No digo nada más, pero paso a su lado odiando que siga metiéndose en mi cabeza, Isac era un desgraciado que sabía cómo meterse en tu mente y hacerte dudar de cosas. Cuando entro, veo que al final me está esperando el cuadrilátero, los hombres de mi padre suelen entrenar aquí, jugar y divertirse apostando, las peleas, el golpear a alguien siempre saca la adrenalina atorada en las venas, y eso era de lo que estaba lleno yo.
Ese era el ring en el que mi padre nos enseñó a luchar, en donde los golpes dejaron de doler con el tiempo y se convirtieron en un arma que nos gustaba sostener, jamás nos puso a pelear entre hermanos, pero asistíamos de igual manera y en secreto le enseñaba a Isac lo que yo aprendía pro ser mayor, pero para ser honestos, no es du fuerte. Tomo un par de vendas y enrollo mis manos.
PASADO (Anelys)Corro sin rumbo ni dirección, las paredes que se presentan ante mí son enormes, diviso a los costados enormes puertas que permanecen cerradas, con mis pequeñas manos intento abrir algunas, pero no puedo, corro y corro sintiendo que me persiguen. El sonido de pasos es más cercano, trago duro y agarro los costados de mi falda con fuerza, mis ojosescueceny se llenan de lágrimas.Siento miedo, frío, quiero gritar pero las palabras no brotan de mi garganta, simplemente no lo hacen. Es como si el nudo que se forma con mis cuerdas vocales se expandiera a tal punto de asfixiarme. Llego hasta el final del largo pasillo blanco, y mi pecho cruje, veo al final una puerta r
—Ane, tienes que despertar…La voz de mi primo, me altera, siento que muero, y me pierdo hasta que una nueva voz me hace querer salir de mi cuerpo.—Despierta, joder, maldita sea, tienes que recordar.Alguien toca mi mano y empieza a hacer movimientos circulares, se siente cálido, el tacto es suave, como si esa persona no quisiera tocarme, la garganta se me seca e intento abrir los ojos nuevamente, esta vez siento que mi respiración se estabiliza, no sé en dónde me encuentro, si estoy muerta o estoy soñando, pero cuando por fin logro abrir los ojos y ser consciente, mi cuerpo se siente roto.Cada uno de mis músculos se estira causándome dolor, me quejo y enseguida el
Mi primo me sostiene a tiempo antes de caer al suelo.—Sácanos de aquí, me lo debes —me aferro a su brazo con determinación.—Ryan me dijo que Lenin estaba en su oficina hablando sobre el compromiso con Dalila, me parece que dio la orden de no ser molestado hasta dentro de dos horas.—¿Cuánto que te dijo eso?—Hace media hora exactamente.—Bien, ese es tiempo suficiente, entonces si pidió no ser molestado, quiere decir que el doctor no podrá decirle que estoy embarazada, tomaremos esa ventaja para escapar.—¿Pero tú estado de sal
La ansiedad me domina, tengo que recurrir a todo mi autocontrol para no dejar que el miedo y miles de emociones más, me sofocaran, me remuevo inquieta haciendo esfuerzos inútiles por soltarme, luego de mi encuentro con Lenin, el capullo ordenó a sus hombres encerrarme en una habitación distinta, me amarraron con un par de cadenas a la cabecera de la cama, y ahora no solo tenía ganas de orinar, sino de asesinarlo.Mi mente no deja de repetir las mismas imágenes en mi cabeza, mi tío apuntando a mi cabeza, las confesiones, todo lo sucedido, pero lo que me tenía más afligida es el hecho de saber que estoy embarazada. Respiro hondo, profundo, tengo mil preguntas pero sobre todo, vivo en la constante incertidumbre de saber qué es lo que ha pasado con mi primo Eithan.&mdash
Me recuesto y a los pocos minutos entra Agatha con una charola con una galleta y leche, también una hoja en blanco. Me quita las esposas y sobo mis muñecas.—¿Qué es eso? —indico con la mirada.—El amo ha dado la orden estricta de que solo tome leche fría y una galleta al día, también no tiene permitido salir, la hoja es una nota del señor.Dice y se dirige al baño. Tomo la leche y al probarla la escupo de inmediato, está llena de nata y la galleta parece roca, leo la nota y rápido rompo la hoja en mil pedazos.“Hay otra salidaAnelys, sé mía, acepta casarte conmigo y ser mi reina de la mafia, r
LENINLa explosión de sensaciones extrañas que recorren mi cuerpo, no se calman con la mamada que me hace una de las chicas de servicio, la cual antes de que protestara o llorara como niña, le apunté a la cabeza dejándole claro quién mandaba aquí, lo cierto es que me siento confundido, desde que encontramos asesinado a nuestro padre, con una nota de un tipo que se hace llamarDiablolas cosas han cambiado. Algo surgió dentro de mí esa noche, y es que me tiene ardido el no haber podido defender mi sangre, porque esa noche no solo murió padre, sino, una parte de mí.Claro que buscamos por todas partes, Isac y Ryan se encargaron de buscar evidencias, revisamos las cámaras de seguridad, cada maldito rincón de la for
Cinco horas atrás…—¡Debes estarjodiéndome! —brama con ojoscentellantes.Cierra los puños como si fuera un hombre a punto de una batalla, pero la ignoro, no meinmutosiquiera cuando comienza aberreardiciéndome lo imbécil que creé que soy.—Cuida el tono con el que te diriges a mí, te recuerdo que soy tu maldito líder —tenso la mandíbula. La detesto.Y el solo hecho de pensar que en algún momento de mi vida le metí la polla pensando que eraAnelys
Presente…Siento que me asfixio cuando entro a la habitación que mandé preparar únicamente para el descanso de Anelys, y veo que Dalila está encima de ella intentando clavarle unas tijeras en el vientre, mi primer impulso es correr hacia ellas y quitarla de encima de mi hijo y mi mujer, pero un brazo fuerte me detiene.—Observa, hermano —Isac me detiene, su mirada parece perdida en la mujer que una vez fue suya.Todo pasa en cuestión de segundos, pero sucede, al girarme puedo notar como los papeles se han cambiado, Anelys le da un cabezazo que me duele más a mí que a alguna de ellas, la obliga a girar, hace un movimiento circular en la muñeca de Dalila, aprieta con fuerza y esta suelta