POV DE ANTÓN Llegué a la fábrica de lácteos y todos estaban nerviosos.—¿Como sucedió?—Evadió a los guardias señor.—¡Me estás diciendo que la vigilancia que pago no sirve!—Antón, cálmate.—¡No puedo Damm!, imagina si hay algo envenenado.—No pudo hacerlo señor, llegamos a tiempo.—¿Quién te asegura que fue el único que entró? —se queda en silencio— ¿Dónde lo tienen?—En la bodega.Camino hasta la bodega a zancadas largas, una vez que llego descubro el rostro del hombre, apenas era un joven que empezaba a vivir la vida, se podía sentir el temor en su mirada.—¿Quién te pagó?—No puedo decirle.—Habla o te mato —Gruño poniendo el arma en su cabeza.—Máteme, de todas formas, moriré una vez que salga, él no dejará que sobreviva después de haber fracasado.—Te dejaré vivir y ofrezco protección si me dices quien te envió y por qué —El joven río a carcajadas, al verme serio asintió.—Bien, te diré, aunque dudo que cumplas tu palabra, pero ya no tengo nada que perder, quien me envió fue Ha
POV DE BIANCA.Desde que Inma murió Antón volvió a recaer en los episodios de ira. Se hizo distante a mi hija, incluso de mí. Pasa más tiempo en el trabajo, llega a casa cuando ya estoy dormida y se va antes de que despierte.Los fines de semana no sale de su despacho. Ahí come, duerme, incluso bebe y termina destruyendo lo que con tanto esfuerzo las empleadas arreglan.Vivo con el corazón en un hilo, pues temo que borracho salga a atacarme, a mí y mi hija. Por eso la hago dormir cerca de mí. como la cama es muy grande la traigo a mi habitación.Escucho pasos acercándose y cierro los ojos y finjo dormir. La puerta se abre lentamente, se detiene a mi lado y le escucho suspirar, luego se dirige al baño.Lentamente me levanto, no puedo seguir con esto. No puedo seguir viviendo así. Sé que no me ha agredido, pero de todas formas quiero hablar sobre esta situación.Decidida a hacerlo voy hacia el baño a ver qué hace, cuando me acerco a la puerta diviso sangre en sus manos. Me es inevitable
POV DE ANTÓN. Hoy es el día que celebraremos los cuatros años de mi adorada hija Luz, aquella luz que vino alumbrar mis días y noches, que llenó mi vida de felicidad. Mi niña, mi princesa, mi todo, Luz llegó a darme la paz que necesitaba.Mientras bebo una copa las veo bajar, mi reina y mi princesa, el corazón se exalta al verlas tan hermosas, Luz lleva un vestido rosa como una princesa y mi amada Bianca un vestido rojo ajustado a su cuerpo, largo con aberturas desde los muslos hasta el final.—¡Te amo! —suspira y palma un beso en mis labios.La vigilancia se resguardó puesto que el criminal de Hanson aún anda suelto, de todos los invitados los únicos que me desagradan son esa pareja que se acerca a Bianca, Cristina y Walker jamás me han agradado, me es difícil digerir su presencia.Al ver llegar a Judy los ojos de Cristina quieren salirse, mi amigo está tomado de la mano con su nueva esposa una militar igual a él. Me acerco a ellos y los recibo con un abrazo.—Bienvenidos.—¿Por qué
POV DE BIANCA.Dejo caer mi cuerpo en el fino y elegante sofá que adorna el despacho, varias lágrimas ruedan sin ser sentidas y van mojando las mejillas hasta llegar al borde del mentón. Sollozo en silencio mientras recuerdo la niñera en el despacho, Antón con un rostro de enojo y enrojecido, escena del momento en que llegó a la cocina recorren mi cabeza y, se con certeza que no vio el beso por qué no había nadie dentro, salvo que hubiera estado alguien en la alacena.Limpio las últimas lágrimas y salgo en busca de Antón, la mayoría de los invitados ya se han ido son pocos los que quedan, se encuentra sentado junto a unos socios. Mi corazón late con fuerzas al momento que me acerco a él, temo que se aleje una vez que llego, cuando me paro a su lado rodea su mano en mi cintura haciendo que mi cutis se alborote, suspiro al verlo ya tranquilo y aquel enojo de hace horas se ha esfumado.—Ella es mi esposa, Bianca Vargas.—Un gusto en conocerla señora —Aquel hombre me mira muy extraño, sie
RELATA BIANCA.Al día siguiente le hice una visita a Leila, pues ella y yo teníamos asuntos pendientes por resolver, y creo que el momento de ponerla en su sitio había llegado.—¿Qué diablos haces en mi despacho? —la muy… había venido a poner un despacho en este pequeño país, cuando su padre tenía el suyo en México.—Es un lugar donde puede entrar cualquier persona ¿no?—Pues te equivocas, solo ofrezco mis servicios a clientes de prestigio no a zarrapastrosos como tú.—Ahora soy la esposa de Antón y tengo mucho prestigio.—¿Crees que por eso a la gente se le olvidará de dónde vienes, sobre todo, lo cuernuda que fuiste? Todo México sabe lo mal esposa que fuiste, y por eso tu esposo te traicionaba.—Y todo México sabe que fuiste el plato de segunda mesa. No conforme con que México lo sepa, ahora vienes a Ecuador a darte a conocer ¿Cierto? —me mira con desdén—. ¿No te cansas de rogar? ¿Es que no hay otro hombre?—¿Como te atreves insolente? Intentó golpear mi rostro y la detuve con firme
POV DE BIANCA.No había Consuelo para lo que estaba sintiendo, lloré noches enteras con el recuerdo de ver a mi esposo en brazos de otra, me fue difícil digerirlo porque Antón me había demostrado su amor incondicional, yo creí que me amaba de verdad, pero nuevamente me usó para su maldita venganza.Después de acusarlo por lo que me sucedió no volvió aparecer en mi habitación, deduje que lo habían llevado a prisión, pero el día que salí del hospital se acercó y los policías lo alejaron de mí. Se lo llevaron de vuelta a prisión y continúe con la denuncia para dejarlo refundido en prisión, quería cobrarle todas las que me había hecho.Cuando llegué a casa envié a Cristina a la mansión por todas mis cosas, una vez que me sentí mejor hice la solicitud del divorcio puesto que no quería seguir casada con ese hombre. Después de su traición y lo que me había hecho, no se me negó la solicitud del divorcio.Antón dejó marcas en mi vida difícil de borrar, mi corazón se había secado y me sería di
POV DE ANTÓN.Me encuentro debatido entre el dolor y el alcohol, desde que ella me abandonó no he podido continuar con mi vida, cada día que pasa es más miserable para mí.Estoy solo sin nadie a mi lado, odio recordar las palabras del maldito Walker, le fallé a mi amada, le fallé nuevamente y al parecer la perdí para siempre, muero cada vez que la veo en televisión con Davis Walker.—Si no levantas la cabeza tu imperio se irá abajo.—No me importa Damm. Déjame solo, de que me sirve mantener un imperio si no tengo familia.—Pues recupérala, tú puedes, vamos, iré a darte una ducha.Todos los días era lo mismo, Damm trataba de sacarme del alcohol, pero yo volvía a recaer, es que nada me daba fuerzas para seguir viviendo si Bianca no dejaba que me acercara a ella ni a mi hija, las extrañaba demasiado, pero ellas parecían no extrañarme.—TG Lee Dary a robando los clientes de Toni lácteos, dejaras que Davis Walker robe todo lo tuyo, ya robó tu esposa, ahora dejarás que su empresa se adueñe
POV DE ANTÓN.Después de mucho tiempo aparecí en mi empresa.—Bienvenido señor Antón, es un gusto tenerlo de regreso.—Gracias Rosa. Necesito el informe sobre la mesa de todo lo que ha pasado en mi ausencia.—Si señor.Me senté en el escritorio contemplando hacia el enorme ventanal donde solía sentarse, por un instante recordé cuando llegó a trabajar como mi secretaria.Mi corazón se llenó de dolor al recordar la escena donde me apartó para ayudar a Walker, suspiré llenándome de tristeza al imaginar que podía amarlo más de lo que me amó.—Bianca —murmuré entre suspiros, no podía sacarla de mi cabeza, no podía dejar de añorarla, recordaba las noches de pasiones en las cuales juró más nunca irse de mi lado. Cerré mis ojos y dejé que las lágrimas rodaran por mis mejillas, sin esfuerzo alguno caían sin cesar, sentía un hoyo en el corazón que no podía ser llenado por nada ni por nadie, solo ellas dos podrían llenar ese vacío que invadía mi pecho.Cuando escuché la puerta abrir limpié las