La consumación

Era de mañana y me levante, me sentía rechazada, quería que llegara la noche para poder intentarlo nuevamente, así que me dedique a estudiar, aunque no podía concentrarme recordando sus manos en mi entre pierna, solo quería verlo, saber cómo era, esta vez estaba despierta no fue un sueño, las rosas son la clave. Salí otra vez a comprar pero a una florería distinta y compre una rosa blanca, 2 rojas y 3 rosadas para aparentar. Pase al supermercado por helado y cosas para picar mientras veía n*****x, esta vez lo esperaría despierta.

Llegue, puse mi reloj a las 9 pm para despertar, y tomé una siesta, mi reloj no sonó desperté nuevamente por el frió que inundaba mi habitación, miré el reloj y eran las 3.03 am, antes que pasara nada le hable...

- No sé quién eres o que eres pero no te vayas, sí, soy virgen, jamás he estado con un hombre pero quiero sentir lo que es ser mujer, estaba sentada en la cama, cuando siento que algo toma mis muñecas y me tira hacia atrás, puedo sentir el peso de su cuerpo sobre el mío, pero no veo nada, solo siento sus manos heladas en mis muñecas, y escucho una voz profunda y masculina,

- Estás segura? Me siento estremecer al escucharlo y le que respondo… sí, solo se cuidadoso

- Lo seré... y me suelta, veo como sube el camisón, y baja mi ropa interior, toma mi camisón desde arriba y lo saca lentamente, lo siento no estoy soñando, esto de verdad esta pasando, siento su cuerpo sobre el mío, sus labios sobre mis pechos, los lame y los chupa mientras su otra mano presiona mi cintura hacia él, es brusco pero delicado a la vez, me atrevo a tocarlo, no lo puedo ver pero lo puedo sentir, su piel es fría su espalda suave, y ancha, puedo sentir sus músculos marcados, y su pelo largo, su lengua empieza a subir hacia mi cuello, la misma lengua fría que no he dejado de pensar en todo el día, y me besa, introduce su lengua hasta lo más profundo de mi boca estoy tan excitada que lanzo un gemido que es ahogado por su beso, lo siento bajar, sus manos recorriendo mi cuerpo hasta llegar a mis piernas las que separa bruscamente, siento su lengua nuevamente ahora pasar por toda mi entre pierna, lo siento entrar y salir, chupar y pasar su lengua una y otra vez, siento su mano abrir mis labios para que su lengua entre más profundo en mí, es lo más exquisito que he sentido en mi vida, vuelve a subir y a besar mi cuello y mis pechos y me sienta en la cama, puedo sentirlo de pie frente a mí y con su mano tomar mi cabeza, y con la otra toma mis muñecas y lleva mis manos su miembro erecto, es grande, frio y duro, y lo mete en mi boca, es lo más exquisito que he probado, se hunde dentro de mi boca una y otra vez, suave pero firme, lo suficiente para poder respirar y vuelve a entrar una y otra vez, mi boca está caliente, su miembro frio es la mezcla perfecta, siento como me excito cada vez más, mis latidos aumentan y mi sangre hierve. Me tira hacia atrás, separa mis piernas y vuelve a meter su lengua en mi entre pierna, estoy mojada, siento que late todo mi interior, muero de calor, mientras lo siento frío sobre mí, se detiene y puedo sentir su miembro duro y firme entrando lentamente, estoy más que extasiada, estoy jadeando esperando que entre de una vez, hasta que lo hace, rápido, firme, duro, como una estacada que me mueve todo por dentro, un dolor que dura un segundo para convertirse en un desborde de placer, grito, aaah!, él se queda quieto susurrando... shhhttt relajate. Lo siento entrar y salir primero suave ahora fuerte, y más rápido, firme, fuerte una y otra embestida, una tras otra, no puedo parar de gemir, de gritar de placer, el se mueve una y otra vez, dentro de mí, hasta que siento un estallido de placer y lanzo un grito, y caigo rendida nuevamente a la cama, él me toma como si fuera una pluma y me apoya contra la pared, toma mi pierna sobre su brazo y me atraviesa nuevamente embistiendo como una bestia sedienta de mi, mientras me penetra firmemente me empieza a besar los pechos fuerte terminando en un suave mordisco, me besa el cuello sin dejar de embestirme, lo siento gruñir de placer y me vuelve a lamer y besar mis pechos, yo estoy caliente y él frío dándome embestidas firmes y fuertes, me besa como nunca nadie me había besado, su lengua es magistral, me da un placer que jamás pensé encontrar, ahora me deja en la cama boca abajo y siento sus manos grandes tomar mi cadera y entrar nuevamente, una embestida tras otra, lenta pero firme, lo siento hacerme suya, me usa para su placer personal pero yo me siento derretir entre sus manos firmes, cada embestida mueve todo dentro de mí y empieza más rápido, otra vez puedo recuperar el aliento y empiezo a sudar y siento como corre mi jugo de mujer entre mis piernas, una y otra embestida cada vez más rápida y firme, siento su voz profunda gimiendo de placer igual que yo, tomo la almohada y la aprieto mientras vuelvo a gritar, él sigue una y otra y otra y otra vez hasta que siento venir  ese estallido en mi entre pierna, y viene hasta que con un grito acabo, rendida en la cama, desnuda pero plena, mi entrepierna late fuerte y siento como corren sus fluidos fuera de mi. Estoy rendida lo siento darme vuelta y taparme, yo no me puedo mover. Solo respiro con agitación, y logro decir no te vayas, pero ya es tarde ya mi pieza vuelve a estar tibia y siento que se ha ido. Caigo en un sueño profundo pero totalmente llena de placer.

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