Otro día más de clase, la rutina se hacía insoportable, los malestares del embarazo eran cada vez mayor, Elizabeth esperaba con ansias el final del último semestre.Tener que ver a David con Amaranta era una tortura, las prácticas de animadoras eran cada vez más extenuantes, era momento de nombrar una nueva capitana así que Elizabeth decidió abrir el concurso para elegir la nueva capitana.Todo estaba listo, las presentaciones comenzaban, mientras Elizabeth, Alice y Francis decidían en cada presentación quien era la chica idónea para su reemplazo.Finalmente, entre tantas presentaciones y bailes ya tenían la nueva capitana, América, una linda chica de segundo semestre, Elizabeth haría su último baile en un juego que tendrían los chicos con una universidad vecina, allí después del juego Elizabeth presentaría la nueva capitana.Al terminar las chicas regresaron a la habitación, Elizabeth de inmediato entro a la ducha, descansarían unas horas para luego ir a dar un pase con Jackson.—Chi
Al llegar del hospital Elizabeth entro a la ducha, mientras Alice y Francis preparaban la comida, después de ducharse Elizabeth se unió a las chicas en la cocina como siempre lo hacían.— ¿Qué haces aquí Eliza porque no estás acostada? —pregunto Francis. —No se alarmen, solo me voy a sentar aquí mientras cocinan, saben que odio estar en un solo lugar sin nada que hacer. —Respondió Eliza. De inmediato Alice intervino para recordarle que el doctor le había mandado reposo y que tenía que cuidarse. Incluso mientras Elizabeth se duchaban habían hablado con el Sr. Miller, quien era subdirector académico y le habían informado lo sucedido.—Cómo van a decirle a Miller que estoy embarazada, chicas, la idea era que nadie se enterará. Respondió Elizabeth.—Tranquila le explicamos al Doctor lindo tu situación y logramos que en el justificativo solo colocará la caída que sufriste, así que no hay nada que temer, por eso debes tener reposo absoluto, mira que la semana que viene es la presentación
Luego de tanta fiesta, tragos y diversión, los estudiantes se marchaban a las habitaciones, algunos dando tras pies, otros que dormían en diferentes lugares del jardín de la fraternidad eran despertados por el sol.David, que a duras penas podía abrir los ojos, le preguntaba a Jackson cómo había llegado a la habitación.— Realmente no llegaste, te tuve que sacar de la habitación de Elizabeth donde te encontramos aferrado a ella sin quererla soltar, Alice y yo te buscamos por todas partes minutos después que salieras de la fiesta.— No sé qué tanto le dijiste antes que llegáramos, lo que sí puedo decirte es que delante de nosotros le decías que la amabas, que era la mujer de tu vida y que siempre lo sería, pero que debías seguir con tu compromiso y te aferrabas a ella llorando como un niño rehusándote soltarla.— No puedo creer que haya hecho eso tan grande que es el campus y justamente fui a parar en la puerta de la habitación de Elizabeth y por si fuera poco decirle todo eso. —dijo D
Al despertar, Elizabeth solo pensaba en el comportamiento de David y como estaba arruinada su vida; quizás todo fuera diferente si aún estuvieran perdidos en esa isla donde comenzó todo.Pero así era la vida y la fiesta tenía que continuar, ya faltaban pocos días para terminar las pasantías y tan solo semanas para la graduación. Después de dejar la cama, Elizabeth entro a la ducha, no había algo que la relajara más que pasar tiempo en la ducha sintiendo cómo el agua tibia recorría sobre su cuerpo.—Buen día, Elizabeth, ¿Dónde estás?. —Dijo Alice.—Ya salgo, estoy en la ducha.—Eliza, que harás después de la graduación, ¿trabajarás para Castell?—No, Alice, me iré del país, hablé con la Sra. Stark y ella me estará esperando.—Quiere decir que te irás a la isla, ¿tendrás el bebé en Jamaica? —Pregunto Alice.—Ya todo está arreglado, me iré a Dubai allí trabajaré, luego trataré de estar en New York para tener el bebé y volveré a Dubai, será muy difícil, pero es lo mejor, no puedo seguir,
Después de permanecer doce horas y treinta minutos en el avión hacia Dubai, finalmente había llegado al aterrizar, la Sra. Stark aguardaba en el coche que las llevaría al hotel.—Sra. Stark, ¿cómo está lleva mucho tiempo esperando?—Eliza hasta cuándo te voy a decir que no me digas Sra. Stark y no tranquila, llegué hace diez minutos y cuéntame ¿estuvo el acto los chicos, cómo están?.—Todos están muy bien, Alice y Jackson se comprometieron muy pronto se casarán, Francis y Christopher son como dos potros salvajes, no hay quien los detenga y como ya sabe David se casa, está semana que viene y el acto estuvo genial, todo fue muy lindo.—Y tu Elizabeth, cómo estás con esto del matrimonio de David, ¿no le contestes sobre él bebe? —Pregunto la Sra. Stark.—Trato de mantenerme en pie y continuar y no le dije nada sobre el bebé, de hecho no volví a hablar con él después de lo que sucedió.—Que triste realmente se veían bien juntos, esa forma en que te miraba era como si nunca ha sido tan feli
Exhausta del largo día Elizabeth llegó al hotel, era inconcebible que tuviera que tolerar la versión árabe de David, aunque Farid era mucho más insoportable, grosero y prepotente.Aunque no podía negar que era muy apuesto y sexi, esa pose de chico malo combinaba muy bien con esa linda cara. —Qué rayos estoy pensando, estoy embarazada y pienso en lo lindo y sexi que es mi jefe; mejor tomaré una ducha y pediré que me preparen algo para cenar.Mientras tanto, al otro lado del mundo, los preparativos de lo que sería la gran boda del año se ponían en marcha. El momento había llegado, Amaranta estaba dichosa, por conseguir lo que quería, por su parte el padre de David creía que había hecho un gran negocio al unir a las dos familias con ese matrimonio y David se preparaba para cometer el peor error de su vida.Trago tras trago, David esperaba que llegara la hora de salir a contraer nupcias con la mujer más detestable que había conocido.—Ya no sigas tomando David, ¿acaso quieres pararte fren
Farid regresó a Dubai e inmediatamente fue a la oficina para pedir cuenta de los terrenos que estaba peleando para su nuevo proyecto, aunque más de estar interesado por los terrenos quería medir la capacidad de acción que tenía Elizabeth legalmente.—Buenas tardes, señores, que noticias me tienen hoy, me levanté con ganas de contratar personal nuevo, así que comiencen a justificar el tener un cargo en mi empresa. —Dijo Farid de manera déspota.—Hoy como que estás de pésimo humor Farid. —Respondió Mohamed, quien era el único que se atrevía a responder ante las insolencias de Farid, después de todo lo conocía desde que era un niño siempre lo guio como a un hijo.Farid con una sonrisa maliciosa y sus ojos clavados en Elizabeth respondió. —Para nada Mohamed, hoy estoy mejor que nunca, con ganas de saber qué es lo que tu equipo tiene para presentar.Casi todos en la sala temblaban al oír a Farid, solo Elizabeth y Mohamed se mantenían inquebrantables ante sus amenazas; De inmediato, Elizab
En la mañana Francis escucho movimiento dentro de la suite, era Elizabeth que se alistaba para regresar a la oficina.—Buen día, dormilona, allí está el desayuno, espero te diviertas, ya me voy a la oficina adiós.—Que tengas un excelente día y que el bello de tu jefe te reciba con un gran beso.—Sabías que estás muy loquita, verdad Francis.—Claro que lo sé mi querida Elizabeth, cierra la puerta al salir dormiré otro rato. Al salir del hotel, un elegante auto negro esperaba por Elizabeth. —Buen día, señorita Elizabeth, el Sr. Farid me pidió que viniera por usted. —Buen día, Ali, muchas gracias, el Sr. Farid ¿ya está en la oficina?—No señorita, él aún está en su casa, la orden es llevarla a usted a la oficina y después ir por la mujer de la vida del Sr. Farid al aeropuerto. Elizabeth no emitió palabra alguna. «Es obvio que un hombre como él tiene pareja debe ser una supermodelo, insoportable; bueno y porque me afecta mi trabajo es ganar casos y en eso me debo enfocar», pensó.—Buen