— Así que volvió con la misma chica que lo engañó con su mejor amigo — dijo sorprendido — No deberías sentirte mal, llevo una hora y media aquí contigo, eres una chica muy dulce, Harry es el que acabó perdiendo al dejarte ir — mordió su hamburguesa— No he podido dormir porque todo lo que hago es pensar en él y cada que escucho una canción triste o de amor pienso, demonios, yo sé que es pésimo para mí, yo lo sé, mi cabeza sabe eso, pero mi corazón no deja de quererlo — miré al chico frente a mí, mis ojos se habían cristalizado. Aún se me hacía muy difícil hablar del rizado.— Poco a poco vas a aprender a superarlo, aceptas que no pudo ser, continuas con tu vida, y sólo recuerdas los buenos momentos, eso sucede cuando ya no sientes nada…—acarició mi mano — Suena algo irónica la idea de no sentir nada por alguien que alguna vez fuiste capaz de sentir todo. Pero así es la vida, unas personas llegan y otras se marchan para ser felices con otras persona, al final del capítulo has aprendido
Al estar parada frente a la salida de la discoteca giré sobre mis talones y regresé al lugar en donde me había dejado Dylan antes de ir al baño, limpié mis lágrimas antes de que regrese, no quería que me pregunte el porqué de mi llanto. Pedí otro shot de vodka y me lo tomé de un solo trago, sabía que ahogar mis penas en alcohol era malo, iba en contra de mis principios, y en este preciso momento nada de eso importaba.— Carajo, la fila del baño estaba demasiado larga, perdón por la demora— dijo Dylan tomando asiento junto a mí— Debería ir a dejarte a casa, ya casi son las doce.Antes de que pueda responderle a mi amigo un mensaje me llegó, era de Charlotte, al leerlo sabía que esta noche me iba a divertir demasiado. Le enseñé la pantalla a mi amigo, una sonrisa pícara se formó en sus labios. El mensaje decía que pasaría por mí en quince minutos, iríamos a Cielo con sus amigos. Le respondí al instante y le dije que ya me encontraba en la discoteca.— Le enviaré un mensaje a mi padre,
HarryNo podía dormir, he pasado horas dando vueltas en mi cama tratando de conciliar el sueño, pero era imposible, cada que cerraba los ojos la imagen de Sum aparecía en mi cabeza. Me sorprendí cuando la vi en el club, no había sabido nada de ella en dos semanas, llamé a mis amigos para sacar un poco de información y se negaban a dármela, eso me enfurecía, intentaba ser comprensivo, era obvio que la hermosa chica de ojos azules no quería dirigirme la palabra.Decidí levantarme en completo silencio para no despertar a Susan, me puse unos pantalones y un hoodie, tomé mis llaves y subí a la azotea, apenas atravesé a puerta una corriente fría chocó contra mi cuerpo provocando escalofríos, apoyé mis codos en la barandilla, mis ojos quedaron asombrados por la maravillosa vista que tenía frente a mí. La cuidad que nunca duerme, había tomado una buena decisión al venir aquí, el objetivo era iniciar de cero, cambiar mis malos hábitos, pero sorprendentemente había vuelto a ellos.Me comenzaba
SummerAbrí mis ojos lentamente, pero al hacerlo me arrepentí al instante ya que los rayos de sol que entraban por el gran ventanal me cegaron, maldecí por mis adentros y con gran dificultad logré levantarme para cerrar las persianas, para la próxima debo recordar hacerlo antes de salir. Mi cuerpo dolía demasiado y ni se diga mi cabeza, me estaba matando.Flashbacks de la noche anterior comenzaron a reproducirse, el encuentro con Harry, el mensaje de Charlotte avisando que iríamos de fiesta y, por último, pero no menos importante el beso con Zed, mis mejillas se sonrojaron, no podía creer que ayer había besado al moreno y lo que más me avergonzaba es que yo di la iniciativa, eso era algo no habitual en mí, ¿dónde quedó la Summer Winston tímida y reservada anoche? Al parecer se había esfumado, había perdido la cordura por tomar varios tragos.Nota mental: controlar el número de tragos que bebo.Estiré mi mano para alcanzar mi teléfono que se encontraba en la mesita de noche junto a mi
— En verdad agradezco que hayas venido, te extrañé mucho— abracé a mi amigo apenas entró a mi casa— Perdón por no haberte llamado antes.— No te preocupes Sum, sabía que necesitabas tiempo para ti sola— agarró mis mejillas y besó mi frente— ¿Ha pasado algo interesante estos días? — tomamos asiento en el sofá.Le conté a Lucas lo que había pasado ayer y hoy ya que era lo más importante, no me interrumpió en ningún momento, reí cuando hizo una mueca al momento en que le dije que Zed era mejor amigo de Harry, estaba tan sorprendido al igual que yo cuando me enteré.— Entonces...—suspiró y me miró con una media sonrisa— ¿Intentarás algo serio con Zed? ¿Cuándo se lo presentarás a tus padres?— Todavía no pienso en presentarle a mis padres, no quiero apresurar las cosas— levanté los hombros— Creo que es mejor así, tengo que conocer bien a Zed, quien sabe que acabe siendo igual a Harry.Lucas carcajeo y negó repetidas veces con su cabeza. —Bueno amiga, en ese caso serías un imán de idiotas,
«Tienes un mensaje de voz sin escucharEl segundo en el que me abrí contigo me di cuenta que en verdad quería que conozcas todo sobre mí, has sido una persona que ha tenido impacto en mi vida. Creo que ambos no estábamos disfrutando con los últimos momentos que estuvimos juntos, los problemas se nos venían encima y era mejor ponerle un alto. Estoy molesto conmigo mismo, sentí que estaba jugando a lo seguro cuando te dejé, no quería equivocarme con la decisión que tomé, pero ahora estoy destrozado, arrepentido y dolido. Ya no sé qué hacerFin del mensaje»Escuché aquel mensaje al menos cinco veces más, estaba confundida, ¿por qué me dijo todo eso?, la primera vez que lo oí pensé que estaba ebrio, pero lo descarté inmediatamente al escucharlo por segunda vez. Me dolía pensar que estaba destrozado, ahora sabía que estaba arrepentido por la decisión que había tomado, pero no podía retirar las palabras que dijo, ni siquiera sé porque dijo que yo le hacía daño, para mí era todo lo contrario
Harry— Nadie nace sabiendo a quién amar Harry, pero al final del día amas a quién amas, no hay otra manera y eso es lo que es.— Creo que perdí mi oportunidad con Sum. No, no lo creo, estoy cien por ciento seguro— murmuré desganado— Ella está con Zed ¿puedes creerlo? Al parecer el universo quiere que sufra al ver a la chica que amo con mi mejor amigo.— Aún no es tarde para recuperarla Harry, deja de tenerle miedo a tus sentimientos, si tu corazón te dice que ahí es, inténtalo— acarició mi rodilla— Lucha por ella, demuéstrale que la amas, qué harías cualquier cosa por estar con ella.Mi madre tenía razón, debía luchar por Summer, esta vez haría las cosas bien. Mi hermoso ángel apaciguó el dolor que ardía en mí, fue la calma de mi tormenta y la que se encargó de devolverle los colores a mi vida llena de tonos grises, me iluminó con su hermosa luz. Me hizo sentir tantas cosas y a veces sentía que no podía lidiar con todas ellas dentro de mí, sentía miedo, hui, pero ahora me doy cuenta
— Summer no me molesta entrar contigo y hablar con tus padres— dijo Zed mientras caminábamos a la puerta de mi apartamento.Se preguntarán que sucedió después de aquella confesión del moreno que me hizo enfadar, la dejé pasar, pero sospechaba que esa era la razón por la cual Harry había desaparecido, espero equivocarme.Zed se ofreció a acompañarme y hablar con mis padres para minimizar el castigo que me esperaba, le dije que no porque él no tenía nada que ver en esto, y aun así insistió, acabé aceptando.— Ya te dije que si— murmuré—¿Pero que les dirás? ¿Qué murió tu perro?— Ya verás, tú solo espera— besó mi mejilla.Al encontrarnos frente a mi puerta miré temerosa al moreno y él me hizo una señal para que la abra, tomé el pomo con las manos temblorosas, al girarlo y abrirla por completo me llevé la gran sorpresa de que mis padres y Charlotte se encontraban reunidos en el salón, al verme todos se pusieron de pie y caminaron hacia mí preocupados.— Summer Winston— dijo papá enfadado—