Esa noche, cómo en todas las otras noches que había dormido entre los brazos de Derek, no acosaban las pesadillas. Ella sabe que tarde o temprano tendrá que decirle, que contarle todo lo que ha hecho. Está comenzando a amar a este hombre y no puede iniciar una relación basada en la mentira, y si él la desprecia y la odia después de que ella diga la verdad, será menos doloroso separarse ahora. «Vamos Liesel, tu puedes» Ella se había llamado Liesel a sí misma, y fue algo tan espontáneo que ni siquiera se percató de ello.Cuando Derek despertó, pero solo un segundo antes de abrir los ojos, recordó que esa noche no había dormido solo. Liesel, su mujer estaba a su lado, y fue todo lo que se necesitó para que su miembro se pusiera viril, así que se giró para abrazarla, listo para hacerle el amor una vez más, en esta ocasión iba a sentarse sobre la silla para tener un buen alguno de sus hermosos pechos, adoraba los senos de Liesel. Derek se llevó una sorpresa al ver qué ella ya no estaba e
El día era perfecto, el clima, el tráfico e incluso las buenas noticias que sabía iba a recibir tan pronto como llegará a su despacho. En uno de los edificios de mayor prestigio de la ciudad, Balthazor Amery, presidente de La Hermandad, se encontraba en su oficina, del piso 103, junto con el doctor Ignaz Isordia. Ambos celebraban la captura de cambiantes leopardo, capturados en la última intrusión a una manada de cambiantes que se escondía en las montañas de Thompson Peak—¿Cuantos lograste capturar? —Balthazor Amery deseaba conocer todos los detalles sobre la nueva adquisición.—Un par de ellos. Un macho joven y un cachorro.—Excelente. Me imagino que ya los mandaste al laboratorio.—Sí, está vez los tengo aquí en la ciudad, nunca nadie sospechara de la nueva ubicación.—Sí, no podemos permitirnos darnos el lujo de perderlos cómo lo hicimos con Liesel.—¿Qué noticias tienes de ella?—Ninguna, pero me imagino que están con los Von Steiger. Eliot Dunham, logró engañarnos por mucho tiem
En las oficinas de Steiger Enterprise, Liam y Natasha, se encontraban reunidos para una videoconferencia con Jacob D'angelo.—¿Cuál es esa información tan importante que tienes para nosotros gato? —Nat, fue al grano como siempre. Ese hombre la ponía nerviosa y de malas, ambas cosas en partes iguales.—Buenos días para ti también hermosa —Jacob se sonrió de medio lado al ver la expresión de Natasha Reber. Ella siempre lo trataba con la punta del pie, y él no sabía porque, pero le gustaba empujar ese lado perverso de ella.Natasha no le regresó el saludo, estaba por demás intenta ser cordial con ese hombre, sacaba lo peor de ella siempre. Por el contrario, fingió quitarse una pelusa de la manga del saco negro que usaba esa mañana.Jacob sonrió más ampliamente al darse cuenta de que ella acababa d
Derek estaba dispuesto a rebanarle el cuello ahí mismo, el cinismo de Roger era por demás descargado. No sabía cómo era que no se habían dado cuenta antes, pero pronto iba a solucionar ese error.—¿Dime por qué?—Estas supuestas pruebas son una mentira, no puedes creer que...—Basta —bufo Derek —deja de mentir.—Yo no... —Roger cerró la boca cuando Natasha puso el audio donde él les mandaba las coordenadas de la cabaña en el bosque, los centinelas de La Hermandad para que los atacarán.—¿Quiero saber por qué? ¿Porque nos traicionaste? ¿Fue por dinero?—Yo... —Roger agachó la cabeza, no había más remedio que aceptar su error y reconocer que ya no podía seguir mintiendo. —Ellos me prometieron mucho dinero, pero lo que me hizo dar el p
Los días siguieron como sigue la vida, sin esperar por nada ni por nadie, Derek llevó a Liesel a otra sesión de tratamiento y como la vez anterior ella durmió por casi dos días. El verano dio paso al otoño, y así de un día a otro, todo cambió. La temperatura comenzó a bajar mientras las hojas de los árboles cambiaron su color verde por tonos tostados y amarillentos hasta que estás se secaron y cayeron ayudadas por la fuerza del viento.Liesel había decidido no decir nada a Derek sobre la lectura de su diario de adolescente que le había entregado Lysa, aún le costaba llamarla mamá. Después de hablar con Tatiana ella estaba confundida, pero también cabía la posibilidad de que la hermana de él la estuviera engañando, era todo tan confuso en su cabeza, así que decidió esperar con la ilusión de poder r
Liesel miró a Derek, y aún con todos estos sentimientos que no hacían más que confundirla, tuvo que reconocer que él solo pretendía utilizarla, le dolió en el alma, y el corazón cuando tuvo que reconocerlo, pero no podía negar por más tiempo, la cruda verdad que tenía ante sus ojos, no cuando Derek la despreciaba, por alguna razón que ella desconocía. Ya había sufrido bastante con su desamor.Derek notó el cambio de humor en ella, pasó de estar excitada a completamente fría, incluso su aroma había cambiado, era como si ella estuviera sepultada bajo una capa muy profunda de su corazón sus sentimientos hacia él.—No te atrevas a negar lo que sientes por mí —era un reproche de su parte, uno muy egoísta pero no podía permitir que ellanegara su amor por él.—T&uacu
Al final Liesel no llegó a dar una respuesta a la pregunta hecha por Kurt, una llamada en el celular del abuelo la salvó de tener que dar muchas explicaciones, sobre todo explicaciones que no quería dar. Ella salió del despacho dejándolo solo para que atendiera el teléfono cuando él le informo que necesitaba responder esa llamada, Liesel asintió y se fue directo a la recamara de Lysa, necesitaba hablar con su madre para informarla de la decisión que había tomado.Encontró a Lysa Dunham en la recámara de su padre, un lugar que no había visitado con mucha frecuencia desde que llegó a la casa de los Steiger, pero para su defensa debía decir que recordaba muy poco del hombre postrado en la cama.Después de la llamada, Kurt mandó a llamar a su nieto, Derek no se encontraba en la casa, pero fue informado en cuanto regresó que su abuelo n
Liesel y Derek se quedaron mirándose el uno al otro, hasta que ella tuvo que desviar la mirada antes de quedar atrapada de nuevo en esos sentimientos que él le provocaba cuando hacía eso. Sus entrañas derritiéndose en esa extraña energía que lo envolvía a él y la atraía a ella.Derek por su parte tenía en el rostro una expresión divertida y una sonrisa arrogante que la acompañaba, estaba perfectamente consciente de lo que estaba pasando con ella.A Liesel le provocó borrar esa sonrisa con una bofetada, pero tampoco pensaba darle el gusto de saber que a ella la molestaba con su actitud, mejor sería ignorar a Steiger, estaba segura de que eso lo irritaba aún más.—Entonces le diré al abuelo que te marches de la mansión.—Te lo agradezco. —Ella entró en la habitación y