Finamente hemos terminado nuestra deiciosa cena, el siencio que se encuentra en nuestra mesa es un poco incomodo. Como podran imaginarse, Leila y James solo saben hablar sobre el trabajo. ¿Por que no hablan un poco sobre su vida personal? O cualquier otra cosa, pero no, ellos como buenos adictos al trabajo, acaban de salir de trabajar y para cenar a gusto, hablan de mas trabajo. ¡Estupendo!
- Bueno chicos, yo ya debo irme. - Dice Leila levantandose.
- ¿Segura? Podemos irnos juntas. - Digo inmediatamente para que no me deje sola con este hombre.
- Tranquila, me voy sola. Por cierto James, ya tengo listos los boletos de avion para tu viaje.
Llevo mi mirada hacia James y veo como James observa a Leila como si la quisiera matar, supongo que es por lo que Leila acaba de decir. Veo como Leila se percata y trata de evitar su mirada.
- ¿Lo siento? - Pregunta con pena.
- ¿Por que te disculpas? No hiciste algo mal. ¿Verdad James? - Lo miro amenazante.
- Digamos que solamente hablaste de mas Leila, pero esta vez lo dejare pasar, de todas maneras debia decirselo. - Responde con frustracion.
- Perdon pero ¿de que me estoy perdiendo? ¿es importante? - Pregunto de inmediato.
- Bueno pues yo me voy, nos vemos mañana preciosura. Hasta mañana jefe. - Leila deposita un beso en mi frente y sale de nuestra vista lo mas rapido que puede.
- ¿Entonces? - Miro a James y el adopta su postura de seriedad.
- Te iras de viaje conmigo, tengo que ir a cerrar algunos negocios a Colombia.
- ¿Ire contigo? No he escuchado que me preguntes si tengo trabajo, si tengo planes o minimo preguntame si quiero acompañarte James.
- ¿Por que debo preguntar? Estas comprometida conmigo y te recuerdo que practicamente debes estar en donde yo este. ¿Entiendes eso Jenny?
- ¿Discupa? ¿Te estas escuchando James? Yo no soy ni tu secretaria, ni tu guardaespaldas como para estarte siguiendo a cualquier bendito lugar y estoy en todo mi derecho de no querer ir contigo.
- Si como digas, vamos, te llevare a tu casa. Yo ya tengo sueño y como siempre, arruinaste mi noche con tus reclamos de niña chiquita.
....
Escucho fuertes golpes en la puerta de mi habitacion. ¡Joder! ¿Quien pudo haber entrado a mi casa? Leila nunca tocaria de esta manera. ¿Que hago? Miro a mi perrito que no hace ruido y solamente observa la puerta con curiosidad.
- ¿Es alguien a quien conocemos o por que no ladras? - Susurro acercandome un poco a el.
Tomo todo el valor que tengo en mi sistema, tomo silenciosamente mi almohada y con mucho cuidado quito el seguro de la puerta, inmediatamente la puerta es abierta con brusquedad y sin pensarlo me suelto a dar golpes con la almohada, le doy con todas mis fuerzas a quien sea que haya entrado a mi cuarto.
- ¡¿Que demonios te sucede?! - La voz molesta de James se hace presente y detengo los golpes.
- ¡¿Que haces tu aqui?! Pude matarte James. - Digo recobrando el aire.
- Si claro, vas a matar a alguien con una suave almohada. - Ruedo los ojos y camino hasta mi cama para tirarme de nuevo a dormir.
- ¿Que haces aqui? Es demasiado temprano para andar molestando gente.
- Anoche te dije que iriamos de viaje pero yo no te veo lista.
- Nunca dije que iria contigo. - Digo mientras me tapo con las cobijas.
- Y yo nunca te di a elegir, pero en este momento tienes dos opciones. Te apuras a vestirte para irnos o te cargo y nos vamos asi como estas vestida. ¿Que eliges?
- No serias capaz de algo asi? - Digo nerviosa y retandolo al verlo tan serio.
- Que quede claro que yo quise dialogar contigo. - Se acerca y me toma en brazos rapidamente, comienza a caminar hacia la salida.
- ¡James! Esta bien joder, me visto rapido y nos vamos.
- Tienes media hora. - Dice mientras me baja.
Sin decir mas, me dirijo rapidamente a darme una ducha, al salir me quedo solo en toalla y preparo rapidamente una maleta para no irme sin ropa; termino la maleta y comienzo a vestirme, decido un pantalon de mezclilla oscuro, una sudadera gris, unos tenis negros y un abrigo negro. De verdad que solo a James se le ocurren estas cosas, son las cinco de la mañana.
Salgo lista de la habitacion con la maleta y una bolsa en mi mano, James se acerca a tomar la maleta y comenzamos a salir.
- ¿Leila tiene llave de tu departamento? - Pregunta James cuando cierro la puerta.
- Si ¿por que?
- Para que venga a recoger a tu perro y lo lleve a mi casa, solo es para que lo cuiden mientras no estas aqui.
Asiento sin decir mas y continuamos con nuestro camino hasta la camioneta que ya nos espera afuera.
- ¿Trajiste lo necesario? - Pregunta cuando ambos estamos dentro de la camioneta.
- No estoy muy segura de lo que traje.
- Bueno, igual no importa, si te hace falta algo me dices y lo compramos.
Asiento y comienzo a tratar de calentar mis manos, les prometo que tengo demasiado frio, normalmente no acostumbro a andar fuera de mi cama a estas horas que te congelan.
- ¿Tienes frio? - James voltea a verme con seriedad como siempre.
- Si James, digamos que no acostumbro a estar fuera de las calientitas cobijas a estas horas.
- ¿Habia otra opcion? Para nada. - Dice con burla.
- Podias ir solo James, lo sabes perfectamente.
- Quiza tengas razon pero quise traerte conmigo, asi es mas facil que no me acueste con alguna chica durante el viaje.
- Es lo mas tonto que has dicho en lo que va del bendito dia. - Digo seria y le doy la espalda.
Siento como algo con peso es puesto en mis hombros, llevo mi vista a ellos y es el abrigo de James, me giro rapido para verlo pero James mantiene su vista en la ventana. Decido mejor guardar silencio, me recargo en el asiento para poder dormir un poco, no quiero llegar a Colombia como la prometida de este hombre y con unas grandes ojeras.
Por fin hemos llegado al precioso hotel en donde nos hospedaremos aqui en Colombia, realmente no tengo ni idea de cuanto tiempo vamos a permanecer aqui, como sabran, James no se tomo la molestia de informarme pero si vino molestandome en el avion diciendo que vamos a tener que dormir en la misma habitacion por el tema de los periodistas, que porque en todo el mundo la gente es chismosa y aguien del hotel podria decir algo; ya saben, segun James el piensa en todo. - ¿Yo que voy a hacer mientras estas en tus juntas? - Pregunto mientras tomo asiento en la pequeña sala de la habitacion. - Si firmamos el contrato se hara una celebracion de asociacion, por lo tanto, mientras yo estoy en la junta tu estaras arregandote. - Dice y toma un poco de agua. - ¿Y como sabes que firmaran el contrato? - El negocio es seguro, no existe ni una sola posibilidad de que esto se cancele. - Responde con superioridad. Asiento sin decir ma
Llegamos al lugar de la recepcion, observo que no hay tanta gente pero tampoco es tan poquita como esperaba, por supuesto todos visten de una manera demasiado elegante y no podia faltar el estacionamiento con camionetas y carros muy lujosos. ¿Lo haran por presumir o por comodidad? - Pasare al baño a cambiarme. - Avisa Leila cerca de nuestros oidos. - Te acompaño. - Digo para no quedarme sola con James. Entramos juntas al baño y me alegra demasiado que se encuentre solo, Leila entra a uno de los cubiculos para colocar su vestido y salir despues para que yo la maquille. Sonrio al verla lista, ha optado por un vestido color beige, deja al descubierto su pierna derecha y en el pecho tienen un corte v pronunciado. Ambas escuchamos la puerta del baño abrirse, el ruido de los tacones se hace presente y nos miramos curiosas. - ¿Leila? Oh mi dios, que gusto verte cariñito. - Dice la mujer que acaba de entrar.
(Les recomiendo muchisimo que escuchen la cancion "Put your records on" Ritt Mommey, cuando Jenny este en el jardin) Narra Jenny. Despierto gracias a los fuertes rayos del sol que logran entrar por la gran ventana y es que para mi buena suerte, James pidio que las cortinas de nuestra habitacion, sean abiertas a las siete de la mañana. Pero yo me pregunto ¿quien las abre? ¿como las abren? En ningun momento escuche que alguien entrara a la habitacion, realmente no escuche algo por el estilo; asi que no tengo ni idea de como lo hacen pero esta cool. Igual no estoy acostumbrada a estas cosas de gente fifi o nice. Decido entrar al baño a darme una ducha, en estos momentos no tengo ni idea de en donde se encuentre James pero por lo menos hoy planeo pedirle que salgamos a conocer un poco, la verdad es mi primera vez en Colombia y me encantaria poder aprovechar el tiempo libre para recorrer el pais
Llegamos al hotel en donde nos estamos quedando, bajo rapidamente de la camioneta pero me detengo en seco cuando James toma mi muñeca. Suspiro y me quedo quieta esperando a que James baje de la camioneta, supongo que ha visto a algun socio o algo. Volteo a verlo con fastidio al ver que no planea bajarse, mi cara de fastidio es bastante notoria. - ¿No piensas bajar? - Pregunto desesperada. - Solo queria pedirte una disculpa por lo de hace rato.- Su mirada me deja ver que se encuentra apenado. - No tienes que disculparte por nada, ambos sabemos que frente a las personas debemos fingir amor y eso. Ademas, yo tambien lo habia visto, solo no te lo dije para que no te fueras a incomodar. James ya no responde nada y me observa. ¡Lo se! Se que he mentido y que no debo decir mentiras pero ¿que le digo? ¿le digo que realmente me dolio que todo fuera por el paparazzi y que nada le nacio? Por supuesto que no me voy a exponer de esa manera y menos con
- ¿Que tal estuvo la cena? - Pregunta James cuando ambos nos encontamos dentro de la camioneta. - Estuvo bien, normal como cualquier otra cena. - Digo sin dar tanta informacion. - Yo en el lugar de Gabriel, hubiese reservado todo el lugar, es muy poco una mesa ¿no crees? ¿En donde queda el esfuerzo? - Dice con burla. - ¿Como sabes a que lugar fuimos a cenar? - Lo observo curiosa y James se voltea rapido. - No, en realidad no se a que lugar fueron pero supongo que no reservo el lugar al que fueron. Solo es eso. - ¿Seguro James? Recuero que Gabriel menciono haber visto tu camioneta. - Gabriel esta mal de su cabecita pequeña, yo no tendria motivo para andar ahi. - Como digas. - Respondo riendo y James niega con la cabeza. - Hemos llegado y si me lo permites, me gustaria tapar tu ojos. - Dice James brindandome confianza, pero volteo hacia las ventanas y veo que han tapado para que n
Me levanto por el sonido de mi despertador, para mi desgracia, hoy inicia mi semana de andar vuelta y vuelta para tener todo listo para la boda. James ha dicho que me ayudara algunos dias pero ustedes diganme ¿creen que va a dejar su trabajo para ayudarme? Por supuesto que no lo va a hacer y logicamente, me va a tocar hacer todo yo sola con Leila por supuesto. Me coloco un vestido corto que va pegado, es estilo sueter y gris, me coloco unas botas largas que llegan arriba de la rodilla, dejo mi pelo suelto y tomo un bolso blanco. Slgo lista y entro a la camioneta que James ha mandado para recogerme, resulta que le necesitaba a Leila en su oficina y por eso mando al chofer a recogerme para que me lleve a la oficina y de ahi ya irme con Leila. Llego a la oficina y entro como de costumbre, veo que la mayoria de los empleados andan corriendo de un lado a otro, asi que supongo que James tiene un trabajo bastante importante y ya esta enojado. - Jam
Salimos los tres juntos del restaurante en donde hemos estado probando varios platillos, hemos hecho eso durante todo el dia. James por obviedad, estuvo pegado a su computadora haciendo su trabajo y solo despegaba la vista de la pantalla por un segundo cuando yo le daba a probar un poco de comida. Leila tambien estuvo pegada a su computadora pero me puso mas atencion que James y eso que segun James le dio la semana libre. Cuando estabamos por subir a la camioneta, Leila recibio una llamada en donde le avisaron que la familia de James ha llegado a casa, quisieron llegar antes para estar a tiempo en la boda. ¿Una semana antes? Creo que era suficiente llegar uno o dos dias antes. ¿No creen? - Estoy muy llena. - Digo subiendo a la camioneta. - ¿Esperabas no estarlo? Te comiste todo lo que te dieron a probar. - Dice Leila subiendo detras de mi y despues James. - No iba a dejar que lo tiraran a la b****a, eso seria una gran groseria.
Dias despues... Camino lista en mi habitacion, hoy iremos a comprar solo pequeñas cosas que faltan para mañana, ya esta practicamente todo listo; James me acompaño solo algunos dias y en cosas muy simples. Por supuesto Samantha estuvo muy al pendiente de todo lo que James y yo haciamos juntos y estoy muy segura de que solo esta esperando el momento perfecto para decirme "James ni te quiere". Pero no se lo voy a permitir, asi le tenga que hacer un amarre a James pero se tiene que quedar conmigo por el momento. Bueno, ignoren lo del amarre, tampoco es para tanto. - Mejor me cambio. - Digo cuando me veo al espejo, no me veo tan formal como me gustaria. Me coloco una blusa de manga larga y cuello alto negra, unas medias negras, una falda verde con cuadros en rojo con amarillo claro y coloco unos botines negros. - Asi si. - Digo al verme de nuevo y lista. Escucho mi celular sonar, lo tomo y veo el nombre de