Al abrir los ojos me di cuenta que estaba amanecido, Aleks estaba a mi lado durmiendo boca abajo, me reí cuando ví otros dos tatuajes en su espalda, creo que necesita a alguien que lo vigile cuando se pasa de tragos, tomé mi ropa y salí al baño de afuera para darme una ducha y no despertarlo, me coloque la ropa que me compró, era un vestido corto celeste que me quedó muy bien, miré mi teléfono y tenía varias llamadas de Sean y algunos mensajes de Madeleine preguntando por mí, le envíe un mensaje para decirle que estoy bien y en el departamento de Aleks, cuando terminé curioseé en el refrigerador para hacer el desayuno, había algo de fruta y terminé haciendo unos huevos con tocino, estaba terminando cuando apareció Aleks.–Buenos días –murmuró al darme un beso –. Huele muy bien.–Hice algo para desayunar, tenías algunas cosas en el refrigerador.–Entonces vamos a comer.Me ayudó a colocar la mesa, hablamos mientras desayunamos.–Debo regresar a casa antes de que Johan despierte.–Yo te
–Hola. –Maggie, ¿cómo estás? –preguntó Richard al teléfono. –Bien, ya sabes como siempre. Richard tampoco sabía sobre Beauxx, me sentí mal al principio por no comentarle y sobre todo y no contratarlo para los asuntos legales en la empresa, pero no quería que nadie se enterará sobre esto y tenía miedo de que todo fuera un fracaso tomando en cuenta la posibilidad de que lo contará a Sean. –Te llamó porque los documentos están listos para firmar –mencionó –. Sé lo mucho que te disgusta ver a Sean y por eso te llamó personalmente, te invitó a almorzar, ¿qué dices?–¿Hoy?–Estás ocupada. –Bueno planeaba llevar a Johan a almorzar, pero si quieres acompañarnos también irá Dewey. –Dedícale tiempo al pequeño Johan, pero me gustaría dejar este trámite terminado antes del fin de semana, dime donde estás y llevo los documentos. –No te preocupes, yo pasó ahora por la oficina. No le podía decir que estaba en mi empresa secreta, al despedirnos me apresuré a terminar, dejé pendiente algunas c
Abrí los ojos y me estiré en la cama hasta que recordé que anoche me quedé dormida, me di cuenta que tenía puesta una blusa y mi ropa interior en ese momento la puerta del baño se abrió y Aleks salió con la misma ropa de ayer. –Ya despertaste. –Se acercó a darme un beso. –¿Qué hora es? –Las seis –respondió –. Anoche te quedaste dormida después de que me pediste que me quedará. –No recuerdo eso –me sonrojé. –Si lo hiciste, pero ahora debo ir a cambiarme de ropa a mi departamento y regreso por ustedes para ir al ferry. –Está bien. Fue un alivio que dijera eso porque no tenía idea de como explicarle a Johan que Aleks se había quedado a dormir aquí, eso me hizo pensar en que debo hablar con él sobre lo que pasa. Aleks se fue y yo fui a darme una ducha y cambiarme de ropa antes de levantar a Johan, quería quedarse en la cama hasta que le mencioné el ferry. Al bajar Dewey y Madeleine estaban en la cocina terminando el desayuno. –Buenos días, ¿cómo durmieron? –sonrió Madeleine y por
Las semanas con Aleks fueron increíbles, empezó a llegar más seguido y fue Johan quien soltó sobre lo feliz que estaba porque era mi novio, también aprovechó el momento para decirle sobre los regalos que quería para navidad y su cumpleaños. Hablé con Richard sobre la situación con Pauleth, me recomendó colocar una denuncia, pero no quería hacer un escándalo, ella solo era cosa de palabras y si Sean se mantenía alejado de mí no iba a haber algún problema, no tengo idea de lo que habló con él, pero apareció para llevarse a Johan los días asignados y esos días solo eran de ellos porque hasta el momento Johan no había mencionado nada de querer regresar o sobre Pauleth. El cumpleaños de Aleks estaba cerca y había planeado algo para él, practicaba por las noches el violoncello para no perder la práctica a excepción los días que Johan pedía que tocará melodías en el piano, hablé con Madeleine para ver la posibilidad de reunir a algunos integrantes de la orquesta y hacer unas sinfonías para
Después de la discusión con Dewey decidí hablar con Aleks sobre los detalles del viaje, me dijo que vivía en Saint Peterburg, un lugar demasiado frío, le pedí algunos datos para hablar mejor con Sean. Dewey tenía razón y aunque pareciera un interrogatorio tenía que saber hasta el clima al que íbamos. Richard me habló una mañana para ir a almorzar con Sean, fue más fácil de lo que pensé aunque Richard facilitó todo con los documentos, para tranquilidad de Sean agregó la fecha primero de Agosto para regresar con Johan. Después de que todo estaba arreglado hablé con Johan que estaba encantado de ir, esa fue la parte más fácil, así que los siguientes días nos preparamos para el viaje. –¿Llevas todo? –preguntó Madeleine. –Si Mads, prometo que te hablaremos todos los días. El día llegó y nos íbamos en un avión privado, el piloto ya había salido a avisar que nos íbamos en cinco minutos, Madeleine había salido con nosotros desde la casa, me sorprendió cuando Sean apareció y aunque tuviera
–Mami… Abrí los ojos de inmediato encontrandome con Johan al frente. –Mi vida, ¿estás bien?–¿Puedo dormir contigo?Me di cuenta que Aleks está boca-abajo, la cama es grande, pero decidí levantarme. –Mejor vamos a tu habitación. Había demasiado frío, creo que tendré que comprar nuevas pijamas que cubran un poco más que unos pantalones cortos y una delgada blusa de rapunzel, también debería dejar de comprar pijamas de princesas. Llegamos a su cama y lo abracé, se quedó dormido de inmediato, yo también lo hice, estaba demasiado cansada, volví a despertar porque tenía mucho frío y me di cuenta que Johan tenía toda la sábana enrollada, aún estaba oscuro y me levanté para regresar con Aleks. Entré a la habitación y cuando me recosté en la cama sentí el calor del cuerpo de Aleks. –¿A dónde fuiste? –Johan vino hace rato, fui a dormirlo a su cama. –Se hubiera quedado aquí –murmuró, me apretó contra su cuerpo –. ¿Tienes frío?–Mucho, mejor abrázame. Volví a quedarme dormida. Por la m
Johan se llevaba muy bien con Nikolay aunque les costará comunicarse encontraban la forma de hacerlo, cuando Johan no entendía algo Irina estaba cerca para traducirle, Irina estaba encantada con Johan y él se aprovechaba de la situación, Aleks salía a la empresa y era un buen tiempo para buscar los ingredientes que necesitamos para el pastel y la cena para todos, Johan quiso hacerle una carta que lo tuve que ayudar, Aleks regresaba por la tarde y salimos a conocer la ciudad, era muy hermosa aunque la mayoría de las tardes llovía, disfrutamos de las impresionantes catedrales, espectaculares palacios y magníficos museos a Johan le encanto el campo marte porque podía correr por todo el lugar, además que llevamos a Neva el perro blanco de Aleks, era muy cariñoso y tranquilo, Johan se había encargado hasta de alimentarlo desde que llegamos, estoy segura que de ser posible lo dejaría dormir en su cama, también hablaba con Madeleine y Dewey todos los días les mostró su habitación y les conta
Aleks tampoco fue a la empresa al día siguiente así que llevamos a pasear a Neva, lo sentí un poco distraído en el teléfono hasta que por la tarde finalmente recibió una llamada. –Tengo que firmar unos documentos con urgencia –mencionó. –No te preocupes, ¿necesitas qué preparé algo?–¿Preparar? ¿Por qué? –dudó. –Supongo que trabajaras aquí –mencioné. –Por supuesto que no, le dije a mi asistente que los deje en mi escritorio, iré ahora mismo. –Se detuvo y me miró. –¿Me quieres acompañar?–¿Quién? ¿Yo? –Si, puedes conocer la empresa. –¿Y Johan? –dudé. –Solo será un par de horas, Nikolay está aquí, no se dará cuenta, seguro Irina puede verlo. –¿En serio quieres que vaya? –Seguro, Sólnishko. Le avisé a Johan que ayudaría a Aleks con algo de su empresa y que regresaremos rápido, Irina se ofreció a cuidarlo sin protesta, tuve que colocarme un grueso chaleco encima del suéter porque estaba lloviendo y hacía mucho frío. Condujo alrededor de cuarenta y cinco minutos hasta que llega