Oliver se despertó gritando, el grito fue tal, que no solo levanto a sus hermanos. Casi instantáneamente muchos miembros del personal de limpieza habían entrado sin siquiera tocar.

Charlie había prácticamente pegado un brinco del susto, aparto sus sabanas sin importarle que estas cayeran al piso, y se acerco a su hermano.

-Oliver…- susurro – calma, calma, estoy aquí- lo abrazo tratando de mecerlo entre sus brazos, mientras el niño solo seguía gritando -todo está bien, todo fue una pesadilla ¿Me oyes? Despierta, todo está bien- el abrió los ojos y los gritos del muchacho se acallaron, y ahora solo ha dejado tras de sí sollozos casi inaudibles

-¡Todo esta bien!- les asegura Max a todos los sirvientes que están parados en el marco de la puerta – ya pueden irse.- los apremio

Todos ellos dudan -¿Estan seguro que no necesitan que les ayudemos con nada?

Max mira hacia Charlie en busca de respuestas, esperando que este le dijera que hacer, pero el no lo esta mirando, a decir verdad ni siquier