Capítulo 385
¡Qué asco!

¡Esa forma de ser tan hipócrita realmente me recuerda a Teresa!

Marina pensaba, con tanta rabia que casi podían verse chispas en sus ojos.

De reojo, miró a Ricardo para ver cómo reaccionaba. ¡Sí se atrevía a creer en las mentiras de esos miserables como César, también podía irse a la mierda, igual que él!

Ricardo tomó firmemente la mano de Marina y la acercó más a su lado, protegiéndola.

—Natalia, tú que eres tan chismosa, ¿eso fue lo que enseñan en la casa de los Piccolo? —Con voz cortante, su mirada le lanzó una indirecta muy directa.

—No me creo nada de toda la paja que dices, ¡pero si hablas de mí, te creo perfectamente!

Su mirada se fijó en Josie:

—Y tú, con esa cara de sapo, ¿ni siquiera te miras al espejo? Mejor guarda esas buenas palabras para ti misma, no necesito que te metas en mi vida, ¡nadie te preguntó qué piensas de mi puta vida!

Marina no esperaba que Ricardo tuviera este lado tan venenoso.

Parece que lo subestimé.

¡Pero bien dicho! Está demostrando que es ca
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App