Mundo ficciónIniciar sesión
Mark miraba al mayor de arriba abajo para después hacerlo a sí mismo.
-Y una mierda si crees que voy a entrar así-
Gideon se golpeó la cara.
-A ver niño, David está ahí dentro y eso es un puto club de BDSM extre-mo y visten así-
En frente de ellos, Ryan ponía caras de todos los tipos mientras que el tal Danny se partía de risa.
Él había sido quien había llamado a su DOM para que le trajera la ropa que en ese mismo momento vestían Gideon y Mark.
-¡¡Pretendes que me pases enseñando mis posaderas por un jodido club de sadomasoquistas que me podrían meter mano??-
Gideon miró la parte posterior del moreno.
-Eehh- la voz de Ryan le puso en alerta y se enderezó
-Solo miraba si tienen algo de malo sus cachetes- se excusó Gideon.
-Tú
Capítulos relacionados
*XXXV*
Había puertas a ambos lados del corredor.-Vale, tú abre las de la derecha que yo abro las de la izquierda- mandó Gideon.-¿Y por qué no al revés?- espetó Mark.Gideon rodó los ojos.Empujándolo hacia su lugar se intercambió.-Ea, tú las de la izquierda y yo las de la derecha ¿Contento el niño?--Mira que estreno el jodido puñal contigo- advirtió.-Reservate esa ira para Matt-Una por una, ambos iban abriendo las puertas.Y fue cuando empezaron a oír los gritos.-Dave-Mark se olvidó de las puertas y corrió pasillo a través buscando de dónde provenían los gritos.Gideon se apresuró tras él.Cada vez los oían más cerca hasta que…Dieron con la puerta de dónde salían.Los dos se miraron.
*XXXVI*
Gideon llegó junto a Ryan y Danny.Ambos se apresuraron a abrir la puerta del coche donde Gideon y Mark habían ido.-¡Gid, Mark no tiene ni idea de…usar un látigo, ve, ve, ve a ayudarle!- pidió Dave-Tranquilo, voy enseguida- calmó Gideon.Ryan se dio prisa en echarle una manta por los hombros a Dave mientras Danny llamó a la central.-Llama a Mitch y dile que Dave está bien pero que hay que llevarlo al hospital- dijo Gideon a su pareja.-Claro-Gideon besó a Ryan para inmediatamente regresar en la ayuda de Mark.Ryan acarició la mejilla de Dave-Ya estás a salvo- calmó.Oyó cómo su colega terminó de hablar por la radio y le anunció:-Vienen tres coches patrulla--Bien-Ryan dirigió la mirada hacia el club.Gideon reapareció en la puerta del cuarto.
*XXXVII*
Cómo un huracán Mark llegó al hospital con Dave a quien ya estaba esperando Elenah y Garrett.No había casi nadie de los trabajadores salvo tres auxiliares también pertenecientes a la comunidad.-Rapido, ponlo en la camilla- mandó Garrett.Elenah miró a Dave.Estaba despierto pero débil.-Ya cariño, verás que mañana estás en casa- calmó ella acariciándole la mejilla.Dave le sonrió.Levantando la cabeza un poco miró a Mark.-No…no te vayas- pidió.Mark tragó saliva.-No pienso-Rompiendo la distancia entre ellos, se inclinó hacia su rostro y le besó dulcemente en los labios.Dave acarició su cara.Elenah empujó la camilla hacia la sala de revisiones mientras Garrett se volvió al moreno.Posándole una mano en el hom
*XXXVIII*
-Terrible caso; Se cierra el club de la séptima avenida tras él macabro hallazgo de dos cuerpos.El club tapaba cierta modalidad ínfima y horrible del mundo del sadomasoquismo y dónde se llevaban a cabo terribles “maltratos”.Uno de los cuerpos pertenece a un varón joven que accidentalmente intentó escapar por una ventana con la mala suerte de acabar degollado por ella.El otro pertenecía a una chica.Ambos, al parecer mantenían una relación amorosa y que ocultaban de los demás por practicar el BDSM extremo.El informe del FBI detalla el caso dándonos como información a los medios que el móvil fue meramente por los celos.El chico llevó a cabo una castración manual en la chica y después quiso escapar cuando los federales y cuerpos de policía irrumpieron en el club.También se encontraron varias bols
*XXXIX*
Un año más tarde…-Mark nos tenemos que ir…-Lo encontró jugando con los dos bebés de apenas cuatro meses.Los tres, en la gran cama de matrimonio yacían medio tumbados.Los dos bebés bocabajo reían las monerías que su padre les hacía.Dave rió en silencio viéndolos.-¿Mark?-El moreno se giró hacia él.-Nos tenemos que ir a casa de Chris- dijo caminando hacia él para dejarse caer con cuidado sobre la cama.Mark le rodeó por la cintura y se lo atrajo hacia sí para darle un más que dulce beso.Los bebés catearon hacia ambos riendo.-Cuando digas nos vamos- repuso Mark.Dave le acarició la mejilla.La barba empezaba a crecerle.Una mano de Mark tocó la suya.Los dos tenían sus alianzas.Con sus iniciales entre
*TRES*
-Papi ¿Cuándo tendrás un bebé?-A Derek se le resbaló el plato pero logró cazarlo al vuelo.Metiendolo en el lavavajillas se volvió para mirar al niño.-¿Y para qué quieres que tenga un bebé, Ben?- le preguntó Derek apoyándose en la barra de la cocina, inclinando el rostro y mirando con dulzura al pequeño.Ben.Así le pusieron de nombre cuando Elenah se lo dio.Lo vieron con meses cuando al fueron a visitar a Dave tras tener a los mellizos.Lo llevaba Elenah a toda prisa para que lo revisaran.Lo habían abandonado en un cubo de basura donde Ryan junto a Danny, en una de sus rondas, lo encontraron llorando, helado, con algunos hematomas.A Derek se le fueron los ojos detrás del bebé de meses que lloraba a pleno pulmón…Y Mitch se dio cuenta.N
*MITCH & DEREK*
Igual que un felino, el moreno se deslizaba a través de la cama.El castaño le observaba atentamente, sentado, descubierto de los pies a la cabeza y aguardando a que éste se le pusiera a tiro.Ninguno apartaba los ojos del contrario sino que se mantenían la mirada.-Ven aquí- mandó el castaño entre autoritario y dulzón.El pelinegro sonrió travieso al mismo tiempo que mordiéndose el labio inferior negó sutilmente con la cabeza.-Nene, ven aquí- volvió a mandar también sonriendo el mayor.-A-ha- de forma juguetona, el moreno se inclinó tocando con su pecho el lecho y elevando el trasero.Retaba al castaño con los ojos.-Si no vienes voy a castigarte muy severamente- advirtió el mayor sin borrar su sonrisa.Estirando las manos, el joven acarició las piernas de éste.-Castigueme, mi se&
*DAVID*
-¿Mitch, por qué no soy como tú?-El castaño mayor miró a su hermanito.El pequeño, de pie junto a la puerta de su habitación, con su pijamita de Spiderman, un lobito de peluche en una manita y los ojitos tristes, miraba a su hermano.-¿Por qué dices eso peque?- preguntó un Mitch de trece años.El pequeño, de tan solo tres años pero con un vocabulario más extenso que el de cualquier adulto y más inteligente, caminó hacia él.-Yo...yo no tengo...- el menor bajó el rostro -No tengo colita, Mitch-Mitchell supo porqué lo decía.-¿Y eso qué peque?-El niño alzó la vista...Y entonces su hermano lo vio.Vio cómo caían las lágrimas de sus bonitos ojos.-David, ¿Por qué...por qué lloras?- Mitch dejó e