Capítulo 245
Lucía preguntó con indiferencia: —¿No debo hacerte enfadar a ti, ni decepcionar a tu tía, y además tengo que mantener contenta a tu madre? ¿Y en todo yo donde quedo?

Mateo respondió algo molesto: —Lucía, no olvides que fuiste tú quien le dijo a mi abuelo que querías casarte conmigo.

Lucía recordó aquellos doscientos mil dólares y las acciones. Le dolía demasiado la cabeza y sentía como si una mano invisible le apretara con fuerza el corazón. Por un momento, le costó respirar.

No quería seguir discutiendo estos asuntos con Mateo, así que se apoyó en la ventanilla y cerró los ojos.

Mateo dejó de hablar, asumiendo que estaba cansada.

Poco después, el conductor estacionó frente a Vista Hermosa. Mateo pensaba dejarla dormir un poco más, pero para su sorpresa, Lucía abrió con firmeza la puerta.

Al ver que caminaba a paso largo, Mateo se dio cuenta de que no estaba cansada, simplemente no quería enfrentarse a él.

Mateo se mordió nervioso los labios y la siguió: —Entra primero a ver. Si no hay
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP