— Parece que nunca te hubieses acostado con un hombre, te estás comportando como una niña — Agregó Noah antes que Sophia pudiera hablar y eso la llenó más de rabia
— no me ofendas — dijo Sophia llena de ira
— Es la verdad, te estás comportando patéticamente — añadió Noah, y luego se arrepintió por expresarse de esa manera, así que para compensarlo continuó — yo solo quería estar contigo, me pareces demasiado atractiva e inteligente, llevo meses observándote, me fascinas me provocas demasiado, no pensé que fueras tan recatada
— Lo soy, pero me dejé llevar y no quiero que esto traiga problemas a nuestra relación laboral, por eso lo mejor será que me vaya — Agregó Sophia intentando controlar las ganas de llorar, en el fondo no deseaba perder su trabajo. Tenía una vida independiente, ya no vivía con su madre, sino que alquilaba un apartamento en donde disfrutaba de su tranquilidad y se daba todos los gustos que quería, pero si perdía su trabajo nada de eso podría seguir siendo útil, y no deseaba volver a casa de su madre, porque ahí estaba su Tía Whitney, la madre de su prima Jennifer, la mujer con la que su exnovio Andrew la había traicionado, y la razón por la cual la boda se canceló. No quería tener que estar ahí en medio de esa situación desagradable, pues aunque quisiera a su tía, la relación se había arruinado a raíz de esa traición, y su madre no quería correrla de la casa porque era quien la cuidaba cuando tenía recaídas de su enfermedad. Además, era ella quien pagaba los gastos de lo que su madre necesitaba y esas eran razones suficientes para trabajar.
— ¿En verdad vas a irte? — preguntó Noah intentando mantener la calma, estaba nervioso por perder a su mejor trabajadora a causa de sus pasiones que no sabía controlar
— Sí, creo que es lo mejor — contestó a secas mientras el nudo en la garganta le dolía, vio a Noah con el rostro serio denotando la molestia que le provocaba todo el embrollo en el que se habían metido.
Ella se estaba odiando por haberse entregado a él de esa manera tan repentina, no había sabido actuar adecuadamente, y sentía que toda la reputación ganada se había ido a la basura en un segundo.
— Sophia, no es necesario — contestó Noah con verguenza, y no entendía el motivo que lo obligaba a sentirse así, porque en otras circunstancias no le hubiese importado, pero esta vez aunque intentaba ser indiferente, no dejaba de sentir culpa por lo que estaba provocando.
— Pues ya has dicho que si es preciso, tú mismo puedes despedirme, así me ahorro de venir quince días a trabajar, anda despídeme inmediatamente, y te juro que no me vuelves a ver la cara — lo retó — Yo no quiero estar en tu lista, no quiero ser otra más de las que te has llevado a la cama, no quiero ser la amante, la que te llama y piensas que es un fastidio, como sucede cuando te llama kate — alegó recordano lo que había sucedido el dia anterior en la clínica
— Kate no es nada mío — volvió a afirmar Noah pronunciando cada palabra con fuerza
— No sé, el punto es que estás con ella y yo no quiero ser plato de segunda mesa — añadió Sophia, dejando ver lo que le dolía no significar nada en su vida, más que ese momento de pasión
— Bien, Sophia, intenté ser amable contigo y sin embargo te sigues comportando como una adolescente — volvió a repetir Noah y Sophia sintió verguenza, no quedaba duda que así se estaba comportando, pero es que ella nunca antes había pasado por una situación similar, siempre se entregó a sus novios, después de largos meses de relación, y enfrentarse ahora ante un explosivo hombre que la había hecho sentir cosas imaginables en la cama, sin ser más que jefe y empleada, le generaba miedo y no quería convertirse en ese tipo de mujeres que se conforman con una noche de sexo, y que luego no saben más sobre la vida de ese hombre, ella no quería eso, pero era obvio que Noah solo tenía esas intenciones y que jamás iba a estar con ella en términos de noviazgo o relación formal.
— No importa cómo me esté comportando, importa que cometimos un error, que eres mi jefe, que soy tu empleada, que laboralmente hemos creado un problema, y que no soy capaz de mirarte a la cara después de esto, no me sentiría bien — añadió Sophia, Noah tragó grueso, y respiró profundo para calmar su ira y decepción, se sentía mal porque las cosas hubieran terminado de esa forma. Cuando él solo quería complacerla, hacerla suya, después el tiempo se encargaría de hacer lo suyo, pero Sophia estaba limitando cualquier posibilidad a futuro.
— Listo, que descanses — Contestó esta vez con más indiferencia que antes, y sin decir nada salió de prisa y se fue hasta su habitación en donde la soledad lo alcanzó de nuevo, hubiese querido dormir con ella, sentir su piel, su olor que le había encantado, poder apreciar mejor su silueta, su cuerpo desnudo y despertar con ella, pero todo eso se había arruinado, jamás imaginó que Sophia llegara a ese nivel de molestia, creyó que al igual que el resto de mujeres, ella se sentiría satisfecha, contenta; sin embargo, había sido todo lo contrario y eso lo tenía muy mal, además lo hacía pensar demasiado en ella y sentirse más atraído, sobre todo ahora que la había hecho suya.
Sophia tampoco había logrado concebir el sueño, la traición que su ex le había hecho, la dejó muy dolida, y le hizo perder toda esperanza sobre los hombres, creía que todos eran así de falsos, así que involucrarse de esa forma con otro hombre a tan solo unos meses de su ruptura, le generaba repulsión contra ella misma, y le parecía demasiado triste que él solo lo hubiese usado para eso, pero más aún, que ese hombre fuera su jefe, a quien se suponía que le debía respeto, ahora había roto la mayor regla de su contrato, recordó cuando lo firmó, y también su promesa como trabajadora de la salud, su reputación quedaría por el suelo si alguien llegaba a enterarse, lo bueno es que estaba lejos de California, pensó.
Se cubrió con la manta y lloró con mucha tristeza, por sentirse sola, quizá Noah tenía razón y debía evitar complicarse la vida por cosas tan simples, y empezar a disfrutar más de los placeres de la vida, pero tenía dentro de sí, muy presente las cosas que su madre le había enseñado, y ella no deseaba comportarse como su prima Jenifer, esa que le había arrebatado la poca felicidad que tuvo algún día, por eso precisamente no quería ser la causa de la ruptura de la relación de Kate con Noah, así que lo mejor era alejarse completamente.
De pronto Noah escuchó el sonido de su celular, indispuesto a responder, lo ignoró, pero las llamadas continuaron, así que no le quedó más que levantarse de la cama e ir por su teléfono que estaba en la repisa, recibiendo carga. Cuando vio el nombre de su hermano, se sintió más frustrado, lo que menos deseaba era hablar con él.
— ¿Ahora qué quieres? Ya te he pagado — dijo Noah, pues lo conocía bien, y por eso se había tardado con él, para poder entregarle todo el dinero correspondiente al pago del uso de su clínica. No tenía ánimos de conversar con él por eso ni siquiera lo saludó.
— Creíste que me iba a quedar cruzado de brazos después de lo que me hiciste, nunca voy a perdonarte que te estás involucrando con Kate, pero eso se acabará a partir de hoy — Advirtió Cristopher entre risas
— ¿A qué te refieres? Olvida ese tema, Kate no es nada relevante para mí, sucedió simplemente, no es mi culpa que te hayas marchado de California y ella haya quedado sola, lo siento, no pensé que podría afectarte — respondió Noah confundido
— Hermanito, acaso no te diste cuenta de que venía atrás de ti — comentó con sarcasmo y risas burlonas. A Noah se le erizó la piel ¿Qué pretendía con eso?
— No sabía que te tenía de guardaespaldas — señaló Noah con molestia — ¿Por qué me estás persiguiendo? — interrogó mientras fruncía su ceño, nada bueno podía traer entre manos su hermano
— Me he dado cuenta de todo, hasta la puerta se escuchaban los gemidos de esa mojigata a la que llamas “tu asistente de cirugía” — hizo un tono de voz que remedaba a Noah — así que todo eso lo sabrá Kate para que se aleje de ti, eres un patán — agregó demostrando su descontento
— Pues si le cuentas, un favor me haces — le respondió Noah
— No creo que ella piense lo mismo, te odiará por engañarla — escupió Cristopher buscando una forma de amenazarlo y de advertirle que estaba en serios problemas, que él no se quedaría tranquilo y que aprovecharía toda forma de ventaja sobre él, para cobrarse lo que le había hecho, respecto a Kate. — No me importa, te he explicado una y otra vez que ella no significa nada en mi vida, solo fue una aventura, jamás le he mostrado interés en otra cosa que no sea nuestro vínculo sexual, no te confundas, sé que mi padre está entusiasmado con ella, pero Kate, no es mi novia como él piensa, se lo dije así para evitar confesiones innecesarias, porque deseo que esté bien y no quiero darle problemas, pero no, Cris, Kate solo me ha acompañado un par de noches, la mayoría de veces que la necesito me cancela, siempre está ocupada, tienes el camino libre con ella — siguió diciendo Noah, sabía que si Cris se había enterado era por su padre el señor Wilson Smith, quien estaba demasiado emocionado por s
Devan se detuvo un momento, y con su acento afeminado — Lo siento, queridísimo Noah — dijo, pero este lo miró con más enojo, odiaba las persuasiones, y sobre todo se sentía frustrado por saber que Sophia no aparecía por ningún lado. Estaba ansioso por no mirarla, porque quería hablarle, decirle lo que estaba sintiendo.— Qué me digas, qué pasa, no te entiendo, habla claro — Le insistió con voz fuerte— Pues, es que, Noah, pensé que estabas enterado — titubeó Devan con sus ademanes femeninos más pronunciados por el nervio que le provocaba la situación— De qué, habla, de qué — repitió Noah demostrando toda su frustración, sabía que algo malo ocurría y que el culpable de todo era su hermano Cris.— Ay, no, no quisiera ser yo quien te lo diga, es que es tan terrible — Se defendió Noah, ahora con miedo por haberle revelado que algo malo pasaba— Pues entonces, si no vas a decirme, lárgate, no me hagas perder el tiempo y mejor llama a Sophia — Pidió Noah regresando a las gavetas para seguir
Cuando la ambulancia finalmente se detuvo en el hospital gubernamental, Noah vio a Sophia bajarse después que sacaron la camilla en la que llevaban a una señora conectada a un respirador. El asunto parecía grave, y era claro que se trataba de la salud de la madre de Sophia, quien recientemente había estado enfermaSe bajó de prisa antes que Sophia pudiera entrar al hospital, ella se sorprendió tras mirarlo acercándose a ella, e impidiéndole el paso para entrar al hospital— Espera, por favor — pidió Noah tomándola del brazo y situándose frente a ella— ¿Noah? ¿Qué haces aquí? — le preguntó arqueando las cejas y cruzándose de brazos, quería ocultar lo que sentía, estaba fingiendo indiferencia, pero también se sentía molesta por lo que había salido en la red social, pensaba que era culpa de él y eso la tenía llena de ira y preocupación, además le había creado un problema familiar que por el momento había sido omitido de cierta manera, por la complicación de su madre.— Escúchame, no te
Noah hizo un movimiento involuntario causado por el susto que le provocó ese roce, estaba muy retraído observando a Sophia que ni siquiera había pensado que en ese hospital era donde trabajaba su amante.—Con que tu instinto de hombre engreído murió y entonces viniste a buscarme ¿Ahora si vas a darme una explicación? — dijo Kate tras tocarle la espalda y rodearlo. Noah sintió como los vellos de la piel se le erizaban y la garganta se le secaba. No quería que su presencia ahí perjudicara la atención que necesitaba la mamá de Sophia, ni que ella los viera juntos— No — respondió a secas, ni siquiera sabía qué responderle o cómo justificar su presencia ahí— Entonces, qué haces aquí, viniste a buscar otra mujer con quien revolcarte — Insinuó Kate demostrando la rabia en la pronunciación de cada palabra— Doctora, lamento interrumpirla, pero ya tiene varios pacientes esperándola y hay uno en especial que necesita una cirugía, ya hemos realizado los exámenes correspondientes, en un momento
Sophia no tenía ni la menor idea de cómo iba a solucionar ese embrollo, pero lo que sí estaba claro es que no quería estar cerca de esa mujer a la que de cierto modo le había causado daño, pues a ninguna persona le gustaría ver a su novio, amante, pareja, lo que fuera, públicamente con otra.Así que la entendía bien, comprendía su dolor, y se sentía terriblemente mal por eso, si algo detestaba era provocar dolor en otra mujer, pero aquí el más culpable de todo, era Noah, el insaciable Noah, el estúpido y patán Noah, su única solución en el momento que estaba pasando.—¿Tiene un vehículo para transportarla o requiere de una ambulancia? — interrogó el doctor, con amabilidad, indispuesto a contradecir lo que había solicitado— Si pudiera, por favor, prestarme el servicio de la ambulancia, se lo agradecería, mil disculpas — Dijo Sophia con vergüenza, ante la mirada de todos los pacientes que se encontraban ahí esperando ser atendidos, mientras en su cabeza daba vueltas la idea de soluciona
— Por Dios, Noah, no vengas con eso ahora, sabes el lío en el que estamos metidos y tu mujer, Kate, está furiosa, no deberías jugar con algo tan serio — respondió Sophia con la voz un tanto seca, escucharlo decir eso le había removido todos sus recuerdos, pensar en boda le asustaba, pues no era fácil asimilar que se había quedado con su vestido de novia listo, luego de enterarse de la infidelidad de su novio y la traición de su prima. Además lo que le había hecho pasar Kate era la advertencia clara para entender que no debía meterse más con Noah, pues las consecuencias de ese pequeño encuentro estaban perjudicando grandemente su bienestar profesional, emocional y familiar— Sophia, escúchame, intento remediar la situación, no he sido del todo amable, y tal como dices, me he comportado igual que un patán, pero en verdad, no es eso lo que quiero, tú me pareces demasiado— Fácil — lo interrumpió ella — quizá pienses que soy fácil porque esa noche caí redondita en tus brazos pero es que no
La cara de Noah cambió tan pronto leyó ese mensaje, eso significaba un gran peligro para él y no quería que Sophia se enterara, pero sería inevitable, pues se dirigían a la Clínica, y ya estaban cerca— ¿Pasa algo? — preguntó Sophia cuando lo vio cambiar de color— No, nada, es solo un aviso de Devan — contestó Noah colocando el celular en el asiento— Pues tuvo que ser algo terrible, porque estás pálido — Dijo Sophia con un poco de preocupación— No, nada, solo debemos darnos prisa, ya estamos a unas cuadras de la clínica, estarás con tu madre y todo se solucionará — respondió Noah un tanto nervioso, empezó a conducir con más prisa, Sophia sintió que por momentos era difícil comprender a su jefe, como él había dicho, solo ante ella se mostraba diferente, pues nunca antes había imaginado que fuera él quien le ayudara con el asunto de su madre, que pudiera brindarle apoyo y compañía cuando más necesitaba. Tal vez el verdadero amor era eso, estar para el otro, no desampararlo ni huir cu
— No voy a permitirle que me hable de esa manera — dijo Sophia que no era de las que se dejaban humillar de nadie, y no le importaba si ese señor era el padre de Noah, estaba cansada de los problemas— Padre, por favor — logró decir Noah— Nada de por favor, escuincle, estás metido en un lío, ahora da la cara ante Henry, no seas sin vergüenza — gritó el señor enfadado.— Yo tengo otras cosas más importantes que hacer — dijo Sophia caminando de prisa y se tropezó con su brazo cuando pasó a su lado— Adonde, crees que vas — dijo el señor Wilson tomándola del brazo y obligándola a retroceder, eso le pareció demasiado deshonesto— Suélteme— SuéltalaDijo Noah y Sophia a la vez— No, hasta que me des una explicación — dijo Henry — de mi hija no vas a burlarte— Mi amigo tiene razón, vamos ahora mismo a tu oficina — ordenó el señor Wilson — debes aclarar de una vez por todas qué es lo que está pasando— Maldición, que tengo a mi madre enferma, déjeme pasar — contestó Sophia soltando su bra