Lindsey estaba observando dormir a los trillizos en la cuna, ya habían pasado tres meses desde su nacimiento. —Lin, vamos a la sala de descanso, es hora de que tú y yo tengamos una conversación sobre Lina. Lindsey se intranquiliza, meses atrás había querido hablar con su abuela sobre su madre, pero con lo del embarazo ese tema había quedado en el olvido, tomó la mano de la anciana y se dirigieron a la sala de descanso, se sentaron juntas frente a frente. —Mi niña lo que te voy a contar, tómalo con calma, una parte me lo contó tu madre y otras son investigaciones que hice en su momento. —Está bien, yo también estaba por preguntarte sobre mi madre y ¿por qué mi padre me odia tanto? —Quiero que sepas que tu madre no murió por una enfermedad, a ella la mataron y la empresa textil Rose S.A., y la mansión que era de tu madre te pertenece. Lindsey al escuchar que a su madre la mataron se congeló de inmediato, sin comprender del todo lo que acababa de oír, una palabra solo pudo salir de
Cuatro años después. En el aeropuerto de LaGuardia al este de Manhattan, estaba aterrizando un avión privado, de él descendía una hermosa mujer, era acompañada por una señora mayor de edad y tres niños de cuatro años cada uno, era una princesa y dos mini caballeros. Lindsey se mueven con elegancia hacia la salida, donde un auto lujoso los estaba esperando, del interior desembarco Sussan, antes de que pudiera reaccionar tres pequeños torbellinos salieron corriendo y saltaron sobre ella. —Abu...elitaaaa, te extrañamos —los niños tartamudean mientras abrazaban a su abuela por la cintura. —¿Cómo han crecido mis tesoros? ya no los reconozco desde la última vez que lo vi. ¿Qué grandes están? —Sussan estaba feliz, por fin iba a pasar más tiempo con sus niños. —¡Aja! Y a mí no me van a dar un baboso beso —protestó Janna con los brazos cruzados. Los niños al verla salieron a su encuentro, el primero en llegar fue Leno mientras Luna y Lucas gritaron. —Tiiaaaa… Janna. Las mujeres se salud
Lindsey llegó a empresa textil Rose S.A., junto a Isa, ella sabía que lo que le esperaba allá dentro no sería fácil, la empresa estaba casi en bancarrota, una de las cosas que nunca le perdonaría a su padre, ella tomaría las riendas de su empresa para sacarla a flote y continuar con el legado de su abuelo, entró a paso firme y con la frente en alto por el pasillo guiada por guardaespaldas, entraron en el elevador privado para directivos, los empleados la miraban sin saber que les esperaba con la nueva CEO.Al llegar a su oficina la esperaba Janna junto a Dexter, Isa se dirigió a la sala de juntas para organizar la reunión, allí se encontraban 12 personas, 9 hombres y 3 mujeres, la mayoría eran directivos de las áreas, también se encontraba el otro socio junto a su asistente.Isa entró empodera a la oficina para ordenar los documentos que serán entregados a los directivos.—¡Lin! Están todos los directivos y socios en la sala de conferencia, podemos comenzar la reunión.Dexter estaba e
Lindsey marchó hacia su oficina sin esperarlo, al entrar rodeo su escritorio, en el momento en que se sentó, vio con el rabillo del ojo como Kyle dibujo en la comisura de sus labios una sonrisa de satisfacción, ella le puso mala cara.Kyle sin apartar la mirada de su presa, se sentó frente a ella con voz fría, pero animada, comentó.—¡Te felicito! Veo que pudiste recuperar la empresa de tu madre.—¡Gracias! — con las cejas enmarcadas y segura de sí misma inquirió—. ¿Quiera comprarte el 45% de las acciones que tienes en tu poder?—Esas acciones no están a la venta, me interesa entablar negocios con esta empresa.—Tú tienes tus empresas de publicidad y de modas, esta empresa no es nada para ti, está en la quiebra y no veo el interés —trataba de persuadirlo.—Con mi ayuda podemos formar un equipo y verás que en poco tiempo muestras compañía estará en el mercado, además, seré el principal comprador de la materia prima.—Señor Pratt, no quiero tener ningún trato con usted, ni tampoco quier
Los guardaespaldas se aproximaron al tener el entorno controlado. Mario, uno de los guardaespaldas de Lindsey se acercó junto a Óscar que estaba herido en el hombro. Cuando Kyle abrazo a Lindsey Óscar herido fue dar apoyo a su compañero. —¡Lin! No pudimos atraparlos, dispararon desde un carro y se dieron a la fuga, debemos llevar a Óscar al hospital, recibió un disparo en el momento que la protegió —aclaró Mario con la voz palpitante. Lindsey echó un vistazo al hombro de Óscar que sangraba y se llevó la mano a la boca. —¡Ay dios! Vamos al hospital rápido. Óscar reflejaba una expresión de dolor en su cara. Isa se le acercó para revisarlo. —¡Lin! Será mejor que vayas a casa y yo me voy con Óscar al hospital. —¡Yo te acompaño Isa! ¡Janna ve con Lin a la mansión!—soltó Dexter agarrando a Óscar del brazo—. Nos vamos en mi carro, para que tu otro guardaespaldas te acompañe. —Yo las llevo, no acepto un ¡NO! Como respuesta, antes de que digas algo, mira los cauchos traseros de tu carro
Ha transcurrido un mes desde que Lindsey tomó el mando de la empresa.Kyle todas las mañanas ha buscado la manera de hablar con ella sin tener éxito. Le enviaba todos los días un ramo de rosas rojas, por dos semanas veía algunas empleadas salir feliz con un ramo de rosas de la oficina de su jefa, luego desistió de esa idea.Él se encontraba en su despacho sumergido entre papales, levantó la cabeza cuando escuchó una voz familiar.—¡Qué bueno verte la cara Kyle! Tengo días tratando de contactarte contigo —expresó Maximiliano con un tono de voz amable mientras se acomodaba en la silla que se encontraba frente al escritorio de su primo.—¡Hola Max! Mi vida ahorita es complicada, apareció nuevamente mi obsesión.Maximiliano levantó las cejas, por su mente pasó «¿Será que está seducido por Catrina?»—¡Primo! No me digas que volviste a caer en las garras de Catrina.—¿Qué cosas dices? Catrina fue lo peor que dejé entrar en mi vida —al escuchar ese nombre su mirada se oscureció.—¡Por eso es
Al llegar a la entrada de la mansión del abuelo Hugo, Lindsey les informó a sus guardaespaldas que allí se encontraban a salvo, que los llamaría cuando estuvieran listos para regresar a su mansión.Sussan los recibió con delicadeza, los niños al ver a la abuela no dudaron en salir corriendo a su encuentro.Fuera de la misión a los lejos había una persona que los observaba.—Así que la mojigata tuvo tres hijos, ¡interesante!Dentro de la mansión las personas estaban regocijadas con los niños, el abuelo Hugo estaba embelesado con sus bisnietos, mirada a Lucas y a Leno con devoción era la viva imagen de su papá, escuchaba a Lucas hablar y era como tener de nuevo a su Kyle pequeño. Luna estaba pegada a su abuela Sussan quien la consentía en todo, y Lindsey solo miraba la escena con alegría.El ambiente fue interrumpido cuando entró Kyle. Él no podía creer lo que sus ojos miraban, ver a Lindsey con ellos le confirmaba su descubrimiento. Se quedó estático mientras su corazón trataba de sali
Los niños le contaban a Kyle sus aventuras en Florencia, Luna era una parlanchina, que no paraba de hablar.Transcurrieron unos minutos cuando entraron a la estancia dos niños alegres de unos 10 años, diciendo en unísono.—¡Buenas tardes!Los ojitos de cada niño se posaron en la rubia, sentaba en el sofá, ellos se miraron y sonrieron, luego salieron corriendo abrazarla.Lindsey no reconoció a los niños y se sobresaltó al sentir el cálido abrazo de cada uno, el cual aceptó gustosa mientras miraba a Kyle en busca de una respuesta.—¿A que no te acuerdas de mi Lin? O ¿Te puedo decir mamá? —expresó una mimosa Lucia separándose de ella. —¡Oh! Por dios, si esta grande lucia y cambiada, esos ojitos traviesos te delatan —susurró al detallar a la niña de ojos café, luego observó al rubio.— ¡Liam! Eres todo un galán —en sus ojos se pudo reflejar la emoción de ver a los niños y sus dudas desaparecieron de su mente, una sonrisa enmarco su rostro.—¡Claro que le pueden decir mamá! Es la única qu