—¿Qué pasa? —Aunque Alexander parecía tranquilo, su expresión mostró alivio después de ver que Lily estaba sana y salva—. ¿Estás bien?

Lily negó con la cabeza.

—Accidentalmente he dejado caer algo.

—No importa mientras estés bien —Alexander miró el líquido derramado y le dijo a la persona que esperaba órdenes en la puerta—: Llama a alguien para que limpie y ten cuidado.

Después de una pausa, volvió a mirar a Lily.

—¿Hay algo que necesites llevar antes de que limpien esto?

—Aquí. —Lily sostenía dos botellitas en sus manos, las cuales parecían listas.

—¿Podemos ir entonces?

Lily asintió. Ya estaba cansada. Después de todo, habían sufrido todo el día y experimentar durante mucho tiempo fue agotador.

El gerente de la sucursal nunca esperó que el Señor Russell viniera aquí. No inspeccionó ni quiso que informaran sobre su trabajo; en cambio, solo usó el laboratorio y se fue.

—Si no te gusta, no tenemos que volver a la residencia de la familia Lodge hoy —dijo Alexander cu