Silvia no entendía muy bien por qué él le preguntaba todo eso, pero al ver lo rápido que le enviaba el dinero, asumió que simplemente sentía una gran lástima por ella y nada más. Así que continuó conversando muy tranquila con él.[De hecho, después del divorcio, me siento muy libre y feliz. En reali
Ese día, estaba lloviendo fuertemente.En la entrada del hospital.Silvia Orellana, delgada y frágil, sostenía el informe de embarazo del hospital en sus manos demacradas. En él estaba claramente escrito:— ¡No embarazada!—¿Tres años de matrimonio y aún no estaba embarazada?—¿Cómo puedes ser tan i
Las personas que asistieron a la fiesta miraron hacia la puerta.La sala privada se volvió instantáneamente silenciosa.Silvia, de un leve vistazo, vio a Julio sentado en el centro, parecía completamente sobrio, sin rastro alguno de embriaguez.Ella sabía que Natalia lo había engañado.Julio la vio
La voz de Silvia era tan tranquila, como un viento muy suave.Hablar de divorcio sonaba como mencionar algo cotidiano y trivial.Julio la miró fijamente, quedándose inmóvil.—¿Qué dijiste?Después de tres años de matrimonio, no importaba cual fuera de lugar estuviera su comportamiento, Silvia nunca
El audífono estaba cubierto de sangre...Silvia no sabía en ese momento qué hacer. Con prisa, se limpió los oídos con papel y luego sacó rápidamente las sábanas para lavarlas.Tenía miedo de que Nuria, se preocupara al enterarse de su enfermedad. Así que arregló todo en secreto y luego se apresurada
Silvia abrió las noticias y se encontró inmediatamente con la conferencia de prensa del Grupo Ferrer, anunciando que Julio había tenido éxito en la adquisición de la empresa de su familia, La familia Orellana....Julio estaba disfrutando mucho últimamente.Esta adquisición le trajo el éxito en su v
Silvia no podía creer lo que estaba viendo frente a sus ojos.Quería resistirse, rebelarse, pero era totalmente inútil.Fue hasta el último momento que Julio pareció lograr calmarse.Afuera, el cielo empezaba a aclararse.Julio miraba a Silvia, viéndola frágil y delgada, luego observaba las manchas
Julio regresó a casa y se sentó en el sofá de la sala sin encender las luces. Estaba totalmente agotado y se frotó los ojos. Había dormido un rato, pero las pesadillas lo despertaron de nuevo.¡Qué extraño! Otra vez tuvo una pesadilla, esta vez sobre Silvia. Soñó que Silvia estaba muerta, era tan re