CAPÍTULO 2

Mauricio recibía a los miembros del comité de lobos para organizar el baile de máscaras que se realizaria el fin de semana.

En este baile, las lobas y lobos se presentaban ante la diosa Luna al cumplir 20 años de edad.

Mauricio lo consideraba una arcaica celebración, pero no quería que todos los lobos ancianos sihuieran pensando que era muy joven para el cargo.

El lobo camina por las calles de la manada y se detiene a ver a Susan que espera en una boutique de vestidos, por un momento se ruboriza y niega con la cabeza, no puede ver su belleza sin sentirse un traidor.

Susan elige un hermoso vestido color esmeralda que irá acompañado de una máscara dorada de brillantes, sus amigas y ella han esperado esta fiesta con gran entusiasmo.

Ella deja todo atrás al ver a Julián en la puerta de la boutique, se acerca y lo abraza dándole un beso.

— Pensé que seguías enojado, no me has buscado desde esa noche, te deseo, te amo pero espero que entiendas, quiero esperar.

— Lo se preciosa, fui yo quien me equivoque, te prometo que los dos vamos a estar juntos solo cuando quieras, además no quiero que nada dañe la fiesta.

Julián besa las manos de su novia, sonríe falsamente asegurando comprender lo que pasó, su plan con Nyle está claro.

—¿Como estarás vestido?— Susan mira hacia afuera, su padre está por llegar.

— Usaré un vestido negro y una máscara negra con una rosa roja pintada en un lateral — Julián sonrie sabiendo lo que pasará.

Hoy sellara el destino de una enamorada Susan.

Alfred Duperly llega y agarra a su hija de la cintura — Hasta que no se confirme un compromiso, prefiero que ustedes no mantengan una relación cercana.

El lobo gruñe, Julián es la última opción que desea para su hija, Susan agacha la cabeza y asiente retirándose del lugar con el vestido y su padre

Llega la noche...

Susan emocionada se arregla lo más hermosa posible, es la primera fiesta a la que irá sin la supervisión de su padre, le mintió, le prometió no estar junto a Julián pero desea bailar con el iluminados con la luz de luna.

Julián bebé un poco de trago y se coloca su disfraz para ir me busca de ella, se va muy temprano y no se da cuenta que Mauricio que llegará más tarde a la fiesta, tiene su misma máscara pero con una capa color rojo.

Nyle espera a Julián afuera

— ¿Repasamos el plan? Cuando te la lleves al bosque, le aviso al viejo Duperly para que los encuentre.

Julián sonrie, llega a la fiesta y busca a su novia que lo abraza y besa tímidamente.

Susan ve en Julián un príncipe azul que ha sufrido y que solo ella puede amar, tiene una benda en sus ojos que no ven el verdadero lobo que hay tras el.

— Te traje un poco de ponche, debes estar sedienta — Julián le entrega una copa con la bebida mezclada con el líquido que le dio su amigo.

Susan lo bebé confiada, sonríe sintiendo la menta refrescarse en su garganta.

Nyle observa desde la distancia lamiéndose los labios mientras coquetea con algunas lobas que quieren llamar su atención.

Susan le pide un poco de agua a Julián que se aleja de ella, esperando que el bebedizo haga efecto.

Pero un lobo grande y gordo acompañado de otros lo jala del brazo y se lo lleva al apartado bosque.

—¡¿Donde esta mi dinero?!— exclama furioso mientras agarra del cuello a Julián y lo asfixia un poco.

Al soltarlo, Julián cae al suelo y Tose abriendo los ojos

— Te dije que te pagaría en una semana, aún no lo tengo — titubea al sentir su garganta reseca.

El lobo le da un fuerte golpe en el rostro que lo deja malherido en el suelo.

— Te di ese plazo si confirmabas tu compromiso con la hija de Duperly, pero no paso, así que me debes pagar ahora mismo — gruñe el lobo con los ojos llenos de fuego.

—¡No lo tengo! Después te pago — Julián se quiere alejar, pero el lobo hace una seña y obliga a sus lobos que golpeen a Julián.

La golpiza es brutal, Julián queda muy herido sangrando e inconciente en el suelo.

Susan empieza a sentir calor, hay algo extraño en ella, como si la música que suena en medio de la fiesta, la tocará y la hiciera vibrar.

Gira para buscar a Julián, choca con Mauricio que llegaba a la fiesta, no le deja pronunciar una sola palabra y lo besa.

La pasión de ese beso tierno y sensual, es de una Susan que nunca imaginó vivía en ella.

Mauricio se aleja un poco, sonríe al verla y quiere saber quién está detrás de la máscara dorada.

Susan cree que es Julián quién está tras la máscara, aquella droga no la deja pensar con claridad, pues sus instintos lobiles están apagados, es como si una euforia interna se apoderada de su cuerpo.

— ¿Quien... — Mauricio recibe otro beso que no le dejas terminar la frase.

— Vámonos de aquí — Susan se cuelga del cuello de Mauricio mientras sus besos se hacen más babosos.

Los dos se pierden en el bosque, donde la oscuridad es su único complice, Mauricio quiere saber quién es la misteriosa loba, pero siente que el encanto de lo que pasa es precisamente por la adrenalina del no saber quién está detrás.

Nyle ve la escena y de inmediato sale corriendo a la casa de Duperly, se para en su pórtico y fuma un cigarrillo dándole un poco de tiempo a su amigo para que cumpla el objetivo.

Golpea desesperado y Alfred abre la puerta frunciendo el ceño

—¿Que quiere?— dice Alfred déspota.

— Señor, no me gusta traerle chismes, pero su hija y su novio Julián se perdieron en el bosque y creo que está entregándole su virtud.