Después de pasar toda una vida caminando por muchos lugares. Luxion, ya se consideraba como un hombre de mundo, después de recorrer a pie casi todo el país, había generado una confianza en sí mismo, convirtiéndose en una persona totalmente diferente. Pero, por algún motivo, quizás una casualidad o un acto planificado, ahora estaba parado frente a la entrada del pequeño pueblo donde vivía Sebastián y su familia. Con las sudorosas manos apretando su bolso de viaje que colgaba en su espalda. Temeroso de dar el siguiente paso que lo adentrará a lo que había estado evitando durante poco más de medio año.
Tomando una larga respiración. Dio los primeros pasos tan pesados como el plomo y entró. Con mucho esfuerzo al principio, pero conforme recorría la calle, sus pasos se volvieron más ligeros y confiados. Ahora, yo no agach
Mientras comían, mantuvieron una conversación agradable. Violeta se emocionó de más cuando contó la historia de cómo conoció a su amado, así que, la mayor parte del tiempo fue ella quien habló, mientras los otros reían escuchándola. Cuando llegó el momento de despedirse, Violeta y Pedro se tomaron de la mano y con una sonrisa le pidieron a Luxion que asistiera a su boda que no será muy tarde. Con la promesa de estar presente, Luxion siguió su camino.Después de dar un par de vueltas, fingiendo que se había perdido, por accidente se fue a encontrar frente a la enorme casa de Kale. Las rejas cerradas del patio del frente, le impedían ver mucho. Por lo tanto, tuvo que ponerse de puntillas y estirar el cuello sobre la reja, intentando ver algo dentro. Estaba tan concentrado en su espionaje que no se dio cuenta cuando alguien lleg&oacu
Una línea de burbujas se hacía desde lejos hasta llegar cerca de Luxion. Cuando estuvo a unos centímetros, Kale emergió de golpe, gritando un gran - ¡Bu!.El puño de Luxion casi dio en su nariz, el susto había provocado que reaccionara en defensa. Si no fuera por los buenos reflejos de Kale seguramente estaría noqueado en estos momentos.Furioso, Luxion le gritó - ¡idiota!.Las carcajadas de Kale hacían eco en cada rincón del lago. Sus lágrimas comenzaban a salir cuando Luxion arrojó agua a su cara haciendo que tragara un poco y comenzara a ahogarse. Luxion río. Compadeciéndose de él, se acercó para darle unos golpes en la espalda.Luxion - ¿ya pasó?. ¿Estas bien?.Kale le dedicó una mirada acusadora - Estaría bien si no me hubieras hecho tomar agua.Luxion se defendió - No te hubiera hecho tragar agua si tu no me hubieras asust
Las manos de Luxion sobaban suavemente la espalda de Kale, enviando pequeños cosquilleos por todo su cuerpo. Luxion pudo sentir como el miembro que aún estaba en él se endurecía lentamente. Kale no pudo resistirlo. Se incorporó en sus brazos y se inclinó para besar a Luxion nuevamente, pero este se alejó.Kale - ¿Qué pasa?.La mente de Luxion había estado totalmente perdida hasta hace unos momentos, sin embargo, ahora era totalmente consciente de dónde estaban y la vergüenza brotó en él.Luxion - Alguien nos puede ver, ¡Levántate! - dijo.Kale - Nadie vendrá - volvió hacer el intento de besarlo, pero Luxion no se dejó e hizo a un lado su rostro. Kale soltó un suspiro de consuelo.Con las manos en el pecho de Kale, lo empuj&oac
Se hospedaron en un hotel cerca de donde estaban. A la mañana siguiente, las grandes ojeras de Luxion denotaban su falta de sueño, debido a que Kale no lo había dejado en paz en casi toda la noche. Estaba tremendamente cansado y adolorido. Luxion trató de levantarse sin hacer ningún ruido para meterse al baño. Justo cuando estaba por meterse a la bañera sintió como alguien se levantaba de la cama y entró al cuarto de baño. Kale le sonrió desde la entrada y cerró la puerta tras él para después meterse en la bañera y seguir torturando a Luxion con sus besos.La mañana fue larga, después de un arduo trabajo por fin lograron salir del hotel con dirección a la tan conocida casa de Sebastián. Cuando llamaron a la puerta, Kale y Luxion estaban teniendo una breve pelea porque el primero quería sujetar su mano y al seg
Luxion jaló su brazo del agarre y alcanzó la puerta - Si no quieres aceptarlo, no puedo hacer nada. - abrió la puerta y salió, sin mirar a nadie más. dijo mientras se dirigía a la entrada - Kale, vámonos. - este enseguida reaccionó y corrió detrás de él. Solo cuando había salido de la casa Luxion se dio cuenta que no se había despedido de Cris, pero ya era demasiado tarde para regresar, además, no podía hacerlo, Sebastián estaría tan enojado que lo echaría antes de poder hablar.De repente, sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz de Kale tras él - Lo siento, te deje cargar con todo tu solo.Luxion no lo miró - No es tu culpa, no te disculpes. - siguió caminando.Kale - ¿qué pasó?. ¿Por qué estás tan enojado?.<
Luxion no sabía mucho sobre la madre de Kale debido a que a él no le gustaba mucho hablar de ella. Lo poco que sabía lo había dicho por casualidad. La madre de Kale vivía en una habitación espaciosa con vista a un patio para ella sola ya que no podía salir debido a su salud. Fue diagnosticada con cáncer cuando Kale aún era un niño. Había sido operada y tratada muchas veces tan solo para mantenerla viva un poco más debido a que su cáncer ya estaba demasiado avanzado, desde hacia mucho tiempo ella había tomado la decisión de no seguir con el tratamiento y vivir el tiempo que Dios le quisiera dar.Cuando pasaron por el patio, las puertas de la habitación estaban abiertas. Germet se encontraba sentado a un lado de la cama sosteniendo una huesuda mano entre las suyas. Las vistas se dirigieron a los visitantes, antes de poder poner un pie dent
Acostado en una cama de paja. Luxion abrió con esfuerzo sus pesados párpados, desconcertado. En una habitación desconocida para él, un techo de paja con columnas de madera, paredes de varas simples y suelo de tablas. Giró su cuerpo hacia atrás, no encontró nada, se sentó rápidamente y un fuerte dolor en su cadera lo hizo acostarse de nuevo, de golpe. Provocando que la cama vieja crujiera con el impacto.Se tomó su tiempo viendo al techo hasta calmarse, después de un rato empezó a moverse lentamente hasta lograr pararse. Examinando la habitación, efectivamente, se dio cuenta que no había nada, lo había perdido.Sintiendo que su ira iba creciendo poco a poco. Decidió irse de la pequeña cabaña en donde se encontraba. Se vistió y salió con paso firme decidido a emprender una búsqueda sangrienta, sin importar que, lo recuperaría.Caminando en dirección al pequeño pueblo. Ignorando el leve dolor restante. Mientras las hojas crujían al ser pisadas y rotas en el acto. Se dio cuenta que no ten
Kale era un amigo de la infancia de Luxion. Por un tiempo lo creyó la única persona en la que podía confiar. Cuando era niño vivía en una casa alejada del pueblo donde solo estaba él y su madre, pero esta señora nunca se preocupó por Luxion. A menudo lo golpeaba tanto que su cara se volvía irreconocible, encerrándolo en un cuarto pequeño en la parte trasera de su casa. Lo dejaba aguantar hambre por días hasta que lo dejaba salir para ir a trabajar y conseguir algo de dinero para ella.Después de matarse trabajando regresaba a su casa por una paliza más, en su mente siempre estaba el escapar, pero no tenía a dónde ir ni tampoco el corazón para abandonar a su madre. Solo le quedaba soportar la agonía en su cuerpo y en su alma. Escuchando, cuando después de golpearlo su madre se limitaba a decir.-te lo merecías LuxionTantas veces que se lo creyó, grabándolo en su piel. Se llenó de odio hacia ella, pero más hacia sí mismo. Sintiéndose tan impotente y lleno de coraje. Por más que quisier