capitulo ocho

¿Nos podemos ir amada mía?–asiento un poco nerviosa, no sé para dónde me va a llevar este ahora. Él me ayudó a bajar por las escaleras ya que mis torpes pies no sabían caminar con estos tacones. Se vio ridículo a Yusuf mientras me ayudaba. Y muy chistoso recordar su cara cuando decía: ¡Cuidado amor! ¡Para qué te pones estos tacones tan altos!. Todos los empleados nos miraron orgullosos, como si fuéramos un par de recién casados. Y no faltó uno que otro comentario como por ejemplo. «Yusuf ella es mucha mujer para ti» dicho por Martin, y si es verdad soy mucho para ese monstruo que no tiene modales. Dentro del coche solo había un silencio incómodo. Miraba de reojo a mi secuestrador, por su parte el conducía sin siquiera mirarme, de repente sentí como mi corazón vibró, ¿Por qué, no se? Pero si habia estado sintiendo cuando estuve enamorada de mi vecino, no será que…¿Me está empezando a gustar este bastardo?. ¡No! Eso jamas. –Llegamos, mi vida–avisa. Sus ojos me miran por unos segundos y
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo