Luciana, a pesar de ser idéntica a su padre, Lucien Black, físicamente, su carácter era como el de su madre, era adorable, entregada al amor de ese joven CEO ingles llamado Julien Torrenegro, el apuesto empresario había cautivado a la más pequeña de los hijos del temible CEO americano Lo que Luciana no sabía era que su gran amor había decidido casarse con ella solo para aparentar un matrimonio falso, ya que el se sentía atraído por la esposa de su hermano mayor, Elena, Julien, pasaba la vida pendiente de esa mujer que le daba pequeños rayos de esperanza cuando no estaba al alcance de los ojos de su marido, mientras que a ella la ignoraba peor que a un muebleAhora había regresado con el corazón roto, después de haber presenciado un beso entre Julien y Elena, Luciana, pidió el divorcio y tomó el primer vuelo que salía a los Estados Unidos, — ¡Qué sorpresa tenerte por aquí Luciana! ¿ya pasaste a saludar a papá y a mamá? Lucien saludaba a su hermana desde su cómoda silla — preguntó el
Lucien, estaba furioso, que imbécil tan hijo de puta pudo hacerle esa canallada a su adorable hermana, Luciana, era hermosa, inteligente, jovial, con un corazón de oro, que más podía pedir ese miserable Fue toda una proeza poder calmar a la destrozada Luciana, solamente tenía veintiún años y ya sería madre, Lucien, la consoló y le dió su total y completo apoyo, los dos quedaron en que irían a la mansión de sus padres a ponerlos al tanto de lo que sucedía, ninguno de los tres hermanos eran cobardes, tomarían el toro por los cuernos siempreEl joven CEO canceló todas sus reuniones por el resto del día, salió con Lucían de la compañía en su lujoso Maserati, ahora como adulto conducía con mucho más cuidado y precaución, además que llevaba a su pequeña hermana embarazada de su sobrinoEse día, los abuelos Di Monti, se encontraban en la mansión Black, para comer y charlar como siempre de negocios, cuando vieron llegar a los hermanos, ellos parecían ser mellizos, no pasó desapercibido para
La sala de estar se quedó en completo silencio, los ojos azules de Angelo y Angelina se abrieron como estrellas, el brillo de felicidad en la mirada de los Di Monti, no se hizo esperar, pero la mirada verde oscura de Lucien Black, eso era algo difícil de descifrar— Estoy embarazada, papá, yo... no tienes que aceptarme aquí, me quedaré en casa de Lucien, mientras compro mi propia casa y me establezco ahí con mi hijo — Luciana, podía comprarse su propia mansión, pero le habría gustado estar en casa de sus padres y recibir su apoyo, pero sabía que les había fallado y no podía pedir demasiado— Lucien es un hombre soltero que necesita su privacidad, no estoy contento con que nos hayas ocultado algo tan importante, eso es verdad, pero eres mi única hija, no voy a darte la espalda Luciana, te quedarás aquí bajo el cuidado de tu madre y mío, nosotros te ayudaremos a criar al bebé, ven acá cariño, no me vuelvas a hacer ésto, yo siempre voy a hacer tu padre y puedes contar conmigo en tus peor
Los dos hermanos salieron del despacho de su padre que los puso parejos, Lucien Black, no era conocido precisamente por su paciencia y buen carácter, ahora que se encontraba bastante alterado por lo que había estado pasando su adorada princesa, estaba todavía peorEn la cocina, Angelina y su madre Alexandra, estaban felices y emocionadas por el embarazo de Luciana, más aún así Angy, estaba disgustada con su hija— Debiste contarme por lo que estabas pasando, el que te lo callaras fue una completa equivocación, soy tu madre y siempre voy a estar aquí para escucharte— Lo sé mamá, fue un error imperdonable, pero te prometo que no volverá a pasar, me gustaría que buscáramos un ginecólogo para que revise al bebé, quiero saber si se encuentra bien — pidió Luciana, ella estaba muy dolida con su ex esposo, pero no por eso iba a descuidar la salud de su hijo— Yo conozco a uno que es buenísimo y además muy amable, ahorita mismo pongo cita, mi bisnieto es ahora lo más importante aquí, entre to
En una de las mesas más apartadas del exclusivo bar, dos atractivos jóvenes trajeados se encontraban sentados, uno de ellos tenia un aura oscura, no sonreía ni demostraba expresión de agrado o desagrado, solamente bebía de su vaso de whisky y observaba todo a su alrededor Mientras que el otro a pesar de que se veía de cuidado sonreía más y su aura no era tan pesada y dominante, parecían ser un par de socios que habían pasado a tomar unas copas y relajarse después de firmar un jugoso contrato millonarioA ellos se les unieron otros tres empresarios, dos de ellos de treinta y cinco años y otro de veintinueve años, bastante jóvenes pero experimentados, había un negocio en puerta en el cual estaban varias empresas interesadas, Los Black y los Di Monti, por supuesto que también, la inversión sería multimillonaria pero las ganancias también, solo había que tener cuidado para que no les quitarán la mayor parte del pastel— Bueno, ya estamos aquí, no andaré con rodeos e iré al grano, todos a
La pelea siguió y era brutal, pronto el fino traje hecho a medida que el joven CEO vestía, se había arruinado, el luchador profesional golpeaba fuerte, pero la furia encendida en Lucien Black, por haberlo visto besar a la fuerza a la única mujer que había amado en su vida, no le dió treguaLucien Black, era despiadado y algo sádico, le dió la paliza de su vida a aquel hombre que se atrevió a tocar a Milán, la sangre estaba por todas partes del trabajado cuerpo del empresario y por todas partes en el cuerpo y rostro del luchador, no acabaron hasta que Lucien Black, dejó inconciente a su oponente, después se recargó en la pared con la respiración agitada tosiendo un poco por el gran esfuerzo físico que había hechoAngelo, le acercó una botella de agua, también había conseguido el bastón que su hermano solía llevar a todos lados después de salir del hospital hace diez añosMilán, estaba en shock, jamás, ni en sus sueños más locos se imaginó que al volver a ver a Lucien, él estaría en esa
Había pasado, era como si el tiempo nunca hubiera pasado y los enamorados pudieran quererse y entregarse el uno al otroLucien Black,, acarició la espalda de Milán suavemente hasta hacerla dormir, se mantuvo así por bastante tiempo hasta que el mismo se quedó dormido, cuando abrió sus verdes ojos todavía estaba oscuro, una manta le cubría su desnudes, intentó buscar con la mirada a su mujer pero no la vió por ninguna parte, en su lugar estaba su asistente Porto, él estaba sentado en la silla de detrás del escritorio con el botiquín enfrente suyo— Por fin a despertado CEO Black, por favor déjeme curarle sus heridas — dijo el asistente mientras se ponía de pié— ¿Qué? ¿dónde está Milán? — Lucien, no comprendía que hacía ese hombre ahí queriendo hacerle curaciones, se suponía que Milán lo haría, pero no la veía por ninguna parte, quería saber qué demonios estaba sucediendo— La señorita Costelo, es mi CEO, soy su asistente Porto, ella... su padre la llamó y tuvo que irse de inmediato, es
Los oscuros ojos de Dago, estaba muy abiertos, su CEO, desde que lo conoció nunca había manifestado un solo sentimiento por ninguna mujer que no fueron solo deseo, hasta pensó que jamás tendría una novia o prometida y que terminaría siendo un solitario hombre de negocios dedicado cien por ciento al trabajoPero ahora acababa de decir que está enamorado desde que era un pequeño niño de la misma mujer, ¿cómo podría pasar algo así? ¿acaso era posible? — De cientos de mujeres que podrías elegir para ser tu esposa, ¿por qué tiene que ser la novia de Alexandro Maldonado? tu obsesión con ese CEO no te va a llevar a nada bueno, ¿lo sabes verdad? — Dago, quiso ponerle en perspectiva la situación— No es mi culpa que ese imbécil haya aprovechado que me alejé de Milán, para enamorarla con su fachada de novio perfecto, tu sabes igual que yo el tipo de lugares de los que es cliente asiduo, se la pasa en exclusivos clubs para caballeros follandose mujeres de todas las nacionalidades, ese es el fet