Luego que llegan a la casa por primera vez Amelia habla
- ¿Qué fue eso Marcos? - Marcos le responde casi sin comprender
- ¡No lo sé madre, era algo que yo no me lo esperaba! -
-¡Pero parece que el tal Don Antonio ,si! - exclama Delfina molesta, Marcos observa a su hermana , nunca la había visto así
--¡Puede ser! - dice Marcos y agrega -¡hasta a mí me tomó por sorpresa! -
- ¡Bueno imagínate a nosotros! - dice Delfina
-¡Y ni que decir a mí, tener que soportar la cara burlona de Antonella fue lo último. Había una cierta satisfacción mórbida en ella -
- ¡No crees que estás exagerando hermanita! -
-¡Para nada, la conozco muy bien! - calla -¡ y se de lo que es capaz de hacer! -
- ¡El tema aquí es que tu contrajiste un noviazgos con ella , el cual vas a tener que cumplir! - la madre calla preocupada -¡ con esa familia no se juega! -
- ¡Así es, sino cumples, tendr
Lorenz estaba decidida a llevar a su grupo a la cima y lo iba a lograr, lo primero que le pidieron fue que se presentara junto a otros grupos en un gran recital antes que el de ella y su banda. Lo hablo con su mánager y este no se opuso, así que, establecieron un día. Sería para los primeros días del mes y su recital, para mediados de mes. Todo el mundo ya hablaba de ese gran recital de muchas bandas y algunos solistas. La chica estaba muy feliz, ese día fue a buscar a Jeremías a la escuelita y un paparazi la persiguió y pensó. La fama es linda, pero cuesta la tranquilidad. Aun así, levantó a su niño y medio encapuchada, se fue a la placita con él. Nadie la reconoció por suerte, pudo estar tranquila con su niño y jugar con él que hacía tiempo que no lo hacía. Mientras jugab
Marcos todavía no podía caer en la realidad de que había contraído un noviazgo formal con Antonella, así que esa tarde mientras estaba sentado en su oficina y el sol entraba a raudales por la ventana, estaba en su escritorio pensativo, casi no hizo nada de papeleos porque su cabeza estaba en Antonella, en su familia como lo tomó. Se cuestionaba si hizo bien o mal en haber contraído una relación con esa chica. Delfina tenía razón en una cosa Antonella era muy inmadura, pero también quería darle un voto de confianza y esperar que en el proceso ella pudiera madurar. Todo fue muy rápido y además él no había tenido tiempo de procesar esa información, una llamada en su dispositivo lo distrajo de sus pensamiento, era su hermano Joaquín quizás se enteró de la relación que contrajo con la hija de los Sotelo y tenía que bancarse ahora el sermón. Sabía que Sotelo no era muy bien visto en el mundo de los negocios por su corrupción, se le habían encontrado dos o tres empresas fantasmas qu
Delfina se aprontó para ir a clases de piano la señorita Louise le dijo que la esperaba más tempranoque de costumbre así practicaban mejor para ese concierto. Delfina arregló pronto sus csas mientraspensaba en Sanrino y se preguntaba para si misma si serí verdad lo que le dijo aquella chica acerca deljoven. Algo quedba en evidencia Santino era un seductor nato, se notó que gustaba mucho a las chicas, ytodas iban a verlo jugar, también notó que muchas de ellas lo conocían y la tal como era que se llamaba,no recordaba su nombre, solo susenormes pechos que además los hacía notar, antes de salir se miro alespejo y se dijo comparado con aquela chica no yengo nada, pero al final que importa, un poco más unpoco menos. Lo importante es que hacías con lo que tenías y aceptarte, y aceptarse era una cualidaddeella. No era una chica que viviera para el cuerpo, su cuerpo se cuidaba sól en cierta medida por eldeporte que ejercía: la natación. Enredada en esos pensamientos cierra su dormitor
- Delfina llega a su casa, entra su mamá estaba en la cocina con la encargada de la casa y con Ana la chica ayudante grita -¡ Llegue! - Su madre la escucha y sale de la cocina -¡Ey hija ya volviste! - Pausa -¿ cómo te fue con esas prácticas? - -¡Según la profesora excelente, cada día estoy mejor según ella! - besa a su mamá - ¡ me voy a dar una ducha, estoy muy cansada, luego bajo a besar con mi hermanito! - dice a su mamá haciendo un gesto gracioso con su nariz. -¡ Está bien, mientras sigo en la cocina preparando la cena! - Delfina sube, lleva su mochila casi de arrastro está muy dolida con los acontecimientos de los últimos días, pero no se los dice a nadie, prefiere callarlo. Desde que murió su padre supo esconder sus sentimientos. Abre su habitación deja sus cosas encima de un pequeño sofá color ocre y luego se tira cuan larga es sobre la cama. Mira su dispositivo, lee los mensajes de Santino, pero no responde a sus w******p, con su mirada perdida en el techo de la ha
- ¡ Me parece perfecto! - luego continua - ¡ cítalos a las diecinueve horas ! - -¡ Bien así lo hare! - dice Paco Lorenz piensa en el giro que dio su vida en cuanto a los logros a nivel musical está super contenta, pero no deja de pensar en esa herida abierta que está costando cerrar. Pero cerrara se dice para si mismo y continua con sus ejercicios cotidianos, mientras piensa en donde realizará el show. Delfina sale de los vestuarios y ve a Santino sentado en bloque de piedra que hace a su vez de asiento, se acerca a él. El joven presiente que algo no anda muy bien en la vida de la chica, generalmente no es tan seria como lo está ahora. Para cortar el silencio él pregunta - ¿ Pasa algo? - ella lo mira de imprevisto, como que la voz de Santino llegara desde muy lejos y al momento responde -¡ no! - problemas, él la mira y se dice para sí, tu problema se llama Antonella, si supieras que el mío también. Deja sus pensamientos de lado y ¿ Quieres caminar y me cuentas? -
Santino quedó detenido mirando como se alejaba Delfina, se preguntaba que le estaba pasando a Delfina, tenía que matar cualquier emoción con respecto a ella. Sabía que aún cuando se enamorara de ella, su familia jamás dejarían acercársele. Fue como lo dijo Antonella, ella tenía razón por más que se disculpara, pero él sabía que lo que ella dijo era verdad. Se dispuso a llamar a Antonella-¡ Halo! - del otro lado se escucha el sonido del celular que suena pero no atienden, deja un mensaje de voz- Antonella llámame, necesito hablar contigo – chiaoGuardó su celular y continuo su camino sumido en sus pensamientos. En la casa de los Sotello la familia estaba a punto de reunirse para la cena, mientras esperan reunidos y beben algo. Don Antonio habla con su esposa y su hija- ¡ Tenemos que hablar con Marcos para iniciar los aprontes del compromiso! -- ¡ No te parece tan pronto padre? --¡ Para nada, cuanto más rápido mejor! - Antonella lo observa con cara de disgusto pero
v Ruth en aquel momento llegaba a las zonas de los suburbios con sus caseríos y su pobreza amontonada como un gran basural. A ella le daba un poco de asco toda esa situación, pero lo que iba a buscar tapaba todo lo demás. La mujer que a la que iba se llamaba Iris, era una mujer anciana, de esas que se le denotan cierta sabiduría por dentro, pro que por su pobreza llevan a cabo estas actividades. La mujer sabía la esencia de Ruth, no le era desapercibida. Iris tenía el cabello canoso, se lo dejaba así porque era su gusto, parecía una de esas curanderas de la edad media. Alguien corrió a avisarle que la mujer rica llegó y que la buscaba. Ella arriesgó algunas cosas antes de dejar pasar a Ruth. Sus manos estaban un poco torcidas por el dolor que aquejaba a sus huesos, la piel no recibía demasiados cuidados, y su ropa era lo único que llamaba la atención al igual que sus cabellos largos y canosos y la ropa impecablemente limpia. La casa era sencilla pero limpia, arreglada, s
Ruth llegó a su mansión ya caída la tarde, en ese momento llegaba Antonella, se saludaron con un beso, pero había tanta frialdad que asustaba, sin embargo al ver a Nana Jazmín , Antonella corrió a abrazarla. Ruth miro esa situación con cierto desprecio abrazar a una criada se dijo. Entraron Ruth deja su bolso encima de uno de los sillones y se dirige a su hija-¡Tu padre quiere que tratemos de fijar una fecha lo más pronto posible para tu compromiso con Marcos ! --¡ Si algo escuche! - dijo no muy feliz su madre la observa y le exclama con ímpetu-¡ Hay chica te vas a casi no te van a enterrar! - Antonella iba rumbo a su dormitorio y se da vuelta y con rabia dice-¡ Me obligan a casar, no me dieron a elegir si quería o no casarme! - su madre responde con brusquedad-¡ Pero a ti te gusta el joven Marcos! -Antonella la mira y le saltan chispas de los ojos y moviendo la cabeza al igual que su cabellera rubia responde- ¡ Una cosa es que me guste y otra muy diferente es que me