Amir, Eros, y sus tíos, recibieron a Victoria en el aeropuerto entre lágrimas y gritos, la niña de sus ojos regresaba a casa, sin embargo, lo único que hacia la joven era llorar, Eros la tomo en brazos como cuando era una bebé y así la mantuvo durante todo el vuelo, a su lado Amir acariciaba su cabello, preguntándose ¿cuánto había sufrido su niña? para estar en esas condiciones, su corazón comenzó a oscurecerse a medida que su mente le daba miles de escenarios diferentes.

— Al fin se durmió, ella está muy mal. — dijo Melody en un susurro, su tía la conocía muy bien, Victoria no era débil y mucho menos lloraría como lo hizo delante de todos, ella también estaba inquieta.

— Algo le hicieron a mi Princesa y juro que pagaran cada lágrima que derramo. — el hielo tomaba una vez más la mirada azul del