Capítulo 132: Ser de ayuda

Horas despuésEl viaje en helicóptero, se extiende por más de quince horas. El piloto, hace un gran esfuerzo por volar durante tanto tiempo e incluso, en la noche sin poder encender una sola luz, porque aún seguimos en peligro.Prácticamente, voló a ciegas por más de cinco horas, hasta que finalmente, llegamos a tierra firme. Tantas horas con el mar bajo de nosotros y sin saber hacia dónde nos dirigimos, me hizo dormirme gran parte del viaje.Algo que resulta extraño, porque se supone que debería estar preocupada por lo que pueda sucedernos, pero, me dormí y aún tengo sueño. Sin embargo, apenas hemos llegado, cuando los disparos comienzan a escucharse a lo lejos.— ¿Cómo es posible? — pregunto confundida.— Debemos movernos rápido. ¡Que alguien lleve a mi esposa a un lugar seguro! ¡Debemos terminar con la amenaza

Capítulo 133: Ayudar en lo que puedo

En el pasado, no quería ser parte de toda esta violencia, pero ahora me siento muy feliz que mis decisiones de antes, puedan ser útiles en este momento. Aunque he invertido el dinero de Danell, no quiero tocarlo sin su consentimiento.Por lo que, nada más pongo a disposición el dinero que había dejado para alguna situación de emergencia y esta era una. Cómo me había comprometido, en todo este tiempo solo he utilizado el porcentaje de ganancias destinadas para las personas que más lo necesitaban y el restante, lo había dejado guardado para estas emergencias qué sabía que podrían pasar.Necesitaba ser una mujer ahorrativa y precavida, por eso, había dejado todo ese dinero como si lo hubiese olvidado. Así, no tendría la tentación de utilizarlo. Por fortuna, por pensar de esa forma, tengo la posibilidad de ayudarlos ahora.— Aunque sé que es una mujer magnífica, en todo el sentido de la palabra, con esto confirmo que usted no deja de sorprendernos. —Dice el chico y yo sonrío.— Necesitaba

Capítulo 134: Actuar como niño

Danell ayuda aunque es brusco. Es como si culpara a los chicos por lastimarse y eso causa que la mayoría se lo piense dos veces para tratarse las heridas. Ya que, no se acercan a mí, por la mirada asesina de mi esposo y tampoco, se acercan a él por lo brusco que es.Así que, solo Darwin está trabajando y parece que lo hace mal. sus vendajes me dicen ello. Por eso, suspiro profundo y camino hacia Danell, para después sentarme en sus piernas y sonreírle— ¿Ya has terminado? — pregunta Danell y yo me acerco a sus labios.— ¿Qué tanto disfrutas de nuestro tiempo en la cama, cariño? — pregunto acariciando el cabello cerca de su nuca.— Sabes la respuesta, Dove. — dice mi esposo y yo comienzo a asentir lentamente, preparándome para la pregunta que voy a hacerle.— ¿Cómo te gusta que te bese? — pregunto curiosa y &e

Capítulo 135: Discusiones y drama

Doce horas despuésNi siquiera ha sido necesario comprar la casa, porque apenas estamos subiendo al avión, cuando nos reportan más daños. Los teléfonos de los que aun los conservan después de un enfrentamiento que casi les cuesta su vida, comienza a sonar.Por eso, mientras subimos las escaleras, los chicos corren para informarle a Danell quien está a mi lado, subiendo por su rampla. Mi esposo se detiene cuando llega al piso del avión y yo miro hacia los hombres que hiperventilan, por haber corrido.— Señor, tenemos malas noticias. — dice el señor Ferrer.— ¿Qué propiedades intentaron destruir?— Solo nos queda una que no ha sido tocada. Las demás, han sido bombardeadas. — informa el señor Ferrer y yo abro los ojos ante esa información.‘¡Eran al menos treinta laboratorios y un sinfín de propiedades do

Capítulo 136: Resultar herida

El viaje avanza al menos, dos horas con tranquilidad, sin embargo, cuando estoy por dormirme, algo estremece el avión en el que estamos y por ello, yo me asusto. De inmediato, abro mis ojos buscando a Danell quien mira a todo a su alrededor.— Esto no puede ser posible. — dice Danell mirando a cada lado con preocupación.— ¿Qué sucede?— Nada, solo es turbulencia. Solo eso — dice Danell, mientras veo como todos corren de un lado al otro.— Todos aquí sabemos que no es turbulencia, Danell. — digo intentando estar calmada, aunque no puedo estar así, porque todos los chicos están corriendo de un lado al otro, con evidente preocupación.— Debemos movernos a un lugar seguro. — dice Brandon y yo miro hacia la ventana, notando que es de noche y que no hay una sola luz debajo de notros o a nuestro alrededor.— Estamos en medio del mar, ning&

Capítulo 137: Estar en peligro

Sé que eso no significan cosas buenas. Danell ha mencionado que Louis es de las personas más peligrosas en su familia y recordando que era su asistente en este tipo de trabajo, no me sorprende que haya sabido el enemigo donde están todos los laboratorios y propiedades de valor para el heredero.— Eso explica muchas cosas. — susurro mientras veo la sonrisa de Louis.— No importa. Vamos a concentrarnos en acabar con él pronto. — dice Danell avanzando conmigo sobre sus piernas.Danell se coloca en su posición para poder pilotear el avión, mientras Louis se mueve con violencia hacia nosotros, al punto que intenta colocarse frente a nosotros. Por lo que, Danell se mueve rápido alejándonos de la mira del avión que se ve listo para una guerra.Mi conocimiento en aviones es nulo, pero, podría decir que el avión en el que nos encontramos, no tiene las mismas herramientas p

Capítulo 138: Estar en el mar

Capítulo 139: Orar y nadar

Estoy siendo sincera con él. En el pasado, no estaba en medio de tanta violencia y podía caminar con un poco más de libertad. Pero, comparando esas dos vidas, podría decir que con ellos, he vivido mejor.Y no me refiero a los lujos, si no que, he aprendido a sobrepasar los límites que sentí que tenía. Ellos me han llevado a retarme una y otra vez. Me han hecho expandir mi mente para que todo ese nuevo conocimiento llegue a mí.— Vivo de una nueva manera y eso me hace feliz. Los deseos de morir que experimenté por la ausencia de mi madre y hermana han desaparecido. Duele aun su ausencia, pero, puedo vivir con ese dolor.>> Sigo sin tener la vida que creí que tendría cuando la imaginé hace cinco años, pero, eso me ha ayudado a dejar de planear, ya que, esto es mejor de lo que pensé. Así que, no se culpen sea lo que me suceda. Porque quedándome o marchándome, estaré feliz.— Señora, no diga cosas así o desearemos morir ahora mismo. — dice Felipe y yo respiro profundo.