Un mes después
Nos hemos mudado a un lugar agradable. Gracias al conocimiento previo del lugar, sé que lugares son buenos para invertir. Por lo que, apenas bajamos del helicóptero que ya no me causa temor, corro hacia la salida.— ¡Espérame, Dove! ¡Aún no he bajado! — grita Danell en el asiento de copiloto.— ¡Debo reunirme con alguien importante! ¡Nos vemos en la cena! — grito despidiéndome con la mano.Uno de los guardaespaldas corre detrás de mí e impide que el ascensor me baje, por lo que, me toca esperar a mi esposo que niega al verme.— Parece que tengo que bajar rápido del helicóptero, porque parece que mi esposa ha tomado como rutina, bajar corriendo del helicóptero. — dice mi esposo entrando al ascensor.— Lo siento, es que tengo mucho que hacer. — Entonces, voy a comer solo. Oh, mMis sentidos se alarman y yo apunto hacia la fuente del ruido, preparándome para lo peor. Ya he visto mis rutas de escape. Sé dónde tiene Felipe las llaves del auto, así que, puedo tomar las llaves, encerrarme en el auto blindado y huir de aquí.Es un plan practico, uno que puede funcionar si me muevo rápido y no debo matar a alguien, por lo que, me coloco a la altura del hombre que está en el suelo herido y con cuidado apunto a la fuente del ruido.— No se acerque o voy a disparar. No es solo una amenaza. Ya ha visto que soy capaz de hacerlo — advierto.— Mi esposa es muy valiente — dice Danell saliendo de la oscuridad con una sonrisa de satisfacción.Mis manos firmes se tornan temblorosas y mi vista se nubla al punto de no poder ver y por ello, llorar. Cubro mis ojos y lloro hasta que ya no me es posible hacerlo, mientras un grupo de hombres nos rodean sin decir una sola palab
¿En qué momento le di tanto poder a Danell? ¿Cómo es posible que me haya molestado demasiado por sus ‘pruebas’ y al segundo siguiente solo sonreír porque me ha dicho que tendremos una cita?‘Estoy loca. Realmente estoy loca’ me digo mentalmente mientras miro la mano del hombre que espera que le responda a la invitación y yo la acepto cuando apenas la ha extendido.— Pensé que te iba a tomar tiempo aceptar mi invitación, pero, al ver que la has tomado rápido, quiere decir que me he tardado en proponerte esto. — dice Danell y yo trago duro.— No estaba ansiosa por esto, solo que me preocupa que tu brazo se canse — miento y Danell me jala hacia su cuerpo causando que yo me siente sobre sus piernas.— Claro, seguramente es eso. Ahora, deja de estar molesta conmigo. Mi corazón duele cuando estas molesta conmigo — dice Danell con dramatismo
Compramos muchas cosas y el malestar se disipa al punto de sonreírnos e incluso bromear sobre comida picante que deberíamos colocar en la comida para los glotones que se comían las cosas que dejábamos para más tarde.Compramos mucho helado, ingredientes para hacer galletas y tantas cosas más que parecía que iba a crear un negocio de repostería o panadería. Sin embargo, aunque comprábamos mucho, no era suficiente para nosotros al haber tantos hombre que alimentar en casa,— Me gustaría decir que dejemos que la comida de los demás la hagan ellos mismos, pero, si los privo ahora de tus delicias, estoy seguro de que serían capaz de matarme. Así que, al menos deben tener un poco de tarta o galletas que hagas para compensarlos.— No me molesta cocinar para ellos cuando cocino para los dos.— Lo sé, pero, aun no te has embarazado para actuar c
Se estaba esforzando en que estemos bien, incluso en medio de planes donde el dolor se promueve al igual que el engaño. Intentaba no mostrarme solo oscuridad de su parte y no era buena idea.Tenía una vaha esperanza que al ver solo cosas malas en él, dejaría de quererlo, pero, al ver que él es capaz de hacer como estas, me hacen arriesgarme a algo que es inseguro, pero, que piden mucho más que solo salidas a supermercados. Aunque este sea un buen comienzo.— Todos dicen que soy luz, que soy pureza e inocencia. — susurro quedado a pocos centímetros de tocar sus rodillas.— Eso eres, Dove.— Lo fui. Era una mujer inocente porque aunque sabía que hay maldad, no pensé en los detalles que ahora si tengo. Ahora no dudo en disparar, eso no lo hace una persona inocente.— Bueno, en eso tienes razón.— Jesucristo no habló en ningún momento que
Algo es claro aquí, no puedo seguirles el ritmo a las ocurrencias de mi esposo. Por lo que, debo tomar un respiro para entender un poco lo que quiere decir y poder centrar al hombre que parece saltar de pensamiento en pensamiento, que no tiene algún tipo de conexión entre estos.— Cuando entramos al supermercado, hablaste de ser como una pareja romántica que va de compras para preparar la comida y ahora estás hablando de ser rebeldes e incluso, exponer la vida al manejar a gran velocidad.— Quiero saber que te gusta más, si el romance dulce o la adrenalina de manejar rápido mientras huimos de padres estrictos. — dice Danell guiñando uno de sus ojos.— Estás loco.— Sí, lo estoy. Es aburrido ser una persona seria y fría porque soy un mafioso o un ceo que siempre debe ser así. liberémonos un poco, cariño. Es momento de portarnos solo un po
Desvío mi mirada deseando que mis mejillas ruborizadas, no estén delatando mi emoción en estos momentos, aunque sé que ya deben haberme delatado. Ya que, la sonrisa que me muestra mi esposo en estos momentos, significa eso.Solo cuando yo misma me delato, es que sonríe de esa manera como si le causara satisfacción verme tímida. Algo que no me agrada mucho, porque se nota que disfruta cuando yo misma me expongo.— ¿Desde cuándo conoces este lugar? — pregunto desviando el tema.— No lo conocía realmente. No de manera personal. Es solo que en mi tiempo libre, comienzo a buscar lugares interesantes que me gustarían visitar y que no recuerden mi discapacidad.>> Aquí no es necesario caminar. Por lo que, la silla de ruedas no es útil. Sin mencionar, que aquí hay un lugar muy agradable donde no somos jefes de la mafia, si no, dos personas que disfrut
¿Cómo se siente anotar un gol? No soy muy fanática del futbol, pero, en estos momentos ni los logros de Leonel Messi o Cristiano Ronaldo, podrían superar el logro que acabo de tener contra mi contrincante de amor.Luchar porque alguien lo quiera, es una tarea difícil, porque el querer es un sentimiento que no puede imponerse y yo, no tenía ventajas frente a Danell. No soy la mujer que seguramente él frecuentaba y mucho menos, tenía pensado que llegáramos hasta aquí.Así que, con él estaba trabajando sobre un terreno inexplorado para los dos, uno en el que aunque tenía muchas desventajas, acababa de meter un gol. Con la cancha en condiciones peligrosas y jugadores expertos, he metido un gol que me corta la respiración.— Rayos… — susurro llevado mi mano al pecho.Me he entrenado para este gol, las comidas que le hacía, las recompensas dulces
Las dudas sobre mi matrimonio, se disipan al punto que no dejan un solo rastro de esta. Por lo que, sin importarme donde me encuentro, profundizo el beso, donde la comida que tanto nos gusta, deja de ser relevante.Por ello, entre los dos, tropezando, dejamos la comida a un lado, mientras yo me subo sobre las piernas del hombre que me hacía inmensamente feliz solo con unas pocas palabras. Así de poderoso es mi esposo en mis emociones.— Si continuas así… — dice Danell cortando sus palabras por continuar con nuestro beso — No… podré… contenerme.— No te contengas entonces — susurro sin sentir vergüenza, por lo que, estoy promoviendo.Sé que no es correcto tener relaciones sexuales en un auto en medio de un lugar solitario, donde podrían vernos o atacarnos, pero, esas pequeñas cosas no me importan ahora y por eso, me concentro en disfrutar de mi esposo y no en l