ESPERO LES GUSTE ESTE MINI MARATON
Mónica Estaba profundamente dormida cuando escucho mi celular y pienso ignorarlo olímpicamente, pero la mano que rodea mi pecho desnudo se aprieta y gimo inconscientemente. —Responde, bella puede ser urgente — su voz sale ronca por el sueño, pero a mi cuerpo no puede importarle menos el celular sonando, para calentarse no se necesita más que unas cuantas palabras del nigeriano que está a mi espalda. Tomé la llamada justo antes de que entrara a buzón y vi que era Romina, ya de por sí es bastante extraño que llame a estas horas. Cuando Romina me dice porque me llama sin anestesia me levanté asustada, la sábana se me enredó en las piernas cayendo estrepitosamente. — ¡Maldición, Romina! — me quejé cuando recupere mi celular, menos mal tenía alfombra en mi cuerpo y amortiguo el golpe de mi teléfono. —¿Estás bien, bella? — me pregunta asomándose por el borde de la cama con una sonrisa de dientes blancos perfectos. Una vez les aseguré que estaba bien le dije a Romina que ya iba
Romina —Les invito a comer — añade Jacob luego de teclear algo en su celular para mejorar nuestros ánimos. —No nos deberíamos de mover de aquí — alegue queriendo alejarme de su toque invasivo a mi espacio vital. No quería estar cerca de él porque no me puedo sacar el sueño de mi mente, siento demasiada vergüenza como para tenerlo al lado y hacer como que nada pasó, por Dios hasta tuve un orgasmo en mi sueño, se sentía demasiado real como para ignorar los deseos, no solo de mi cuerpo sino también de mi mente. —Solo será a una cafetería con café decente — y con eso me ganó, solo eso basto que dijera para que mi cuerpo anhelara un buen café — es a una cuadra, regresamos cualquier emergencia. — Me parece bien —acepta el acompañante de Mon — ¿y a ti, bella? —Sí, muero de hambre y quiero un té — añade Mon con los ojos brillantes viendo a Makim. —Vamos, no quiero que CC nos eche de menos — agregue comenzando a caminar sin esperar a nadie, mientras más rápido fuera mejor para mí. Ja
Luciano Nunca he viajado tan lejos y estoy muy emocionado porque mamá dice que nos iremos a Alemania por trabajo, así que hice que Lola me ayudara a buscar todo sobre Alemania, aprendí muchas cosas que quiero enseñarle a mamá todo lo que vi en las redes sociales para luego ir a visitarlas nosotros mismos. La tía Mónica nos acompañará, aunque sé que no todo el tiempo podrá ir con nosotros. —¡Lola! —escucho la voz de mi madre que llega algo alterada y salgo a ver que sucede. Mi mami es lo más lindo que tengo y soy muy afortunado, pero me da tristeza a veces no saber nada de mi papá es un tema que no se habla en casa, a mamá le hace mucho daño hablar de él y aprendí a extrañarlo en silencio, hace una semana me encontré en mi cama una caja grande, con un papel muy lindo, era un regalo y se me hizo extraño porque no era mi cumpleaños, mami me hace desayunos especiales ese día e intenta pasar todo el día conmigo, pero el regalo me hizo pensar en que tal vez era de mi papá. HACE UNA
Romina. Llegué a casa lo más rápido que pude y le llamé a Lola a gritos. —¿Arreglaste lo que te dije de la maleta de Luciano y la mía? —Me faltan unas cosas de tu maleta y listo ¿por qué? —Se adelantó el viaje, salimos hoy —me siento nerviosa por lo que nos avisa la Genoveva Bicth White. Sería el colmo que yo misma saboteara mi trabajo. Estando en el avión la azafata nos cambió de puestos de clase turista a clase alta y eso solo pudo haber sido obra de Jacob, cuando mi niño estuvo bastante distraído con Simbad, una película bastante vieja, pero que era la favorita de este. —¿Sabes que va a pasar con nosotras luego de esto? —cuestiona Mon preocupada. Sabía que no había sacado el tema antes por Luciano y lo apurada que estábamos, pero ahora que el niño tiene los auriculares y que nos queda algunas horas de vuelo. —Es posible que Genoveva pida nuestras cabezas, pero no hemos estado en lugares extraños y la propuesta solo la manejamos nosotras, Jacob y Genoveva ¿Todo nuestro es
Carlota Despertar en el hospital fue duro y difícil estaba desorientada y con dolor de cabeza, pero tener a las chicas conmigo lo hizo más fácil, así como ver a Viken vigilando desde la distancia calmó mi alma y mi cuerpo dejándolo de manera flácida. Aún no podía creer que un compañero de trabajo me hubiera hecho eso, no le he hecho nada a nadie y no cabía en mi cabeza que alguien me agrediera de esa manera, recuerdo sus ojos desprovistos de alma y mi cuerpo entero tiembla. —Gracias por ayudarme —le dije con la boca pequeña— no sé qué hubiera pasado si tú… —Shhh… no pienses en eso— me calló con un dedo en mis labios— estas bien y es lo que importa. —Pero yo no sabía que era lo que querían hacer—le dije, aún me sentía culpable por lo que había pasado. —Consiguieron el vaso donde habías bebido ya escuchaste a la policía, solo tomaste un sorbo si hubieras tomado más, no me hubieras podido llamar y durar consiente tanto tiempo… yo…, me asuste tanto de encontrarte en ese estado— me com
RominaEl viaje fue largo, pero bastante cómodo en primera clase, no me esperaba el chofer que nos llevó a nuestro nuevo hogar, pensé que compartiría un apartamento con Mon, pero resulta que teníamos cada una su espacio y me gustó eso puesto que estoy acostumbrada a vivir sola con Lucianito.Ese es otro tema, mi Luciano con una extraña que no conocía de nada, pero Jacob tuvo el detallazo de buscar una niñera debería de darle el beneficio de la duda a la mujer y también a Jacob. Tal vez deba dormir un poco más, Alemania es maravillosa, el chofer que nos pasó recogiendo nos va datando cosas históricas del lugar y anoto mentalmente los lugares que sé que le encantaran a mi pequeño. Luego de media hora manejando llegamos a un conjunto de edificios que estaban resguardados con fuerte seguridad y algunos armados, para entrar había que pasar por una casilla de seguridad, revisaron el carro y nuestras credenciales antes de poder seguir.—Disculpen, es el protocolo — nos dice el chofer.—No h
49- Romina Estoy un poco nerviosa por salir con el jefe, siento que todos se nos quedan viendo, él va saludando a su paso y yo intento ir detrás de él por la pena que siento de caminar junto con él el jefe, la secretaria se le acerca con cara de pena. —Disculpe que lo moleste, señor Collins— tiene un par de carpetas en la mano cuando prácticamente se atraviesa frente a su jefe—necesito su firma para autorizar el químico que necesita el Doctor Meyer. —No molestas, Cristina —le resta importancia mientras la tutea— revisemos eso. Me quedé un paso detrás de él para que atienda sus cosas tranquilamente y tratar de mitigar las miradas de todos y se puso a revisar los papeles antes de firmar, luego de firmar la primera carpeta gira para verme. —A mi lado, nunca detrás de mí— me dijo y volvió a sus papeles — te sigo esperando, Mina. Preferí ponerme donde me dijo, justo a su lado todos se me quedaron viendo y Cristina, la secretaria me regalo una sonrisa para tranquilizarme, inhale profun
RominaMás que nerviosa estoy expectante de lo que pueda pasar y de lo que quiero que pase, no quiero forzar las cosas, pero tampoco quiero seguir esperando, siento que tengo años esperando por él y, tal vez sea así.—¿Quieres ir a la sala? —pregunta y besa mi hombro.Sentí mi ser temblar y negué con la cabeza sin poder hablar, nos quedamos justos donde estábamos y me atreví a girar mi rostro buscando sus labios.—Tu casa es hermosa —le dije en cuanto lo vi a los ojos, sus ojos oscuros se veían aún más oscuros con su pupila tragándose su iris, su boca se veía más apetecible que nunca.Su casa era moderna de esas de revistas que te encantan y que piensas que jamás vas a visitar, pero en este instante me sabía a rábano su casa moderna, Mónica o cualquier problema.—Me alegra que te guste— comenta tranquilo, viendo entre mis labios y mis ojos.—¿No tenemos que volver al laboratorio? —pregunté para tratar de estar segura, aunque en realidad no sabía qué hacía.—Es lo bueno de ser el jefe—