— ¿Te gustaría trabajar cuidando a Vicky? — pregunto siendo directo como solo Stefano podía ser.
— Claro, pero creí que ya tenían a su gente. — dijo el moreno mientras veía a Victoria contar los pasos en su departamento, se estaba familiarizando con el lugar.
— Esto es divertido, es como nuestro departamento, pero invertido. — Stefano la miro y sonrió, para luego seguir hablando con su vecino.
— No, son de mi cuñado y no confió en ellos, miran a mi hermana colmo si fuera un pedazo de carne, en especial el imbécil de Arkady, sé que si hablo con Neri lo solucionara, pero no quiero causarle problemas a mi hermana mayor, después de todo solo estaremos aquí tres años.
Alessandro hablo por horas con el joven Zabet, descubrió que este joven en verdad daría la vida por su hermana, su sobre protecció
— Gracias, no sabes lo mucho que significa esto para mí, y como muestra de mi gratitud, hoy te prometo, no, te juro, que mi hijo llevara tu nombre, Alejandro o Alejandra, así sin importar el camino que cada uno tome, yo recordare que mi felicidad te la debo a ti.Alessandro al oír tales palabras recordó algo, no debía, pero así fue, una pequeña espina se clavó en su corazón hacia un tiempo y con el paso de los días y las actitudes de su hermano lo único que provocaba era que la herida se hiciera más grande y él viera fantasmas donde no los había.— Esas palabras suenan muy fuertes, no quiero que te sientas obligada…— antes que continúe hablando Victoria lo interrumpió.— No me siento obligada, lo hago de corazón, veras, te contare algo que nunca le dije a nadie, cuando aún era una niña y mis ojos cump
Arkady desenfundo su arma y apunto a la cabeza de Alessandro, pero este no se inmuto, solo lo miro clavando sus ojos cafés con motas negras en él, una mirada de hielo, algo que solo los que están acostumbrados a llevar la presión de la vida o la muerte de otras personas sobre ellos son capaces de mostrar.— Arkady, baja el arma y vete. — al oírlo Victoria tomo la mano de Alessandro, un acto que a nadie le pasó desapercibido.— No, ella es mía. — Arkady no estaba dispuesto a dejarla ir, no sin antes tenerla.— O te marchas, o el único que morirá hoy, serás tú. — pocas veces Neri amenazaba, él era más de actuar y luego hablar, pero Arkady era su primo, por lo que quiso advertirle.— Debemos hablar Victoria, tú no puedes hacerme esto, te he esperado demasiado.El rubio que cargaba un temperamento sumamente vol&aac
Victoria estaba más tranquila luego de saber que por lo menos contaba con el apoyo de su cuñado, para Alessandro fue una sorpresa el hecho que ella le contara todo lo que había hablado con Neri, no creía que tan franca podría ser la joven, pero pronto comprendería que Victoria no mentía, nunca.— Cada segundo que paso contigo más me asombro. — dijo Alessandro mientras secaba los platos, habían terminado de cenar y era hora de limpiar, ellos actuaban como una pareja y no se daban cuenta.— ¿Por qué? — Victoria tenía sus manos cubiertas de jabón, ya que aún tenía varias cosas por limpiar, mientras esperaba la llegada de su hermano Stefano.— Me asombra que me contaras todo lo que hablaste hoy con Neri y aún más que me digas quien es él. — Victoria en estos días lo había puesto al tanto de qu
Victoria solo se había sentido de esa forma una sola vez desde que perdió la vista, fue cuando trataba de grabar el jardín trasero en su menoría, conto mal los pasos y cayó a la piscina, el agua cubriendo su cabeza provoco que sus gritos no se oyeran, así como que no pudiera escuchar nada, esa fue la primera vez que se sintió ciega, sorda y muda desde ese día genero un terror único a las piscinas, pero ahora no estaba bajo el agua, entonces ¿por qué no escuchaba nada?— ¡Hijo de puta!¡Arama! — el grito de Zafiro al fin la saco de su desesperación, solo para hacerla entrar en pánico.— Zafiro, espera. — trato de calmar Neri a su esposa.— ¿Bromeas? Este degenerado le lleva como 15 años, es un depravado ¡Arma! — volvió a pedir mientras trataba de levantarse de su lugar al ver que sus empleados no llev
Los hermanos Zabet no perdieron tiempo, una vez que Victoria se marchó de la mansión Neizan, Zafiro pidió a sus empleadas preparar las maletas de su hijo y las propias, viajaría a Nueva York, se sentía culpable por no apoyar a su hermana, ella le había fallado, Neri también empaco, aun sabiendo que su esposa y cuñado no lo querían allí, estaba furiosos ya que el hombre termino confesando que él sabía de la relación que mantenía Victoria con su custodio y que había ayudado a mantener lejos a su primo Arkady, claro que no le dijo toda la verdad, no traicionaría a su cuñada.Victoria se acostó apenas Alejandro ingreso en el baño, pero pronto sus pensamientos espantaron el sueño, por lo que se levantó y fue hasta la puerta del baño, sabía que Alejandro necesitaba tiempo a solas o eso creía, pero
Candy Estaba con su pequeño nieto en brazos, lo había extrañado demasiado, en su mente trataba de imaginar cómo sería el bebé de Victoria, a la vez que se planteaba en que se había equivocado con su pequeña, ¿quizás fue sobreprotección? Demasiado amor asfixia y ella lo sabía, Candy conocía muy bien el sentimiento de ser tratada como una mujer débil y tonta, pero estaba segura de que su hija no era ninguna de las dos cosas, luego de horas navegando por su mente llego a una conclusión, no le agrado, pero ella no era nadie para juzgar, su trabajo era amar y cuidar a sus hijos.— Amir ven a dormir. — dijo viendo que su esposo aun miraba al jardín.— Tantas veces los observe correr por todo el jardín, que creía que nunca nos dejarían, que siempre serian mis niños. — los ojos de su esposo estaban rojos, aun as&iac
Alessandro paso la noche sin poder dormir, la culpa lo golpeaba cada vez que cerraba los ojos, la había lastimado una vez más, aun así, ella creyó su absurda escusa, en la que como si fuera un adolescente había perdido un poco el control por el tiempo que estuvo sin tener sexo, era una excusa ridícula, que ni él la podía oír creíble, pero para Victoria si lo era, después de todo, ella no tenía idea de nada referente al sexo y ya su hermana Ámbar le había contado historias de sexo duro, no podía mentir, a Victoria le gustó mucho la forma casi violenta en la que Alejandro la había tomado, pero al final se asustó, a pesar de no poderlo ver, sintió en su voz el enfado, pero por más que pensara no encontraba nada que pudiera a ver arruinado tan maravilloso encuentro.Santoro no la despertó al marcharse en la mañana, le hubi
Alessandro Santoro llego a la gran casa que había adquirido para su hija y hermano, su rostro mostraba una clara advertencia de que nadie debía molestarlo.— ¿Y a ti que te sucede? — Luis lo observo un momento antes de hacer la pregunta.— Candy me hizo firmar un documento donde se estipula que no tengo relación alguna con MI hijo, ¿lo puedes creer? — La vena en el cuello del hombre estaba a punto de estallar.— Claro que lo puedo creer, ella es Candy Ángel, te convence por las buenas o por las malas de todo, pero, de todas formas, ¿Cuál es el problema? — Luis no podía creer que su hermano, el gran mafioso y estratega estuviera pasando por alto un gran detalle.— ¿Me estás viendo la cara? — pregunto incrédulo Alessandro.— No, claro que no, solo que no entiendo, si le dices la verdad a Vicky, ella jam&aacut