Habían pasado una semana desde la última vez que hablé con Harry, lo dejé parado en medio de la pista de baile y salí huyendo de ahí como una cobarde, tampoco lo había visto en el edificio y me resultaba extraño ya que no había estado yendo a su casa, ¿dónde dormirá? Bueno, no debería importarme, es su vida.

Hoy es el día de mi graduación, estoy tan emocionada que nada podría arruinarlo. Me puse un hermoso vestido palo de rosa que me quedaba cinco dedos sobre la rodilla.

—Summer debes apresurarte — dijo mi madre entrando a mi habitación — No querrás llegar tarde.

Lo único que podía pensar era que Karla iba a ir, y ella era una de las mejores amigas de Harry, así que hay una pequeña posibilidad de que él también vaya. Lo admito, quería verlo, lo extraño mucho, extraño sus bromas estúpidas, extraño escucharlo cantar, extraño absolutamente todo de él. Algo muy malo de mi era mi orgullo, y aquello me impedía hacer muchas cosas.

—Sum, tus padres nos esperan en el auto — dijo Charlotte entr