto tensa, quizá por lo sucedido en el recreo, era algo loco.Cuando llegamos a casa, Roberto me dijo al día siguiente tendría un trabajo en equipo, por lo que no regresaría conmigo en el bus, le respondí que no había problema, pero siendo honesta, creía que por ahí había gato encerradoMartes 12 de febreroEl día transcurrió sin mucha novedad, salvo por la salida. Alfredo aún no salía, mi hermano se fue con uno de sus compañeros, quien supongo que era parte de su equipo y vi a Luna retirarse con su mamá, quien había ido a recogerla porque tenían un compromiso, así que me quedé sola. Me colgué mi mochila, conecté mis audífonos, me agarré de los tirantes del bulto en mi espalda y comencé a caminar. No llevaba aún 10 pasos cuando oí a alguien corriendo detrás de mí, me tocó el hombro y se excusó por haber salido tarde y me preguntó si podía acompañarme a casaNo vi nada de malo que mi ami
Sábado 23 de febreroLas cosas marchaban de maravilla. Pasábamos mucho tiempo juntos los 4, estudiando, debatiendo o compartiendo temas de interés común. A veces los chicos se organizaban para hacernos salir a algún lado, y la verdad me gustaban esos detalles.Sin embargo, (Como bien se sabe) no todo es “color de rosa”.Cuando me desperté, lo primero que oí fue:-No Ricardo, no puedes irte así de nuevo, no lo hagas, por favor. –Sin duda esa era la voz de mamá-Puedo y lo haré. Ya no me ella ya no me necesita aquí, ¿No la ves? Sale, es feliz, ríe, juega. –Contestaba, dolido, mi padre-Ya sé que no te agrada, pero YA CRECIÓ. Es una señorita, tiene pareja y amigos y es natural que pase tiempo con ellos. No puedes seguir viviendo en el pasado. No puedes dejarla de nuevo-Me voy porque sé que tendrá a alguien más que pueda protegerla, y quizá mucho mejor que yo. No conozco bien al chico, pero tengo que aceptar que ya llegó mi re
Lunes 25 de febreroInicia la semana y no me gusta comenzar con deudas o cosas así, y sé que prometí explicaciones a mis amigos, por lo que publico en el chatCass: Buenos días bellos durmientesCass: ¿Ya despertaron?Cass: Vamos por paletas de hielo a la salida, yo invito. Apuesto a que el chisme se pondrá bueno.Cass: ¿Qué dicen, jalan?Luna: Que tentadora invitación, ¿Cómo no aceptarla?Alfredo: Allí estaré 😎Y así es como comienza mi día.Las clases pasan sin mayor novedad, y me pregunto si podré mantener esa misma postura flemática que tuve con mis papás a la hora de dar explicaciones. Sé que nadie me lo está exigiendo, pero siento que debo hacerlo.Llega la salida, me cuelgo mi mochila, espero a Luna para salir del salón, y una vez que ella imita mi acción, salimos al patio. Los chicos ya se encuentran al
Sábado 2 de marzo¿Alguna vez te ha pasado que estás tranquilo en un lugar y decides caminar por ahí y en partes donde segundos atrás se oía una animada plática, pero te ven y todos se callan? Y no porque tu figura imponga o infunda respeto. Sino porque no quieren que oigas lo que dicen, aunque no le hayas prestado la menor atención y solamente caminabas. Esa sensación de vacío y falta de pertenencia. Ese sentimiento de "yo no encajo aquí" es de lo peor.Me encontraba en casa de mis abuelos, mis primas charlaban alegremente, pero en cuanto aparecí, pude sentir sus miradas sobre mí. Luego los cuchicheos. Sabía lo que decían, no era ajena a sus comentarios"Mira, ahí va la suicida""Pobre loca, ¿por qué la sacaron del manicomio""Sus padres se merecían algo mejor"Estaba rodeada de víboras que intentaban envenenarme, pero lejos de bajar la mirada, caminé lo más derecha posible y con una sonrisa resplandeciente saludé a todos.Mis abue
Martes 5 de marzoPuedes aparentar ser la persona más feliz del planeta frente a otros, pero en la soledad de tu habitación, tú sabes que eso no es verdad. Es por eso que muchas veces es difícil encontrarse con uno mismo, porque en ocasiones tu vida está tan plagada de apariencias que ni tú mismo sabes qué es real y qué no.Bueno, pues en este momento empiezo a cuestionarme demasiadas cosas, y (no por última vez) deseo apagar mi mente.Creo que lo único constante en mi vida ha sido que es inconstante, porque incluso de mi hermano y de mi mejor amiga he llegado a aislarme. Y creo que eso está bien, puesto que si te acostumbras a algo invariable es fácil decepcionarse, pero si no lo es, puedes saber que las cosas pueden cambiar en cualquier momento y sabes a qué atenerte. Y como luego dicen “espero lo mejor, preparándome para lo peor”Pensando en eso, creo que he visto a Alfredo como un salvavidas, como un lugar seguro donde siempre puedo ir, pero quizá e