Bajo mis defensas, y ella comienza a dejar de luchar, junto nuestras frentes y nuestras respiraciones se mezclan en una explosión de emociones.
-Barclay, esto no está bien -su voz tiene matices inestables y siento el ligero temblor que domina su cuerpo.
-¿Por qué? Y no me vengas con esa mierda de que somos hermanos porque ya sé que no es así -le arranco la blusa y comienzo a desnudarla con avidez-. Sé que tu también lo sabes.
Bryony deja que le quite la ropa y luego ella me ayuda a mi.
-No sé que estamos haciendo -gime cuando la obligó a girar y la subo sobre el escritorio-. Barclay...
Mis ojos viajan por su perfec
BRYONYCuatro pares de ojos me miran como si me hubiera crecido una segunda cabeza, mientras devoro la gelatina que me dan en el hospital, analizo lo que ha pasado, mi madre; Beatrice Blackorth se ha encargado de matar los cabos sueltos, por lo que solo resta Ezequiel, y es primordial acercarnos a Zac, las nuevas fuentes de mi hermana Celia, apuntan a que Ezequiel estará en el mismo yate, por lo que queda descartada la grandiosa idea de hacer que yo entre en la subasta, mi hermana tampoco es una opción, puesto que nos conoce a la perfección. Cameron y Barclay siguen con el ceño fruncido y no sé porqué.Vadhir estaba muerto, y la herida que tengo a un costado no es de gravedad, solo he tenido que estar dos días aquí para revisión y en tres horas me dan de alt
BRYONYSubo el cierre de mi vestido, estaba a solo dos horas de que comenzara el plan, lo hemos repasado las siguientes horas, según las palabras de Cameron y por experiencia, la elegida en la subasta se encarga de dar un espectáculo a los invitados del anfitrión, en este caso; Zac, equivalente a bailar sensual, entre las personas se sabe que estará Ezequiel, y aunque nadie lo quiera admitir por su jodido entusiasmo, creo que sabe bien que intentaremos llegar a él, lo que no sabe es de dónde vendrá el ataque. Barclay anda quisquilloso conmigo, me mira mal y tiene mala cara. Mientras que mi hermana Celia… Bueno, ella es otra historia, se cuchichea con Cameron y solo espero que no sea lo demasiado confiada como para confesarle mi pequeño secreto.Me miro una v
Me molesto por no saber qué es lo que sucede afuera, no tengo idea de cuánto es lo que pasa hasta que abren la puerta y me indican que es mi turno, la subasta de las otras chicas estaba acabada, ahora tendría que entretener a sus invitados, localizar a Ezequiel y esperar la primera señal para atacar. Camino detrás de una morena que solo lleva una tanga roja, tacones del mismo color y el cabello recogido en una perfecta coleta. No me dice nada, solo me indica con la mano la puerta dorada frente a mí.Respiro profundo un par de veces hasta que entro, la zona parece ser un VIP, con luces azul neón que solo me facilitarán el trabajo, sonrío para mis adentros, camino con seguridad hasta encontrarme con los ojos lascivos de Ezequiel. El aire me falta, el ácido estomacal se me sube por la garganta y cuando una de las chicas q
Abro lentamente los ojos, los rayos del sol hacen que me quiera levantar, el bloqueador solar ayuda pero por el calor de mis mejillas estoy segura de que me quedé dormida y llevo más de cinco minutos bajo el sol abrasador de los Ángeles en esta época del año. El cielo parece despejado y frunzo el ceño, odio los días soleados, así como salir al parque, porque usualmente suelo quedarme dormida como ahora.La risita a mi lado me hace girar a mi izquierda, y mis ojos se cruzan con un par idénticos a los de Barclay, la niña de cabello oscuro y cerquillo, me sonríe mostrándome sus hoyuelos en las mejillas. La pequeña de cuatro años que tuvimos Barclay y yo, me ha tendido una nueva trampa, sabe que mamá termina cansada del trabajo y se las apaña para que me duerma aprovechando ese tie
Abro los ojos claramente incómoda por los ruidos y gemidos que se escuchan a través de las paredes que se conectan con la habitación de al lado. Por fin había llegado el viernes y la rutina de la que era una fiel esclava estaba a pocas horas de quedar atrás. Siempre era lo mismo; levantarme para ir a la universidad, regresar y de forma rápida ducharme, pasar a las oficinas de mamá y dejar que uno de sus gorilas armados me lleve al aeropuerto y perderme en algún lugar paradisiaco. ¡Mierda! me había quedado dormida en una de las habitaciones que usaban para sus filmaciones, no tenía hambre, puesto que había ingerido algo de comida que me trajeron amablemente. Mi hermana mayor solía decirme que la comida era una de las cinco paradas para llegar al deseo de satisfacer los instintos más primarios de un hombre.Mi madre era la dueña deYorky Model World, una de las empresas más g
BRYONYMierda. Mi madre no me había explicado bien lo que estaba ocurriendo, y mi hermana permanecía hermética encerrada en su habitación, hoy se supone que nos iríamos a Londres pero al parecer mi madre cambió de idea y pasaremos el fin de semana encerradas en una de las casas que tenemos cerca de mi universidad, no entiendo sus decisiones pero por lo menos lo pasaré alejada del resto de mis compañeros. No era el tipo de chica popular pero tampoco a la que molestaban.Cierro mi casillero resoplando al saber que diez de los gorilas trajeados de mi madre, me están esperando a las afueras de la universidad. Sin pensar, se me resbalan dos libros y mientras intento recogerlos el recuerdo de mi primer beso robado invade mis pensamientos explotando un sin fin de e
BRYONYMi corazón comienza a galopar con fuerza cuando me siento segura de que se trata del mismo chico que me encontré en el elevador. Mantiene la palma de su mano sobre mi boca haciendo la presión necesaria para impedirme hablar. ¿Cómo había entrado a mi casa? La seguridad que había puesto mi madre era extrema, solo una persona como yo que conozco cada rincón de esta mansión, tendría una oportunidad de salir desapercibida—No me mires así que no te voy a hacer nada —sus ojos se clavan en los míos—. No te enfades pero no eres precisamente mi tipo.Su comentario me pone de mal humor y prende una llama en mi interior que obliga a mi imaginación a jugar sucio al p
BRYONYLa noche apenas iniciaba y ya había logrado burlar toda la seguridad que mi madre había puesto en la casa, realmente me sorprendió el hecho de que aquel tipo se atreviera a venir conmigo con la supuesta excusa de que terminaría por contarme todo lo que sabía acerca de mi progenitora, cosa que aún dudaba mucho porque... en el fondo seguía creyendo que conocía a mi familia. Estábamos caminando por una calle poco transitada y alejada de la seguridad de mi casa, cuando Barclay; como se hacía llamar el tipejo, me seguía con una enorme sonrisa.—Anda, no entiendo cuál es la necesidad de ir a la casa de tu amigo caminando cuando tengo carro —me dice con voz ronca y de reojo puedo notar como se mete las manos en los bolsillos