Ordenaba la habitación principal ayudando a Adeline a buscar un par de zapatos de bebé que se había perdido,no logré encontrar el zapato pero si la caja con fotos que meses antes había guardado en la parte superior del guardarropa. La tomé con cuidado y soplando el polvo sobre ella sonreí,abrí la caja sacando varias de las fotos en las que apareciamos Ethan y yo. Mis ojos fueron directo a la carta que aún llevaba esperando ser abierta desde el día en el que Roxanne me la entregó,me quedé observandola un rato haciéndome la pregunta de si debía abrirla o no. Suspiro. La tomé rompiendo el sello que la cerraba y saqué el blanco papel que con bonitas letras en color negro formaban una simple oración. "Creé en su amor"sonreí. Debía de dejar de dar tantas vueltas al asunto de mis pesadillas,a lo que dijo la gitana o a los presentimientos negativos de Ethan,las cosas no cambiarían de todas formas,tratamos de estar juntos hasta el final en todas nuestras vidas pasadas y tal parecía nunc
Me miré en el espejo y sonreí,mi cabello estaba perfectamente peinado hacia atrás,el anillo colgando en el collar de mi cuello posaba con suavidad sobre el blanco traje que vestía,mis nervios estaban a flor de piel y por alguna extraña razón el miedo se había atorado en mi garganta. Me miraba en el espejo sonriendo a cada segundo,estaba tenso y se notaba en demasía,una voz a mis espaldas llamó a mi nombre. —Mathéo ¿estás listo?—miré a mi madre con una mueca.—¿Qué sucede cariño?—se acercó a mi lado con rapidez. —Estoy bien,algo nervioso nada más—la mujer me observa con sus grandes ojos azules y suspira. —Cuando me paré frente al espejo el día de mi boda,no me reconocía—dijo tomando mis manos—tenía mucho miedo por mi futuro y el de mis futuros hijos—una de sus manos acarició mi mejilla—Luego caminé hasta tu padre y al sujetar su mano pude sentir que era lo correcto, que todo estaría bien mientras estuviéramos juntos.—besó mi frente y me regaló una de las sonrisas más hermosas.—Toma
Su silencio me molestaba,la curiosidad me estaba ganando y la preocupación al ver su rostro me ponía aún más ansioso. Ethan me sonrió y negó con la cabeza,no me diría nada o al menos no por ahora. —Solo disfrutemos nuestro momento ¿si?—casi suplicó y no pude evitar sentirme mal por obligarlo a decirme lo que estaba sucediendo. —Lo siento—beso su mejilla y tomo su mano mirando los bonitos ojos marrones,me sonríe aún más ampliamente. —No tienes nada por lo que pedir perdón—besa mi frente envolviendo sus brazos a mi alrededor.—Solo dame algo de tiempo y te contaré todo—afirmo con la cabeza abrazándome a su cuerpo. No podía obligar a mi esposo a decirme algo que parecía doler,esperar a que estuviera listo para contarme era lo mejor. Volvimos a la habitación,me encontraba bastante nervioso,era nuestra noche de bodas pero no sabía que movimiento haría Ethan,después de bañarme y ponerme el pijama me tiré sobre la cama,mi esposo me miraba desde su lugar con un libro en la mano. —¿Estas
Abrió sus ojos con lentitud mirando el blanco techo,no reconocía la habitación y tampoco recordaba como llegó hasta ahí. sintió una suave respiración a un lado de la cama en la que se encontraba acostado,observó al chico durante un largo rato hasta que despertó un par de minutos después diciendo su nombre. —¿Ethan?—El chico de grandes ojos azules salió corriendo de la habitación gritando que había despertado. A los pocos minutos varias personas entran al lugar con instrumentos de medicina y con sus batas blancas impecables,Ethan confundido observaba a su alrededor sin entender mucho de lo que pasaba. No recordaba mucho de lo que había pasado ese día,a su mente llegaban cortas imágenes del rubio llorando con todas sus fuerzas,con desesperación sobre su cuerpo. También recordaba el fuerte dolor en su pecho al creer que moriría esa noche sin volver a ver los bonitos ojos de su esposo,algunos sucesos aún estaban mezclados y se sentía algo confundido. —Todo parece en órden—la doctora M
Lo miraba a los ojos sin dejar de llorar,no podía creer lo que había visto,quería esconderme bajo una piedra o dentro de un pozo profundo al que él no pudiera llegar,me tomó de uno de mis brazos sin darme tiempo a huir,su boca se movía dejando salir las palabras que mis oídos se negaban a escuchar,me sentía demasiado traicionado,tanto que mi alma dolía. —No te vayas,escuchame—su voz suplicante me hace quedarme quieto. Sus manos se aprietan con más firmeza ahora en ambos brazos,con miedo a que si afloja solo un poco su agarre sobre mí salga corriendo lejos de él,eso planeaba pero sus ojos suplicantes me inmovilizaron. No entendía como toda la alegría y gran felicidad que habíamos creado juntos se había puesto en juego de ésta forma. Les contaré desde el inicio,desde el día que Dean y yo nos conocimos. Tenía alrededor de trece,no,catorce años cuando lo conocí,vestía ropa oscura y sus ojos eran como afilados cuchillos,trataba siempre de mantener la distancia entre las demás personas
—Tienes que tener más cuidado—susurra Dean cerca de la oreja del chico a su lado,había golpeado con su brazo su parte íntima. —Susurra nuevamente así en mi oído y te mandaré a volar de una patada.—Habla Noel sin mirarlo. Llevaban cerca de diez minutos en el armario observando por una de las tantas líneas que dejaban entrar la luz dentro del oscuro y diminuto lugar. Noel mordió su labio inferior nervioso,si los descubrían metidos ahí en plena noche estaban jodidos. Dean observaba cada pequeño rasgo del rostro de su compañero,Noel tenía una cara redonda y tierna,pequeñas pecas que iluminaban su rostro y su cabello era largo hasta sus hombros. —¿Cuando podemos salir?—vuelve a susurrar Dean en el oído de Noel,el chico rueda los ojos. —Maldito seas,deja de susurrar en mi oído—se voltea a mirarlo con el ceño fruncido. Dean sonrie de lado cuando sus narices se rozan.—Eres tan pasivo—el codo de Noel golpea las costillas del más alto.—Te enojas,eso quiere decir que es verdad—Noel lo ig
Estaba por acostarse a dormir cuando tocaron la ventana de su habitación,un toque único que Noel ya conocía bastante bien,su corazón se encontraba en su garganta con ganas de salir por su boca,sus manos temblaron junto a sus piernas y dejó ir un suspiro para abrir la cortina y verlo a él. Lo miraba con sus ojos negros sin mover un solo músculo de su rostro,la lluvia caía sobre él empapando su cuerpo,Noel abrió la ventana y entró de un salto como de costumbre. —¿Por qué tienes que venir cuando llueve tan fuerte?—niega con la cabeza el de rulos caminando hasta su guardarropa. —...—siempre que llovía de esta manera él paraba en casa de Noel,y no decía palabra alguna. —Ve a darte una ducha con agua caliente y vuelve para secarte el pelo—el chico se queda perdido mirando al dueño de aquella habitación. Noel observó como el alto comenzaba a temblar,preocupado se acercó a él tomando su mano y arrastrando al enorme chico hasta el baño,Dean no dejaba de mirar a su lindo amigo,el niño que s
Miraba por la ventana esperando a que la persona a su lado se dignara a despertar,de vez en cuando miraba en su dirección observando como sonreía en sueños y susurraba alguna que otra palabra que casi ni se le entendía. —No entiendo como es que pasas tan mal en noches de lluvia—acariciando el cabello de Dean se quedó perdido observando el pacífico rostro que descansaba sobre la almohada. Se veía con tranquilidad,una persona completamente diferente a la de la noche anterior,cuando llegó no decía nada,mientras recorría el bonito cuerpo de su compañero no soltaba palabra alguna,Noel odiaba que ese desgraciado se comportara de esa forma con él a la hora de compartir la cama. Pero al día siguiente cuando despertaba volvía a la normalidad,hablaba coqueto y sonreía de esa forma única que tenía. Noel golpea la mejilla de Dean y el chico frunce el ceño,el de rulos sonríe pero al segundo golpea sus labios al darse cuenta de lo que hacía,se había prohibido a él mismo pensar y sonreír de esa f