Para dentro de dos semanas estaba programada la boda de Ángela y su prometido. Pero esta se tuvo que adelantar una semana antes porque para aquel entonces, ella tiene programada la fecha para su intervención quirúrgica.

— Hijos, por favor díganle a su madre que no se case. —Pide Mario José, cada vez que tiene la oportunidad de hacerlo.

— Ella nos comentó que está enamorada de él y que vamos a estar bien a su lado porque él nos trata como si fueramos sus propios hijos. —responde uno de los chiquillos.

— ¿Ustedes lo quieren a él?

— Claro que sí papá, él se ha portado muy bien y se ha ganado nuestro amor y respeto.

— Está bien. Dejemos que su mamá se case con él si eso es lo que quiere. Pero si ese hombre cambia en la forma de tratarlos a ustedes por favor no tarden en hacérmelo saber y yo lo pondré en su lugar.

Finalmente el hombre aceptó que su amada pelirroja se quede con otra persona que no sea él, pero ¿será que se va a retirar del juego así por así, sin pelear la pelota en la canch