DUNCAN
Mi mano sube y baja, el frenesí me hace soltar el primer chorro de mi derrame, las imágenes de Ariel desnuda, me enferman, me ciegan, me dejan con este deseo enfermo de poseerla, de… cogerla. Tenso el cuerpo y rechino los dientes al recordar cada palabra de su jodido discurso, Preppy se le ha metido a su sistema como un virus. Le ama, lo vi en sus ojos, pero quiero que me ame a mi, no voy a renunciar a ella. No tan fácil.
Arcadia es un problema con el que tengo que lidiar en estos momentos, ¿de verdad me creía tan estúpido? ¿Tan manejable? Mi padre y mi familia le abrieron las puertas, le dieron poder y sin embargó no cumplió con lo acordado, no hizo nada para separar a Ariel de Preppy, y ahora es mi turno de actuar, perdió todo apoyo, y
ARIELMi corazón late desbocado, las manos de Damián me enjabonan y me siento en casa, pega mi cuerpo al suyo, desde que nos volvimos a encontrar no hemos dicho nada, solo juntó su frente contra la mía, luego descendió y besó mi vientre, luego ordenó encerrar a mi madre, subimos y nos estamos bañando. En silencio, el agua corre por su cuerpo y mis ojos no pueden evitar viajar por su pecho, es demasiado apuesto, demasiado varonil, pero sigue con la mirada perdida. Y odio que esté triste o en ese estado de silencio absoluto.—Quid pro quo —susurro y él me mira fijamente—. Duncan me tocó, me besó mientras estaba inconsciente, pero cuando me mantuvo prisionera intentó hacerlo de nuevo, no le dejé, lo amenac&ea
—Ariel —Lea corre hacia mi y me abraza con fuerza—. Dios por fin podemos abrazarnos, el idiota de Preppy te acaparó para él ayer.—Estoy bien —le aseguro devolviéndole el abrazo a mi amiga.—Es bueno saber que pudiste regresar —añade Enzo—. De no haberlo hecho, seguramente ahora estaríamos metidos en el infierno.—Gracias —respondo mirando a la chica que evita mirarme.Enzo y Lea parecen darse cuenta y él carraspea.—Ella es Lany Mitchaelson, se quedará con nosotros un tiempo, es una larga historia, Lany —el mejor amigo de mi esposo la llama y esta se acerca—
PREPPYPASADO.La lluvia no deja de caer, veo la sangre en mis manos y no me siento mejor, la vida ha perdido color y la verdad no me importa morir, quiero venganza, quiero sangre, eso no va a regresar a mi hermana, pero tengo que hacerlo porque su muerte no quedará impune, no. Cierro los ojos y los recuerdos me golpean.Meses atrás…Observo como mi hermana come, hace rato que me había pedido un pastel de fresas, su favorito. Me cuenta cosas sin sentido, cosas deniñatasque me importan una mierda pero le escucho porque es mi hermanita, la persona más importante para mí.
PURGATORIOLas luces no dejan de iluminar todo el sitio, la música tan alta hace que comience a darme jaqueca. Quiero gritarle al mundo entero que soy el amo del mundo, del universo, que han sido demasiados años viviendo debajo de la oscuridad, pensando en que algún día iba a volver a ver la luz del sol, hasta ahora.La música hace que los cuerpos de las mujeres desnudas al centro, se muevan y se restringen contra los cuerpos de los tipos que les agarran alguna parte del cuerpo para después darles algunos billetes. El calor me sofoca y no se me quita esta sensación, había probado la cocaína y cuando quiero vomitar.Sin poder esperar un momento más, me dirijo a los baños, le lanzo una mirada am
ARIELSentir adentro a Preppy, es la cosa más deliciosa, me abre y me folla de un modo que me lleva a tocar el cielo y el infierno al mismo tiempo. Han pasado ocho meses desde todo lo ocurrido, siguen en busca de Duncan y de mi hermano, pero en palabras de Barclay, parece que se los tragó la tierra, mi marido no ha vuelto a tocar el tema de su hermana y lo respeto, imagino lo que debió sentir y prefiero no abrir heridas pasadas que aún sangran. También hemos estado viviendo en la fortaleza de Barclay, desde que mi panza se ha expandido como globo, ahora con ocho meses de embarazo, casi nueve, Preppy se ha tomado en serio su papel de padre y esposo, no se me despega ni un solo momento, y cuando lo hace me llama cada quince minutos exactos pese a estar en la misma casa.Una vez me met&ia
—Nunca pensé verlo así algún día.La voz de Enzo me eriza la piel.—Eres suya, desde que Prep te vio cuando eras una niña, supo que serías para él.—Eso suena pervertido.—Lo es, pero lo amas y él a ti, ahora formarán una familia y ten por seguro que hará todo por protegerlos.Asiento y enseguida Preppy despierta, observa mi panza y como ya suele pasar, nuestro bebé comienza a moverse.—Me ama —murmura.—Prep, necesito hablar contigo en privado un momento.
PREPPY—¡Me importa una reverenda mierda! —bramo haciendo llorar a los trillizos, Lea me mira mal pero me importa poco.—¡¿Y qué quieres que hagamos?! —exclama Barclay y me encuella—. Afuera están mis hombres lidiando con tus malditos enemigos, no podemos arriesgarnos a que Ariel dé a luz en medio de una guerra de disparos.La sangre corre por mis venas a gran velocidad, él tiene razón, todos la tienen, al parecer a muchos de mis enemigos se les ocurrió precisamente hoy, venir y atacarme pensando que se acercaba mi boda bajo las leyes criminales con Ariel, pero mi hijo, quien todavía no nace, ya comienza a tocarme las pelotas al querer nacer en este día. Quería lo mejor para
ARIEL Cuando era niña, jamás imaginé en que algún día estaría casada con un hombre, nunca pasó por mi mente la idea de pertenecerle a alguien y mucho menos de formar mi propia familia, era demasiado pesimista y para ser honesta, como la fatalidad me perseguía, el futuro que pasaba por mi mente era el ser violada en algún punto de mi vida por el degenerado de mi padre, o muerta. Cuando me violaron y me obligaron a hacer cosas que solo le hubiera permitido a Preppy, quise quitarme la vida, todo el mundo me había dado la patada en el culo, todos, menos una persona: él. Preppy ha estado a mi lado en los peores momentos, y una parte de mí se arrepiente de haber atentado contra mi vida porque de haberlo hecho, de haber estado muerta en estos momentos, nunca hubiera conocido al nuevo amor de mi vida, mi hijo, no es porque se