Casi cayendo, tomé una toalla que estaba en el baño y salí a la terraza. Afuera había un auto marca Mercedes Benz. Salí a echarle un vistazo y, mientras caminaba hacia el auto, la voz de Yusuf me espantó. —Amor, mira —me muestra una bolsa—. Estaba comprando algo de ropa para ti.Intenté correr, pero me caí al piso; no podía correr, mi entrepierna me jugó una mala pasada. —Todavía intentas escapar. ¿Qué, no la pasaste bien anoche? —se acerca y me ayuda a levantarme.—Eres una escoria, me violaste —su mirada es apenada, pero sus labios no dejan de formar esa sonrisa burlona que me da rabia cada vez que la veo.En el momento en que Yusuf iba a responder, se escuchó un disparo.—Emily, entra de inmediato al auto —me ordena y tira la bolsa que trae consigo. Él abre la puerta del carro y me obliga a entrar. Entré muy asustada y él se subió atrás. Encendió el auto y se devolvió en dirección a la mansión. Tenía mucha rabia, no podía hacer algo para escapar de él.Minutos después, llegamos a
–¡Señora Emily!–ay dios mío, está bruja está tocando la puerta –¿Qué quieres?–Solté la foto y está cayo al piso, después me dirijo a la puerta esperando que ella abra. Y efectivo ella abrió y de inmediato la jale por el brazo haciéndola entrar de golpe. –¿Qué te pasa niña?–me pregunta asustada mientras guarda sus llaves en sus senos. –Señora, Ayúdeme a salir de aquí, por favor le daré muchísimo dinero–la meneó por los hombros, y su respuesta fue una carcajada. Ella sacó mis manos de sus hombros, tomó aire y sonrió. –No puedes escapar, él se entera de todo. Y si te ayudo lo más probable es que me asesiné–sus eran palabras firmes como si resultaran dichos por algún soldado. –Señora, él no se va a enterar, quizás usted también pueda huir conmigo–ella me interrumpe. –Te voy a corregir, yo–se señala–estoy aquí porque quiero. A mí nadie me tiene obligado. –Señora–le rogué una y otra vez. –No te puedo ayudar, si el señor se entera que yo te ayudaré a escapar, matará a mi familia, tengo nieto
¿Nos podemos ir amada mía?–asiento un poco nerviosa, no sé para dónde me va a llevar este ahora. Él me ayudó a bajar por las escaleras ya que mis torpes pies no sabían caminar con estos tacones. Se vio ridículo a Yusuf mientras me ayudaba. Y muy chistoso recordar su cara cuando decía: ¡Cuidado amor! ¡Para qué te pones estos tacones tan altos!. Todos los empleados nos miraron orgullosos, como si fuéramos un par de recién casados. Y no faltó uno que otro comentario como por ejemplo. «Yusuf ella es mucha mujer para ti» dicho por Martin, y si es verdad soy mucho para ese monstruo que no tiene modales. Dentro del coche solo había un silencio incómodo. Miraba de reojo a mi secuestrador, por su parte el conducía sin siquiera mirarme, de repente sentí como mi corazón vibró, ¿Por qué, no se? Pero si habia estado sintiendo cuando estuve enamorada de mi vecino, no será que…¿Me está empezando a gustar este bastardo?. ¡No! Eso jamas. –Llegamos, mi vida–avisa. Sus ojos me miran por unos segundos y
pero mi coeficiente intelectual no es tan maravilloso como para saber de qué hablan. –Yusuf, deine Frau ist sehr schön (Yusuf está muy hermosa tu esposa)–Dijo el hombre. El rostro de Yusuf se vio afectado por ese comentario ya que rodeo mi cintura con su brazo, no sé qué le habrá dicho, pero siento que Yusuf está tocándome de más. Cómo quién dice, esto es mío. –Themawechsel, die Ware kommt morgen.(Cambiando el tema, mañana llega la mercancía)–Respondió Yusuf. Su tono era de mal gusto. No sé que habrá dicho el tipo como para hacer enojar a este estúpido. De momento el mareo que tenía más alcanzado, a tal punto de hacer que mi frente se mojara de calor, y mi boca se seca. Me siento mal. Interrumpí la conversación luego de sostenerme de los brazos de Yusuf. –Mi amor, ¿Qué tienes?–me sostuvo con fuerza, su cálida voz, hizo que por un momento me sintiera aliviada pero no…el mareo siguió, mi mente dio vueltas y vueltas, si sigo así voy a caer–¿Cariño dime qué te pasa?–volvió a preguntar, él
Eres muy hermosa–masculló él alemán en español, lo cual me dejó sorprendida, entonces sabe hablar español. En su rostro había una sonrisa satisfactoria, mientras que con su gran cuerpo se acercaba más y más a mí, retrocedí echando la vista hacia atrás, en esta habitación no hay por donde escapar, estoy acorralada como gallina de patio.Su cuerpo me generó escalofríos ya que podía ver cómo se le salía un pequeño bulto de su abdomen, es una bola de grasa.intenté correr pero él me tomó por el brazo con su ancha mano. Para ser gordo es veloz.–No corras, cariño– expuso mientras me miraba con hambre, era más bien una hambre por devorar cada parte de mi cuerpo.–¿Qué te pasa?– gruñó al mismo tiempo que enrosque mi mano y la lleve hasta su mejilla, y con un fuerte golpe hago vibrar su rostro.–Ven aquí–me toma por ambas de mis muñecas y las dobla hacia abajo dejándome inmóvil–No seas tan grosera con tu futuro marido–¡Qué!. Esto no es verdad, él me llevó hasta la pared y me empujó hacia esta
El escolta de inmediato detuvo sus pasos quedando en shock.–¡Si no me dejan salir, me mataré!–podía sentir el filo de aquella botella en mi garganta, en realidad no quería morir, pero de ser así no me importa.–Señora cálmese, no haga una locura–Dijo el escolta llevando sus manos a su cabeza. Estaba preocupado, era como si yo fuera una Joya muy valiosa para ellos.Las personas hicieron un círculo en el cual yo quede en medio. Escuchaba a muchas personas exclamar.«No lo hagas» «Baja esa botella, ¿Estás loca»Quería salir corriendo y esconderme en un lugar en el cual ni el aire me encontrara.Él escolta avanzó dos pasos más y de inmediato hundí más la botella hacia mi cuello.–¡Te dije que si te acercas juro por dios que me mató!–lo amenacé, y camine para poder salir–¡Quítense de mi caminó!–me referí a las personas que estorbaban–¡Son una partida de chismosos!–Rugí frenéticamente.No sé cómo pasó pero alguien me tomó por la espalda e hizo que arrojará la botella al piso.Me quedé hela
Aún no creo lo del beso. Tampoco hace falta pellizcarme para ver si es real, eso está demás.Desde aquí no puedo escuchar la conversación, solo veo las mímicas de lo que hablan, quiero escuchar algo.Lo que sí veo es que Yusuf está frustrado y de muy mal humor mientras que Martin trata de explicarle algo.Traté de bajar los vidrios para escuchar pero Yusuf me lanzó una mirada de desaprobación, ¡Mier..! Parece haberse dado cuenta.Ellos hablaron más o menos un minuto y luego Yusuf entró al auto de golpe.–¿Cariño, porque no me dijiste que te peleaste con Heidi?–Me impresiona la manera tan rápida de como Yusuf cambia de humor, si no estoy mal, esto se conoce como bipolaridad.–¿Entonces se llama Heidi.?–Murmure. él asiente meneando la cabeza.–Eres igual que una tigresa ¿Lo sabías?–Ríe otra vez, cuando estaba fuera del auto hablando con su hermano estaba muy furioso, me imagino que estarían hablando de otro tema. Porque ahora se le ve feliz.–Mira ella me busco, y que agradezca que llegó
Me levanté de golpe con el corazón en la boca, estaba soñando que me ahogaba…Ya es de día, escucho los pájaros cantar y el sol hace lo propio: brillar con un amarillo hermoso.Miré a mi alrededor y él monstruo no estaba, me revisó y aún tenía mi vestido, eso indicaba que todo estaba bien.Me tumbé a la cama nuevamente y escuché la puerta abrirse, me asome y era el.Sus pasos son firmes. y siento cómo se van acercando a mi–Yusuf–dije. pero al mismo tiempo mis ojos se agrandaron tras ver su torso el cual estaba completamente descubierto, ¡Wao! Tiene unos pectorales muy bien entrenados, y en su hombro tiene una serpiente enroscada que llega hasta su brazo izquierdo, también tiene otro tatuaje en su cuello, este tiene una lechuza.Se sentó en una esquina de la cama y suspiró mirando para el techo.Su mirada estaba perdida, pensé que venía a molestarme pero no…emana un aura triste, su cabello aún está húmedo ya que gotas caían en sus hombros y recorrían por sus brazos.Me senté en la cama