Esa noche, Althea y Lina se dirigieron de nuevo al claro en el bosque, llevando consigo una copia de las instrucciones del ritual y los materiales necesarios. La luna llena iluminaba el lugar, dándole un aire místico y sobrenatural.
"Lina, ¿estás segura de que esto funcionará?" preguntó Althea mientras colocaban las piedras en el suelo siguiendo las instrucciones del grimorio.
"No puedo asegurarlo, pero es nuestra mejor opción," respondió Lina con firmeza. "Solo necesitamos creer en el poder del ritual y en nuestra capacidad para llevarlo a cabo."
Con las piedras en su lugar, Althea se paró en el centro del círculo mientras Lina comenzaba a recitar las palabras del antiguo ritual. El aire alrededor de ellas comenzó a vibrar, y una luz suave emergió de las piedras, envolviendo a Althea en un resplandor cálido y protector.
De repente, una ráfaga de viento frío sopló a través del claro, apagando la luz momentáneamente. Althea miró a su alrededor con el corazón latiendo rápidamente, y entonces vio a Gabriel aparecer entre las sombras.
"Althea, ¿qué estás haciendo?" preguntó, su voz llena de preocupación.
"Estamos tratando de protegerme," respondió Althea, sintiéndose un poco más segura dentro del círculo.
"Este ritual es peligroso," advirtió Gabriel, dando un paso hacia adelante. "Podría atraer a fuerzas que no puedes controlar."
"Pero no tengo otra opción," dijo Althea, su voz temblando. "Necesito saber en quién confiar, y necesito protegerme de Lucian."
Gabriel asintió, entendiendo su dilema. "Está bien, pero déjame ayudarte. Hay una manera más segura de hacerlo."
Antes de que pudiera continuar, Lucian apareció en el borde del claro, sus ojos oscuros brillando con intensidad. "Althea, no puedes confiar en él. Tiene sus propios motivos."
El aire se llenó de tensión mientras ambos jóvenes se enfrentaban, cada uno de ellos decidido a proteger a Althea a su manera. Ella miró a ambos, sintiéndose atrapada entre las dos fuerzas.
"Lina, continúa con el ritual," dijo Althea, tomando una decisión. "Necesito ver esto hasta el final."
Lina asintió y retomó la recitación, su voz fuerte y clara. La luz del círculo se intensificó, envolviendo a Althea en un brillo deslumbrante. Sentía una mezcla de calma y poder que nunca antes había experimentado.
Gabriel y Lucian miraron con asombro mientras el círculo de protección se completaba, formando una barrera invisible a su alrededor. Althea sintió una conexión profunda con algo más grande que ella misma, como si estuviera sintonizada con las fuerzas del universo.
Cuando el ritual terminó, la luz se desvaneció lentamente, dejando a Althea sintiéndose más fuerte y segura. Gabriel y Lucian se acercaron, ambos con expresiones de respeto y admiración.
"Lo lograste," dijo Gabriel suavemente. "Has despertado tu verdadero poder."
"Pero esto es solo el comienzo," añadió Lucian, su voz llena de determinación. "Aún hay mucho que aprender y muchos peligros que enfrentar."
Althea asintió, sabiendo que sus palabras eran ciertas. Pero por primera vez, se sintió lista para enfrentar lo que viniera, sabiendo que tenía el poder y el apoyo necesarios para hacerlo.
Mientras el amanecer comenzaba a iluminar el cielo, Althea, Lina, Gabriel y Lucian se alejaron del claro, conscientes de que su viaje apenas había comenzado. La verdadera batalla estaba por delante, y juntos, enfrentarían los desafíos que les aguardaban.
Con la luz del amanecer filtrándose a través de los árboles, Althea sintió una mezcla de anticipación y determinación. Mientras caminaban de regreso a la ciudad, la atmósfera era más tranquila, aunque todos sabían que la paz sería temporal. Lina caminaba al lado de Althea, ofreciéndole un apoyo silencioso, mientras Gabriel y Lucian permanecían cerca, vigilantes.De vuelta en la casa de Althea, se despidieron en la puerta, prometiendo reunirse más tarde para planificar sus próximos pasos. Althea entró silenciosamente, tratando de no despertar a su madre. Subió a su habitación y se dejó caer en la cama, agotada pero llena de una nueva sensación de propósito.Los días siguientes estuvieron llenos de investigación y preparación. Lina y Althea pasaban horas en la biblioteca, descifrando los antiguos textos y símbolos, mientras Gabriel y Lucian patrullaban la ciudad, asegurándose de que ninguna fuerza oscura se acercara demasiado.Una tarde, mientras Althea estaba sola en la biblioteca, Gab
Con el amuleto en sus manos y la promesa de sus amigos, Althea se sintió más segura. Sabía que el viaje sería difícil, pero estaba decidida a enfrentarlo. Los días siguientes fueron una mezcla de entrenamiento intensivo, investigación y preparación para la batalla que se avecinaba.Una mañana, mientras entrenaban en un claro alejado de la ciudad, Gabriel se acercó a Althea con una expresión de preocupación. "Tenemos que hablar," dijo, guiándola a un lugar apartado."¿Qué sucede?" preguntó Althea, sintiendo un nudo en el estómago."He estado investigando más sobre el amuleto y sus poderes," comenzó Gabriel. "Y he descubierto algo inquietante. El amuleto no solo amplifica tus poderes, también tiene la capacidad de atraer a seres poderosos, tanto del cielo como del infierno.""¿Qué significa eso?" Althea sintió un escalofrío recorrer su espalda."Significa que al usarlo, podríamos estar llamando la atención de fuerzas mucho más grandes y peligrosas de lo que imaginamos," explicó Gabriel.
Pasaron varios días desde la batalla en el claro, y aunque todos estaban aliviados por la victoria, había una tensión palpable entre ellos. Sabian que algo mas se avecinaba. Lucian se recuperaba lentamente de sus heridas, pero Althea no podía quitarse de la mente la imagen de él sacrificándose por ella. Se sentía abrumada por la culpa y la preocupación.Una noche, mientras se dirigía a la casa de Lina para una reunión, Althea encontró a Gabriel esperando en su puerta. "Necesitamos hablar," dijo con seriedad."Claro, Gabriel. ¿Qué pasa?" respondió Althea, sintiendo una inquietud creciente."Desde la batalla, he estado sintiendo algo extraño," comenzó Gabriel, sus ojos reflejando una mezcla de preocupación y algo más que Althea no pudo identificar. "El amuleto. Cada vez que lo usas, se siente como si estuviera drenando algo de ti."Althea frunció el ceño. "¿Drenándome? ¿A qué te refieres?""No estoy seguro, pero tengo la sensación de que hay un costo por usar su poder," explicó Gabriel.
Pasaron varias semanas desde el ritual, y Althea, Gabriel y Lucian comenzaron a notar los efectos del vínculo que habían compartido. Había una nueva sensación de entendimiento mutuo y una conexión más profunda que les permitió trabajar juntos con mayor armonía. Lina también jugaba un papel crucial, asegurándose de que el grupo se mantuviera enfocado y unido.Una tarde, mientras entrenaban en el claro, Althea notó que Gabriel y Lucian parecían más cercanos a ella, más protectores. Había momentos en los que Gabriel le lanzaba miradas que duraban un poco más de lo habitual, y Lucian, aunque seguía siendo el mismo chico duro y sarcástico, mostraba una suavidad en sus acciones cuando se trataba de ella.Durante un descanso, Gabriel se acercó a Althea con una sonrisa cálida. "Te ves más fuerte cada día," comentó, entregándole una botella de agua.Althea sonrió de vuelta, sintiendo su corazón latir un poco más rápido. "Gracias, Gabriel. Me siento más fuerte. Creo que el ritual realmente nos h
Mientras se preparaban para la confrontación , Althea sentía una mezcla de miedo y esperanza. Sabía que el camino sería difícil, pero con Gabriel y Lucian a su lado, y la fuerza de su vínculo, creía que podían superar cualquier obstáculo. La batalla que se avecinaba no solo decidiría el destino del mundo, sino también el destino de sus corazones entrelazados.El día de la confrontación llegó con un amanecer sombrío, el cielo cubierto de nubes oscuras. El grupo se reunió en el claro, listos para enfrentar al ser oscuro. Althea sentía el peso del amuleto en su cuello y la carga de la responsabilidad en sus hombros. Gabriel y Lucian estaban a su lado, sus rostros reflejando la misma determinación."Esto es todo," dijo Gabriel, su voz firme. "Debemos estar listos para cualquier cosa.""Lo estamos," afirmó Lucian, mirando a Althea. "Juntos."Comenzaron a avanzar hacia el lugar donde Seraphin había predicho que el ser oscuro aparecería. El bosque estaba inquietantemente silencioso, como si i
El aire fresco de la mañana era un contraste bienvenido después de la intensidad de la reciente batalla. Althea, Gabriel y Lucian estaban reunidos en la cabaña de Seraphin, recuperándose lentamente de sus heridas. Sin embargo, una inquietud subyacente persistía en el grupo. Sabían que su victoria sobre el ser oscuro no era el final; algo más siniestro se estaba gestando.Seraphin, observando al grupo con sus ojos sabios y cansados, se acercó a la ventana y miró al bosque. "Hay algo que deben saber," comenzó, su voz grave. "La derrota del ser oscuro ha liberado una fuerza aún más antigua y poderosa."Althea, sentada junto a Gabriel, sintió un escalofrío recorrer su espalda. "¿Más poderosa? ¿Qué podría ser peor que el ser oscuro?""El ser oscuro no era más que un sirviente," explicó Seraphin. "El verdadero enemigo es una entidad conocida como Erebus, el Príncipe del Abismo. Su despertar ha sido provocado por la destrucción de su vasallo. Ahora, está decidido a recuperar su dominio sobre
El retorno del grupo al pueblo fue recibido con celebraciones y gratitud. Sin embargo, bajo la superficie de la victoria, las tensiones comenzaban a surgir. Althea, Gabriel y Lucian habían forjado un vínculo profundo, pero el peso de sus experiencias y sus sentimientos no expresados comenzaban a crear fisuras.Althea se encontraba en el jardín de la cabaña de Seraphin, intentando procesar los eventos recientes. Sentía una mezcla de alivio y confusión. Gabriel y Lucian habían estado a su lado durante las batallas más oscuras, y su conexión con ambos se había profundizado, pero ahora, en la tranquilidad, las dudas y los sentimientos reprimidos comenzaban a aflorar.Una tarde, mientras cuidaba las flores del jardín, Gabriel se acercó a ella. "¿Tienes un momento para hablar?" preguntó, su voz suave pero cargada de tensión."Claro, Gabriel," respondió Althea, dejando a un lado las herramientas de jardinería. "¿Qué sucede?"Gabriel tomó una respiración profunda. "Althea, hay algo que necesi
El aire en el pueblo estaba tenso después de la batalla . La tranquilidad que habían ganado se sentía frágil, como si una nueva amenaza acechara en las sombras. Pero más que cualquier enemigo externo, las emociones internas de Althea, Gabriel y Lucian amenazaban con desgarrar su unidad.Un día, mientras el grupo se recuperaba en la cabaña de Seraphin, Lina los reunió. "He estado investigando más sobre Erebus y Nox," dijo, su expresión grave. "Creo que hay algo que deben ver."Los llevó a un antiguo manuscrito que había encontrado en la biblioteca del templo. "Esto habla de una profecía," explicó, abriendo las páginas amarillentas. "Habla de una entidad aún más poderosa que Erebus, un ser conocido como Tenebris. Su despertar podría significar el fin de todo lo que conocemos."La noticia cayó como un balde de agua fría sobre el grupo. Althea sintió un nudo en el estómago. "¿Qué más sabemos sobre Tenebris?""Que solo puede ser derrotado por aquellos que poseen un vínculo puro y fuerte,"