Narra Ashley. No esperaba que William se comportara de este modo y me quede estática en mi lugar sin saber cómo responder a sus insultos porque entiendo su desengaño pero que me llame arribista y desleal es duro de procesar para mí qué no he hecho más que sufrir durante meses, al tratar de mantener
—Cuñada. —Me llamó Mateo con tono elevado y me quedé a la expectativa, pero él volteó hacia Jessica, y sonrió de medio lado al mismo tiempo que le decía: » Linda mega, amiga váyanse que yo hablaré con este caballero. Nos solicitó con una amabilidad que estoy segura de que no le mostrará a William
—¿Lo sigues amando?— le pregunté con tristeza. —No te niego que hace poco creía que sí, pero la preocupación que sentí por ti cuando lo vi tan violento me hizo ver que por él no siento nada. En William solo veo a un amigo, el cual me ofendió y lo quiero fuera de mi vida. Mi corazón empezó a danzar
Narrador. Más tarde, estando en casa Aslan tenía a Zaira cargada, mientras veía a Ashley arreglarse con planes de irse y pensaba en una excusa que fuera para poder detenerla, no obstante, le era difícil encontrar algo importante. «¿Qué le digo?», se preguntó internamente. «¿Y si finjo que me duel
—Ya veo, te perdono. La muchacha que lo ama igual que como lo hace con Mateo, tomo a Zaira, entonces se fijó en el moretón que él tiene en la cara causa de la trompada recibida. —Tu suegra tiene tremenda derecha— no evitó decir burlona y Magda se giró con rapidez. —¿Aslan estabas peleando? — No
Narra Ashley.Sí la casa de Aslan es exactamente grande y lujosa, esta es mucho más. Cada paso que daba me hacía temblar y aunque obligaba a mi propio cuerpo a mantener la calma por qué los nervios no me dejaban respirar con normalidad, pero, no podía negarme a este encuentro, quería saber cuál es e
La madre de mi esposo sonrió mostrándose agradecida. — Este es mi regalo de bodas para ti, aquí he conservado todas las joyas que eran de mi madre, por muchos el hecho de que siempre soñé con entregársela a la esposa de mi hijo. — la extendió hacia mí y mis cejas se fruncieron.—Pero ya Aslan tuvo
Narrador.Alonso miraba a Ashley temblar, entrelazando sus dedos mientras miraba momentáneamente la alfombra a medida que subía la vista hacia él para dedicarle unas miradas llena de odio que Alonso no sabía interpretar. Aunque tampoco le molestaría saber que ella lo odia porque siente que Ashley es