Los tres hombres que se movieron en la casa de Santos se turnaron para cuidar ambas entradas, mientras uno de ellos rondó el alrededor, para asegurar que nada extraño sucediera. Su misión era mantener a esa novicia en ese lugar todo el tiempo que Jace lo creyera necesario, pues no iba a dilatar la orden de terminar con ella. Cosa que esperaban para cumplir lo que tenían en la mente. Después de esa noche tendrían carta verde para actuar a su antojo con la prisionera. __ Iré a ver a la monjita. - avisó uno de ellos, los demás solo compartieron una mirada cómplice que era fácil de descifrar para los demás. __ Puedes ir preparándola. - dijo el segundo soltando el humo de su cigarrillo. El otro levantó la mano para avisar que lo haría, en tanto Evelyn trató de seguir deslizando las cuerdas en la esquina de mueble viejo para que el desgaste le diera mayor libertad y así sacar las sogas de una vez. Movió las manos con fuerza, tratando de no cortarse de nuevo, deteniéndose cuando escuchó
Los cristales cayeron sobre sus cabezas, obligados a cubrirse con las manos cuando los fragmentos se desprendieron de la cúpula que había en la parte superior. Kiara mantuvo a Nessi bajo su cuerpo, cuidando que nada fuese a lastimarla, sintiendo como un peso más grande la dejó cubierta, en tanto Bastian estaba iracundo al ver la letalidad de todos los hombres que enviaron a por él, iba a cobrarlo de alguna forma porque definitivamente solo porque alguien desgraciadamente compartiera genes con su familia, no lo salvaría de que eso se lo cobrara.Eso no iba a detenerse, por lo que esperar a que fuera mermando no era una opción ya que estos solo estaban aprovechando el tiempo de respuesta que pudieron obtener para subir a cumplir con las órdenes. El alemán se llevó la mano a la espalda sacando una granada de expansión al cual le quitó el palillo de metal con los dientes, lanzandolo a las escaleras, oyendose como el estallido los detuvo y derribó a algunos. Se levantó tirando de la man
En las cercanías de la fortaleza Blackwood se comenzó a oír sobre el rumor de un enfrentamiento, el cual fue catalogado como uno de los innombrables. El MI6 era motivo para no querer saber nada más que la forma en no verse implicados. La tríada tenía el poder de manejar a diversas ramas oficiales, pero enfrentarse a un organismo de inteligencia estaba en la lista de las cosas a las que ninguno querría exponerse. Sobre todo alguien como Jace, el cual apenas estaba tocando el poder que siempre quiso y lucho por obtener, como para pensar en que podía perderlo por culpa de alguien que no sabía ni la manera de manejar su cargo. Por ello, en cuanto se supo que dicha agencia protagonizada un hecho como la persecución de alguien a quien quería ponerle las manos encima, tuvieron que tomar cartas en el asunto. Aun cuando el que propició cada situación a la que Bastian se tuvo que enfrentar, era el encargado de reunirse con el líder de la operación lanzada para su captura. Kiara apresuró el
Los helicópteros aproximándose al lugar del encuentro programado por Bastian antes de dejar a su esposa comenzó a escucharse. Samara mantuvo su porte elegante mirando al cielo para mirar si se trataba de una trampa, pues su sobrino jamás le dijo de una aeronave sobrevolando la zona. Tomó su teléfono y conectó la llamada hacia el móvil que le dijeron.__ Somos nosotros. Nos ayudaron a salir de ahí. Todo está bien. - dijo Chang al teléfono. - Solo necesitamos una ubicación exacta para aterrizar. __ Lanzaré dos bengalas. - dijo ella colgando la llamada, pidiendo lo sugerido a uno de los hombres que fue rápidamente por dicha cosa al auto, entregandolo a la mujer que apuntó al cielo lanzando el primero para avisar de su locación y un segundo para reafirmar.El coronel Willow fue el primero en avisar de las luces frente a ellos, redirigiendo los helicópteros a ese lugar, mientras Kiara no tenía palabras ni creyó que lo que veía fuese real. Nada tenía sentido, pues su abuelo no le ayudarí
__ Asegúrate de encontrar a Bastian. Lo traes conmigo o lo matas en el proceso, pero vivo no debe seguir. - ordenó el sujeto de traje beige a Jace. - Ya me cansé de que arruine mis planes. __ ¿Cree que el capitán Ford sea confiable? - preguntó mirando el reflejo de este, pues aún no podía creer que hubiesen personas tan parecidas. - Sus referencias son buenas, pero dudo de sus capacidades. Se rige con leyes, no con órdenes de...__ Lo quiero solo para atraparlo. Tengo claro que un militar no es alguien en quien confiar. - dijo él. - Pero por ahora me conviene que esté rabioso. - dejó caer dos cucharadas de azúcar a su café. - La rabia es el mejor aditivo para una persecución. No se miden las consecuencias. Se da todo de sí y no va a tratarlo con condescendencia. El capitán quiere reconocimiento, sentirse útil y no como un completo tonto. - movió la cuchara en el líquido que luego llevó a su boca. - Le estoy dando las armas. Incluso me odia a mí, como lo haces tú.__ Yo no...__ No in
Jace se dejó llevar por las manos de la esclava que hicieron su trabajo, deseando que ese momento borrara todo el estrés que lo estaba haciendo perder la paciencia con todos. Debía mantener el control de lo que hacía, pero que una simple matriarca le llevara la contraria también era parte de lo que odiaba. Le molestó ver que sus órdenes no eran cumplidas al pie de la letra como sucedía con el Don. A Bastian le temían tanto que tan solo al decir algo que podría considerarse una orden, esta le era cumplido a la velocidad de un rayo, siendo muy diferente con él. De solo recordar el poder que tenía, los ánimos de f0llar se le fueron. Apartó a Ruth y miró a las demás esclavas en la cama, quienes esperaban por él, muy atentas a cada detalles. Sabía muy bien que estas murmuraban lo que ocurría en esa casa y de seguro que no pudo culminar nada con ellas, como estaba convencido que pasaba con Bastian, ya que la hombría de este jamás se puso en duda, pero la suya estaba en riesgo de andar d
__ No nos superan en número, pero en armamento estoy seguro que sí. - le informaron al sujeto tras el computador en donde se veía claramente lo que sus pilotos tenían en frente de sus narices. __ Son ellos. Puedo oler las acciones de los rusos a años luz. - refunfuñó. - Pero ¿que hacen aquí? ¿Que tienen que ver con Bastian?__ No se presentan así como así. - contestó el sujeto en la silla. - Solo hay dos opciones. Estan de lado del Don o vienen a acabar con todos para tomar el territorio entero, como se dijo que pasaría después de la caída de los Meyer. __ Los Meyer dejaron más que solo ruinas. Dejaron historia. - exclamó. - La más grande de todas. Que nadie debería retar a gente como esa.__ ¿Que hacemos? __ Déjame pensar. - se llevó la mano a la barbilla mientras oyó y vio la alerta de haberse vuelto un objetivo de uno de sus pilotos. Ni siquiera le importó que estuvieran a punto de morir. En su cabeza el único que en verdad era de suma importancia era solo él. En tanto en la f
__ Dije abajo. - con una risa perversa Bastian señaló el suelo, Jace arrugó ligeramente el ceño al ver que le estaba pidiendo saltar de ese sitio. - Treinta segundos.__ No pensarás...__ Sí, es justo lo que estoy pensando. - exclamó este sin dejar de apuntarle. - Tienes veinte ahora. __ Bastian, podemos negociar. - dijo ganando tiempo para buscar una salida que no fuera lanzarse de ese lugar, sin saber que la decisión ya había sido tomada.__ No, no podemos. - contestó Bastian, viendo las intenciones de Jace por disparar. - Quien inició un complot en mi contra fuiste tú. No hago acuerdos con quien quiere mi cabeza.__ Estás llevando la tríada a la ruina. - acusó insatisfecho. - Te casaste con una esclava con numeración. Concebiste una hija con ella. Le diste la joya que debió portar alguien con el temple para acabar con lo que se ponga en su camino, no con una mujer que a la primera de cambio no enfrenta sino que se esconde. __ Sigues cometiendo el mismo error. Subestimas a quien no