Estaba decidida a volver a casa e intentar dormir, esta noche no fue como a imaginaba. Solo quería encerrarme en mi habitación y escuchar música hasta quedarme dormida. Mi día había sido perfecto, hasta que sucedió lo de Harry, odiaba que él tenga el poder de arruinar el día que más amo en el año.

— ¿A dónde crees que vas Verano? — me volteé asustada, era Noah saliendo del apartamento de Harry.

— Me asustaste — puse una mano en mi pecho intentando calmar mi acelerado corazón — Voy a intentar dormir, ha sido un largo día y estoy cansada.

— No te puedes ir Sum, entra a la fiesta un rato.

¿Quería entrar a la fiesta? Si. Quería entrar, pero no sabía si era una buena idea después de lo sucedido entre el rizado y yo.

— No lo sé Noah — lo miré dudosa, soy una experta en inventar excusas cuando no quiero ir a algún lado, desafortunadamente ahora mismo no se me ocurría ninguna.

— Vamos Summer, te prometo que nos divertiremos.

Antes de que pueda responder Harry pasó junto a nosotros, le s