PENNY y THEOLa pareja totalmente ajena al caos que estaban causando sus hijos en la casa de sus mejores amigos, ingresó al Spa y se maravillaron de la tranquilidad que emanaba de cada rincón; se registraron, les asignaron su habitación, la que les pareció extraordinaria ya que, aparte de estar deco
PENNY y THEOErin y Zak cumplieron su palabra, y luego de acompañarlos a desayunar, donde el comportamiento de Mateo les ratificó su deseo de mantenerse alejados, se retiraron a sus habitaciones a “hacer sus cosas”, tal como dijeron. –¿Qué hacemos hoy con estos pequeños? –preguntó Kurt.
–Yo no me pienso disculpar porque tu no puedas quitar las manos de tu marido. –Él no puede quitar las manos de esta escultura –dijo moviéndose sinuosamente, por lo que Alanna expresó rápidamente: –Vámonos Kurt, porque estos dos van a lo suyo y no les importará que estemos pre
PENNY y THEOPor toda respuesta, Alanna alzó los brazos y rodeó el cuello de Kurt para darle un dulce beso de agradecimiento, prontamente él estaba estrechándola contra su pecho, por lo que ella tuvo que liberarse diciendo: –Mejor me alejo de ti, somos responsables del cuidado de dos peq
PENNY y THEOEl tiempo demostró que los ruegos de Penny sí fueron escuchados, porque luego de unos cuantos años de travesuras y mal comportamiento que los obligaba a mantenerse confinados en casa para evitarse inconvenientes, finalmente, comenzaron a mostrarse como unos chicos tranquilos, maduros y
Efectivamente, a lo largo del tiempo Carlos Luis investigó al padre de Alanna y al descubrir la gran cantidad de basura que tenía guardada el hombre, hizo un plan para que le devolviera a su hija todo lo que le había arrebatado con su egoísmo e incluso lo llevó ante la justicia.No solamente protegí
CARLOS LUIS MENDOZA ARRIETACuando Joha terminó su reunión con Randall, se encerró en su oficina, tomó asiento frente a su escritorio y apoyando la barbilla en sus manos, cerró los ojos para reflexionar sobre el siguiente paso que debía dar.Carlos Luis le había dicho que la protegería a ella y a su
El día del nacimiento de su bebé, Kurt trataba de calmar a su protector, ya que temblaba como una hoja mientras se arreglaba para acompañar a Joha en la sala de partos. –¿Y si lo hago mal? –Solo tienes que tomar la mano de tu mujer y decirle lo mucho que la amas, que sepa que