Debido al incidente de la familia Gu, la empresa de Crimmings también se vio afectada y sus acciones tuvieron una pequeña caída.

“¡Maldito sea ese Jin Fengchen!”. Crimmings gruñó a través de los dientes apretados con una expresión cruel en su rostro.

En contraste con su rabia, Shangguan Qian parecía más tranquilo. Tomó un sorbo de café y dijo en tono relajado: “Esperaba una situación como esta”.

Al oír eso, Crimmings se acercó a él y le interrogó molesto: “¿Por qué no te preparaste?”.

“¿Prepararme?”. Shangguan Qian dejó su café y lo miró. “Jin Fengchen es un hombre imprevisible. ¿Cómo podría prepararme?”.

“Entonces, ¿por qué afirmaste anticipar esta situación?”. Crimmings frunció el ceño. Quizás estuvo mucho tiempo en el extranjero y no puede comunicarse bien.

“¿Una situación así no es normal? Ya que quiere deshacerse de nosotros, seguramente encontrará la forma de explotar nuestras debilidades”.

“Es normal, pero saldremos perdiendo si sigue así”. Crimmings se movió para sentars