-Pequeña, ¿te sientes bien?
-Sí, es sólo que… – le dije a Óscar que no me gustan las mentiras. Si no le cuento, será mentira por omisión -. Óscar… me dijo que está enamorado de mí.
-Mmm… eso ahora no importa. Estamos juntos y nos amamos – suspira -. Pero sé lo que está sintiendo. Ven.
Me toma de la mano y
Mi madre se muestra muy contenta durante nuestro almuerzo. Juan ha preparado una ensalada de pasta y carne mongoliana, estoy que reviento porque me comí dos platos. Ella me mira y sonríe, probablemente no se esperaba verme tan contenta, pero en su mirada puedo notar que está preocupada por mí y por mi relación con Juan.Cuando terminamos, Juan se pone de pie y recoge los platos, me guiña un ojo cuando ve que yo también trato de ponerme de pie. Se va a la cocina a lavar los platos y cuando termina se para frente a nosotras.-Bueno, las dejo solas para que conversen todo lo que quieran – me besa la frente -. Estaré trabajando, si necesitan algo, envía un mensaje, porque estaré escuchando música.-Está bien, gracias.Y cuando se va me lleno de miedos. No tengo idea qué es lo que quiere decirme mi mamá. Espero que no resulte en pelea esta conversació
Me despierto sonriendo con el sonido de la lluvia que afuera cae, amo ese sonido. Para un domingo sin compromisos es perfecta, porque sólo debo quedarme en casa. Por primera vez en muchos días, me despierto antes que Juan. Se ve tan despreocupado, como si ya tuviera resuelta toda nuestra vida juntos, como si no tuviéramos nada qué temer.Necesito ir al baño, así que trato de levantarme sin molestarlo. Al terminar, me miro al espejo y me veo diferente. Cada vez me alejo más de esa Danna que tenía todo resuelto, que no tenía problemas y que la vida le sonreía cada minuto. Que equivocada estaba entonces.Al salir, Juan sigue durmiendo. Me voy a la cocina, porque tengo hambre. Eso es algo con lo que tengo que vivir y acostumbrarme estos meses, pensar que muchas veces sobreviví sólo con el almuerzo y ahora no soy capaz de pasar más de tres horas sin echarme algo al estómago.
ÓscarDesde que María José me llamó sobre la petición de la prueba de ADN, mi mundo se detuvo en seco. Todas las expectativas y planes que tenía para conquistar a Danna se esfumaron. Así es imposible que lo pueda lograr, porque han terminado de cerrar su vínculo.Es obvio que ese hijo es de Juan. Aunque tendré que preguntarle de todas formas, ya que ese tipo insiste en solicitar la prueba.Hablé por teléfono con Danna y parece contenta. Accedió a salir conmigo, no la he visto desde hace semanas. Ahora necesito decidirme si le confieso que la amo. Es inútil que lo haga, pero si me lo guardo explotaré. Creo que todo dependerá de la conversación con ella. Estoy fuera de su casa, bueno la de Juan. Me bajo para abrir la puerta del auto, porque hace mucho frío. Cuando por fin la veo quisier
Han pasado unos días desde que Óscar vino a casa. Pensé que eso podría cambiar la actitud de Juan, pero la verdad es que no, sigue siendo amoroso y constantemente está al pendiente de mis necesidades.Me encantaría hablar con mi madre sobre lo que está pasando, pero no iré a su casa con Carlota allí, al menos en un tiempo, quiero pasar un embarazo tranquilo, por mí y por mi bebé. Creo que al menos nos merecemos eso.Me gustaría saber qué opina Rodrigo de todo lo que le está pasando. Y no es que me importe cómo se siente, sino que me preocupa lo que pueda pensar acerca de mí. De partida ya me acusó de que Juan era mi amante cuando llamó por lo de mi embarazo. Algo que está totalmente fuera de lugar, considerando que por su culpa dejé a mi amigo de lado y me alejé sin darme cuenta de alguien que en verdad me quería. Est
-Hola a todos, buenas noches – se ve radiante. Lleva un vestido negro con escote corazón, el pelo suelto con ondas y maquillaje muy estilo de los años 50 -.-Rebeca, es un gusto verte aquí – le dice Abigail -. ¿Cómo está tu madre?-Muy bien, gracias – mira hacia la entrada y un poco a nosotros -. Hola chicos, que bien se ven.-Rebeca, un gusto verte – le dice Juan muy educado y compuesto. Me parece extraño, porque ahora que lo pienso hay muchas cosas que él no me ha contado de sus últimos días de relación con ella -.-¿Se conocen? – pregunta Carlos -.-Sí, Rebeca y yo estuvimos saliendo un tiempo. Pero no funcionó.-Vaya, que pena – dice Abigail -. ¿Por qué no? Rebeca es una mujer encantadora, muy inteligente.Me siento extraña, demasiado incómoda. Me pongo de pie, porque nec
Vamos camino a la casa de mi madre para celebrar el premio, hemos tenido tanto trabajo con Juan, que sólo una semana después hemos podido hacerlo. Él está muy contento, a pesar de que le he pedido que invite a Óscar. Y es que no ha dejado de llamarme ni un solo día, cómo puedo dejarlo fuera, si en cuanto vio mi fotografía en la página en uno de los diarios más importantes me llamó para felicitarme.Lo único que no me convence es el que Carlota esté en casa de mi madre. Me aseguró que se quedará en su habitación, para que podamos tener nuestro almuerzo tranquilos, aun cuando le dije que podía
Hoy llamo a la clínica, para programar una cita con el doctor. Esta vez debería hacerme una ecografía para saber cómo está creciendo nuestro bebé. Me dan cita para mañana sábado, para que no pierda de ir a trabajar.Han pasado dos semanas desde que tuvimos el almuerzo en casa de mi madre y que vi a Carlota. Desde entonces mi mamá y Juan no han dejado que me acerque a ella.Esta mañana Óscar me llamó para decirme que tenemos la audiencia preparatoria la próxima semana. En ella se entregarán los antecedentes para la demanda de divorcio, yo sólo quiero que esto termine de una vez.Juan se encuentra en su oficina en este momento. Está trabajando en los asuntos de la empresa de lácteos. Yo aquí estoy trabajando en una campaña de concientización acerca de la violencia hacia la mujer. Me llega muy de cerca y me motiva totalmente qu
-Danna, yo…-Tú qué… ¡Es que no puedo creerlo! Ese día no quisiste que te acompañara porque se suponía que te reunirías con unos clientes nuevos y yo debía quedarme a finiquitar otras cosas – abro el armario y saco una maleta -. ¡ME MENTISTE!-Espera… - su expresión es de terror cuando me ve sacando mi ropa -. ¿Me dejarás por una foto que no sabes qué significa?- ¿Tiene otra explicación? – me paro frente a él con las manos en la cintura -. Lo dudo, habla por sí sola.-No, estás muy equivocada y te lo voy a demostrar – saca su teléfono -.-Qué, ¿tienes más fotos de ese día?-No, llamaré a Rebeca.-Para que mienta por ti. No necesitas hacer nada de eso – guardo todo lo que puedo, siento que empieza a faltarme el aire, pero no pu