Llegaron a la exposición más tranquilos que el día anterior.

Charly se puso a revisar documentos y se quedó pasmado al ver todo lo que logró Barbie el día anterior, llamó a su primo, porque vio que había teleconferencia con él y otra con Silvina.

Hablaron de trabajo y luego Sebastián le dijo.

-Muy buena esa de emborracharte para que te perdone, voy a hacer algo así con Loana, no sé si pedirle a Silvina que se haga la borracha y que me llame ó aparecerme yo, borracho.

-No tenía intenciones de emborracharme, estoy desesperado, me mando cagadas y quiero estar con ella siempre, le voy a proponer seriamente casamiento, ya compré el anillo.

-¿Estás loco?

Sebastián estaba totalmente aterrado por las palabras de su primo.

-Lo estaría si la pierdo, quiero tenerla siempre conmigo, quiero besarla, poseerla.

-Yo también quiero besar a Loana, partirla en dos, hace siglos que no estoy con otra, desde que estuvo en casa que no tengo acción y quiero tenerla con Loana.

Cortaron la comunicación, por un