Narra Helen.Una mano me abraza fuerte por vientre provocando que me despierte enseguida. Ando tratando de persuadir el lugar donde me encuentro, enseguida saltó asombrada, ¡rayos!. Grito mientras llevo las manos a mi boca para no despertarlo. Un Dylan dormido está a mi lado, solo lleva un bóxer, además yo estoy completamente desnuda, lo que significa que tuve sexo con el,¡ por dios! Pensé que todo había sido un sueño, un maravilloso sueño.Me levantó cautelosamente. De verdad no creo que haya tenido sexo con el después de lo que pasó, después del todo el daño que me ha hecho. ¿Que hiciste Helen?—me digo mentalmente.Trato de recordar todo, pero solo recuerdo que salí del bar porque el estúpido de Saúl trato malísimo a Dylan y a mí me dolió tanto que salí a defenderlo. Que tonta —me digo mientras llevo las manos a la cabeza por el dolor.Tomo mi ropa que está esparcida por el piso y caminó con ella al baño. Me baño rápidamente, los jugos de mi vagina están derramados por todo mi cuerpo
Narra Dylan.Llamé a Camilo por teléfono, porque el dolor en mi pierna es insoportable. La fuerza que hice la noche anterior me ha dejado una lesión muy dolorosa, y casi no puedo moverme, así que lo llamó para que venga a buscarme.—Camilo, ven a mi departamento por favor, necesito que vengas y traigas la silla de ruedas —le digo por teléfono.Con un poco de dificultad me baño y me visto rápidamente, recordando la noche anterior con Helen. Pareciera que tengo grabado sus besos, sus caricias, su piel en la mía; realmente la amo.A los pocos minutos llega Camilo, le indico que me ayude a subir en la silla, y que también vayamos por unos analgésicos.Después de pasar por la farmacia, me decido a ir a la casa de Helen, puesto que se fue así como así, y no pienso que todo quede así, está vez no, necesito que hablemos, y si, es lo que haré.Me bajo del auto con mi bastón, ya no puedo seguir ocultando que camino, para que, no hay ninguna razón de hacerlo, ella me vio la noche anterior.Llegó
Narra Helen.Margarita me llevó a un cuarto, mientras las brujas de Amanda y Marina se iban a su habitación. Sentía miedo de estar ahí, pero sabía que debía controlarme, parecía una loca y los nervios me tenían desorbitada.Un gran peso se cayó de mis hombros cuando le dije a Dylan que era el padre de mi hijo, fue como si mil kilos de cemento se fueran de mi costado, aunque la mirada y el odio que desprendía de sus ojos me dolió mucho. Pero, es que yo vine ese puto día a decirle y Marina me dijo que el era féliz con Amanda, y yo… yo solo lo deje que fuera feliz.Llegamos a una habitación. Estoy temblando, no se porque tengo fiebre , presiento que es por el choque emocional que he tenido.—Señora Helen, tome un baño, ya verá que el niño va a mejorar, tome un baño mientras le preparo una sopa caliente y le busco algo de ropa —dice Margarita dulcemente.Asiento con la cabeza sin responder, deseando terminar rápido para ver a mi hijo. Estoy tan angustiada, malos pensamientos llegan a mi m
Narra Dylan.Mi corazón late a mil por hora. Es que saber que hay una persona que vino de mi, es el más grato sentimiento que puedo tener, y saber que está ahí, en esa cama a punto de morir, es el dolor más inmenso que puedo sentir. No entiendo porque el destino se ha empeñado en hacerme sufrir, he perdido tanto, solo espero que Dios se apiade de mi alma, y yo pueda lograr ser feliz, solo deseo que ese pequeño viva.Con las manos temblorosas me acerco a él, para tomar su mano; están frías, supongo que por el clima frío de la habitación. Observó su delicado rostro, lleva una manta en la cabeza, tapando supongo la herida que se hizo. Los aparatos conectados a él suenan en un sinfín de ritmos que me duelen en el alma. Es tan pequeño, que de solo saber que está pasando por todo esto me causa escalofrío. No entiendo la vida, hay personas que son tan malas y retorcidas andando por el mundo de lo más tranquilas, y otras tan inocentes y dulces como este pequeño que sufren tanto.Comienzo a ll
Narra Helen.Aunque intenté pedirle perdón a Dylan, no quiso hacerlo, y en cierto modo lo entiendo, no debe ser fácil para él saber que tiene un hijo de cinco años, y no haberlo visto crecer. ¡Pero joder! yo intenté decirle, y su horrorosa hermana no me lo permitió, y aunque debí seguir insistiendo me ganó el orgullo, y ahora no se que hacer, amo a Dylan, y saber que nunca estuvo con Amanda, me a despertado las ganas de luchar por él, aunque, no se si en algún momento me perdone, no, no él tiene que hacerlo, yo lo que más deseo es que estemos felices y tranquilos los tres juntos como la familia que somos, y no se que haré pero lograre hacerlo—río para mis adentró, porque si antes él me obligó a casarme con él, ahora soy yo la que quisiera obligarlo.Me recuesto del sillón, no sin antes verlo por el rabillo del ojo. Está ahí a mi lado, esperando ver a su hijo al día siguiente, y eso me llena de alegría. ¡dios!, es tan hermoso, no solo por fuera , sino que de igual manera por dentro. No
Narra Dylan.Me siento tan bien, a pesar de la traición de mi hermana, todo está tomando rumbo en esta historia, mi hijo está bien, y yo deseo dedicarme a él al cien por ciento. No deseó jamás separarme de él, jamás.Salgo de la clínica. Necesito desenmascarar a Marina, además quiero hablar con Gonzalo, contarle que el hijo de Helen es mi hijo, pero no solo para eso, necesito que lleve mi apellido, y que se entere el mundo entero que Dylan Mayora tiene un heredero.Al llegar a la mansión, veo a Margarita llorando, y María con ella consolándola.—¿Qué pasa Margarita?¿ por qué tienes el labio roto?—le pregunto preocupado.—La señora Marina —la miró desorbitado.—¿Qué pasa con Marina? ¿dónde está ella?.—Se fue señor , ella y la señora Amanda huyeron, trate de detenerlas, pero Marina me golpeó, se llevaron el dinero de su caja fuerte, y todas las joyas —subo casi que corriendo a mi habitación, para buscar detrás del cuadro, y efectivamente, ahí guardaba las joyas de Alicia, joyas costosa
Narra Helen.Después que Dylan se fue a resolver su asunto, comencé a revisar mi celular. Tenía varios mensajes de mi amiga Lina, pidiéndome que la llamara diciéndome porque me fui así del bar, y un montón de cosas, no le respondí estaba muy molesta con ella, primero me dejó sola con Saúl, y después se desapareció por completo, gracias a Dios que Dylan estuvo ese día ahí, o no se que fuera sido de mi,. Dylan, mi Dylan, de solo recordarlo se me mojan las bragas, este hombre pone mi mundo de cabeza.Continuó leyendo los mensajes, y me percató que tengo un mensaje de Saúl. No sé quién carajo le dio mi número, aunque supongo que Lina, ¿quien más? ella es la única que lo conoce aparte de mí, así que no le tomo importancia a ese mensaje, aunque me pide disculpa, y que quiere hablar conmigo, lo ignoró por completo para escribirle a mi jefa, diciéndole el gran inconveniente que tuve y que mi hijo está en el hospital, que apenas pueda comienzo a trabajar de nuevo, aunque no será con Dylan como
Narra Helen.Me levanto muy enérgica, aunque duele un poco mi cabeza, y definitivamente todo lo que ha sucedido es algo trágico y doloroso, en especial para mí madre, siento que ahora sí puedo ser feliz, aunque todavía está Amanda y Marina, tendré que preguntarle a Dylan sobre ellas, no es posible que después de lo que hicieron estén tranquilas.Saco todo pensamiento negativo de mi cabeza y voy directo a la ducha. Es muy temprano apenas está rayando el alba, pero la costumbre de levantarme para irme a trabajar es algo que no puedo evitar hacer, así que me baño con cautela, evitando mojar la herida en mi cabeza.Cómo sé que Dylan está en casa me coloco una pijama corta, un short de seda que va a conjunto con una camisa suave y muy sexi. Tengo que hacer lo que sea para recuperar a Dylan , lo que sea, así que empiezo con ese plan .Después de hacer mis necesidades, salgo directo a la cocina. Me extraña no ver a mi madre levantada, todos los días está preparando los guisos para su negocio