Alexander fue llevado a una prestigiosa clínica especializada para las adicciones, para la familia fue duro separarse de él, Rocío no se regresaría a Inglaterra, ella se quedaría en el país americano por algún tiempo

Domenico Ferrer, estuvo en todo momento con ella, siempre apoyándola en todo, trayendo su café o agua, dándole palabras de aliento, el ingles era un hombre extraordinario, hacía poco más de un año que una mujer le había roto el corazón y apenas ahora comenzaba a abrirse al amor de nuevo, por eso es que entendía perfecto a Rocío

Angelo los observaba a distancia, le parecía irreal ver a su hasta hace poco esposa, mirando sin importarle nada a otro hombre

— ¿Qué se siente que te hagan lo mismo que hiciste, eh? aunque por lo menos Rocío esperó a divorciarse de ti, mientras estuvieron juntos jamás te engañó — Lucien le susurró esa pregunta al oído a su hermano, el hombre en el fondo era algo cruel, no lo podía evitar

— No juegas con eso, me está ardiendo la piel, la sangre y