43. “Así se siente la felicidad”FARID ARAY —¿Es mí avión papi?— preguntó Emira con la boca abierta, encantada reparando cada detalle desde la nariz a la cola aquel moderno pájaro de metal que yacía imponente en medio de la pista del aeródromo privado cerca del areopuerto internacional de la ciudad de Atlanta.—¿Es mío?¿Mío mío?—repitió otra vez con una sonrisa pícara que provocó en su madre a dos pasos por detrás de nosotros, la mirara con una ceja enarcada por aquel recién descubierto interés por la aeronáutica civil de nuestra hija —¡Si lo quieres, pues es tuyo!— respondí mordiendo mis labios y mirando fijamente a Camil, que me respondió con una sonrisa cómplice; ella comprendía que aquella frase que yo acababa de pronunciar también iba con ella. Si Camil me quería yo podía ser suyo de por vida. Ella en respuesta mojó sus labios y bajo la cabeza disimulando que se arreglaba el pelo, mientras caminaba frente a la tripulación de la areonave que estaba lista para abordar y despegar ru
44 "Coincidir en Fantasias"FARID ARAYEl aterrizaje fue tranquilo, excepto por el terremoto de seis años que se movía inquieto en el interior de la cabina de aquel jet.Camil sonreia aún con el semblante tomado por el sueño. Era lógico que debía estar demasiado agotada, pues según sus propias palabras su servicio de guardia había sido bastante complicado; según sus propias palabras.Esta mañana antes de abordar había sido testigo de ese raro ritual entre mi hija y su madre, en el que Camil comentaba a detalle todos los procedimientos que había realizado; y la niña parecía grabar todo aquello. Mi hija sin duda sabía demasiado de medicina para solo tener seis años, y algo me decía que si por fin lograba mi propósito en la vida, dentro d e unos años sería divertido tener a dos doctoras hermosas en casa.Ya yo tendría que asegurarme de traer al mundo a otro personaje emblemático que se encargará de seguir con los negocios de la familia y se interesará en los negocios del petróleo y
45 " Doblegando voluntades" CAMIL DE LA FUENTE No quería someterlo, ni destrozar su voluntad, solo deseaba conciliar el pasado sin ningún deje de orgullo. Farid me quería tal y como yo era, y para eso sin dudas había que estar fuera de equilibrio mental o estar muy enamorado; y ciertamente me inclinaba la más por la segunda opción. Farid continuaba enamorado de mi, esa era la única explicación para esa escapada casi romántica que nos habíamos dado junto a nuestra hija. Entreabrí los labios húmedos viendo cómo él se encargaba cómo todo un experto de abrir la costosísima botella de vino Cabernet Savignon que había traído el servicio de habitaciones. Tomé dos copas y me puse de pie, abandonando la sala para irme a la habitación principal. Estaba segura que él me seguiría hasta el fin del mundo si eso era preciso. Él camino tras de mi, prácticamente a tientas; porque al voltearme descubri que venía perdido en mi figura. — Está habitación y tú me hacen sentir como una princesa
46 "Cuánto la amo, y cuánto la deseo" FARID ARAY Era el segundo día, de nuestro fin de semana familiar y ya al día siguiente al atardecer regresaríamos a Atlanta. Estaba en paz conmigo mismo y con ellas, y atesoraba cada momento único que habíamos vivido. Estaba ya atardeciendo y el sol comenzaba a esconderse y vimos aquel ocaso juntos y tomados de la mano, contemplando cómo Emira jugaba con otros niños de su edad en un pequeño parque cercano a una de las piscinas del resort. Era fácil sentir que la amaba como la primera vez, pero ahora era más intenso, porque sabía perfectamente que ya no sería capaz de dejarla marchar nunca más y que este fin de semana en familia era sólo el comienzo de un amor para el cual no existirían los límites ni las ataduras, porque era un amor inmaculado y totalmente merecido para ambos, sacando luego la conclusión, que al fin y al cabo yo había encontrado al amor de mi vida, la cual hasta hacía un par de meses era solo una quimera. Mi amor del pasado y m
47 UNA FIGURA PATERNA CAMIL DE LA FUENTE ¿Qué soy… o qué somos en realidad? Me preguntó mientras que él no suelta mi mano caminando por el parque tras Emira. Solo hemos pasado un fin de semana juntos, y los momentos que compartimos a ratos hace solo una semana; así que aunque quiera… es difícil para mi confiar.Aunque Farid también se comportaba diferente, no quería esconder nada, no le importaba la opinión de nadie , y no le importaba un carajo la opinión de Mara. A estas alturas mi madre se había convertido en la mala de la historia, al punto de tenerme absolutamente nerviosa de que puestera aparecer en cualquier momento.Quieria concentrarme y pensar en el futuro… Mi presente me daba más seguridad que el pasado, solo era cuestión de Olvidar, perdonar y Amar con intensidad. {***}Emira se divirtió tanto, que casi suelta algunas lágrimas cuando llegó a la pista del aeródromo privado de Orlando nuevamente para retornar a casa en el jet de su padre. Se había divertido realmente
48 VIVIENDO JUNTOSFARID ARAY Bajamos del Jet, y por supuesto yo era el más feliz de todos.Con mi hija en brazos, y mi mujer a mi lado era un hombre que podía lograr lo imposible.Esta vez vamos directo a la mansión, y me alegra que así sea. —Necesito una ducha espetó Canul tan pronto entramos. Hasta yo estaba necesitando una ducha que nos hiciese recuperar un poco las energías gastadas en el largo día, en el que Emira nos había hecho volver a los lugares que más le habían gustado y eso había significado caminar kilómetros en el interior de los parques .Ahora nuestra niña parecía una bendita piedra, mientras que nosotros estábamos exhaustos. Su madre trato de despertarla un poco para que cenara algo y no durmiera con el estómago vacío, pero estaba demasiado cansada. La subimos a dejar, y Camil y yo optamos pedir comida a domicilio.La cena llegó en un dos por tres, cenamos en la barra de la cocina, rememorando los mejores momentos del viaje. «unos cuantos de ellos… demasiad
49 CUANDO EL AMOR NO ABRUMACAMIL DE LA FUENTE—Sé que te desespera perder el control Farid… pero este momento es mío. Tú eres mío, ¡mío para cabalgarte durante toda la vida!— anuncio entre gemidos mientras contoneo mis caderas marcando infinitos sobre él deliciosos miembro inflamado que amenaza con robarme cualquier vestigio de inteligencia. Me pongo tan bruta como él, cuando me posee así. Me muevo con fuerza, pero él solo sube las caderas para que se vaya más profundo dentro de mi. Sus manos en mis caderas me anclan a él, presionándome hacia su v3rga dura, para que no me vaya lejos. «Como si quisiera irme alguna parte ahora mismo». Aún así, a pesar de la presión que me ejerce, juego con la cadencia, con el ritmo, y con el movimiento de mis caderas al punto de ponerlo a morder sus labios para no dejarse ir de un momento a otro.—No juegues con mi deseo malcriada— jadea pero no puedo parar. Lo que hacemos es demasiado delicioso.—¿No te gustó jugar anoche conmigo?— lo reto mordi
50 UN DÍA DIFÍCIL CAMIL DE LA FUENTECamino apurada por los pulcros pasillos del hospital. Acabo de salir de la entrega de guardia, y el día parece ser prometedor para poner en práctica todos mis conocimientos de medicina.Marta me sigue a unos pocos pasos, pero esta demasiado ocupada distribuyendo el trabajo de su equipo de enfermeras.Hoy estaré cubriendo el servicio de urgencias otra vez, además en la tarde tengo dos cirugías programadas, una con Dave, y otra con el jefe de cardiología.Al menos dormí bastante bien anoche, y Farid me hizo el desayuno y el amor esta mañana antes de salir al hospital. Eso es lo que me mantiene con esta sonrisa estupida en el rostro a pesar de que ya me hayan avisado con palabras hermosas, que esta guardia me destrozará las piernas por las horas que pasaré de pie.Realmente pienso que debí especializarme en algo más sencillo… quizás dermatología o psicología. ¿Y cómo? Si me apasiona la cirugía general, y lo descubrí recién comencé en la escuela de me