Narrador.
Ella escuchaba los jadeos de asombro de su hijo y sentía más curiosidad, pero le estaba dando su espacio. Mientras su corazón late desbocado con miedo a equivocarse. Su esposo también la miraba asombrado, quizás Adelina tenía razón y él no quiso creer en sus presentimientos. Sentados en la cama escuchaban cada murmullo de parte de Boris, a quien le cuesta aceptar que Karina no es una simple fotógrafa como él la consideró ser. Y la duda en él era ¿por qué le había mentido?, acaso ella estaba jugando con él en todo ese tiempo que estuvieron viviendo juntos. Su asombro pasó a ser enfado porque siente que le vio la cara y enojo porque la última vez lo rechazó y a él nadie le hace tales desplantes.
📳 madre ¿cómo h
Narrador.—de eso no hay dudas al respecto, no obstante, ya hemos escuchado rumores, y eso no afecta las acciones de la empresa—le respondió un accionista mayoritario, teniendo el apoyo de los demás quienes movían la cabeza dándole la razón y Karina supo que todo ese revuelo es por la existencia de su pequeño. Se lo esperaba, también su padre se lo había advertido, que debía casarse, pero decidió posponer un compromiso ganando tiempo, que ahora se ha terminado.Miró a su padre, y él únicamente levantó las cejas, no la podía defender más, puesto que desde que ella regresó al país le pidió buscar un buen pretendiente, sin embargo, ella siempre se negó, a pesar de que le había prometido hacerlo en cuanto tomara su lugar en la e
Narrador.Adelina presentó a su hijo, mientras a Karina el corazón le galopaba como si se tratara de un caballo en medio de una carrera. Agarraba con fuerza la mano de su pequeño, esperando a que Boris dijera a su padre toda la verdad, hablaban de una cosa y la otra mientras él no dejaba de observar al niño hasta que Edgar tocó los labios de Karina con el pretexto de quitarle residuo de comida, ese gesto le molestó. Y puso el vaso que tenía en su mano de manera fuerte sobre la superficie de la mesa y todos se giraron a mirarle.—Perdón—dijo disimulando el arrebato. Luego que terminó el desayuno pasaron dentro de la casa donde siguieron compartiendo.—Ven aquí pequeño—le pidió Boris al niño quien llen
~Bien, seré tu esposa más no tu mujer~ respondió ella. ~Lo quiero todo, tú no tienes derechos de poner límites~ —Que descarado—gritó enfurecida. Su madre sonrió, viendo detrás de ese enojo amor y eso le tranquiliza más después del consejo dado. ~Primero buscaremos el certificado matrimonial y luego anunciaremos nuestro matrimonio~ le propone ella. ~Te asusta que tu prometido se oponga~ bromeó él. Horas más tarde acudieron al registro civil, pidiendo un matrimonio exprés, registraron sus documentaciones y tomaron el test, algo rápido y sencillo. <<El dinero lo facilita todo>> pensó ella observando como evadie
Narrador.En cuanto Boris salió de Berlín su hermano se imaginó que algo muy importante debía suceder para que su hermano abandonara el país a días de la elección del nuevo director ejecutivo; Alfonso su hermano competitivo sabe que Boris nunca se arriesgaría a no asistir a esa junta si no se tratara de una urgencia, así que quiso saber qué se traía Boris entre manos y decidió llamar a su madre (Adelina).📞 Mamá dime que ya vienen; los extraño mucho a los dos— mintió mientras sonreía con burla y movía el vaso con whisky en su mano a medida que tiene las piernas cruzadas y una de sus mujeres prepagos acariciando su torso desnudo.📞 Hay mi niño cariñoso, siempre tan buen hijo—c
Narra Karina.Edgar está loco y mi padre no lo quiere entender, aún recuerdo cuando hace años intentó tomarme a la fuerza. Desde ese día lo detesto, y no era que lo soportaba anteriormente, pero, por mi padre hacía el esfuerzo en tratarlo como un integrante de la familia.Después de haber culminado con los trabajos pendientes salí a buscar a mi pequeño, y veo que Boris arregló muy bien su habitación, la convirtió en un parque infantil; da risa ver lo exagerado que es ese hombre.—Mami te extrañé— vociferó mi príncipe cuando percibió mi presencia. Corrió hacia mí y saltó a mis brazos. Él es un tanto exagerado, pero bueno, eso parece ser hereditario, puesto que apenas ten
Narra Boris.A Amalia la conozco y tengo la certeza de que me empezará a molestar en cuanto sepa que he contraído matrimonio con otra.—Deberías tener más cuidado y no usar esas cosas ridículas— me gusta ver los tacones en los pies de las mujeres, pero no tan exagerados.Ella iba a decir algo, sin embargo, seguí mi camino y pisé unos documentos que tenía consigo. Ella al parecer dijo algo, pero no le presté atención. Ingresé a la oficina y grité el nombre de “Mariana” con el fin de pedirle un café. Ella es la antigua secretaria de mi padre que por alguna razón que no comprendo está aquí en Colombia, la chica me parece bonita, tal parece que mi madre no ha visitado
Narra Boris.Salí de la empresa con el fin de ir a pasar la tarde con mi hijo necesito recuperar el tiempo que no he estado a su lado. Y quien quita que Karina nos acompañe; a pesar de que tengo muy claro sé que si lo hace será por Axel, pero de todos modos disfruto pasar tiempo con ambos.Me extrañó no haber visto a Amalia al salir, ya que juraría que sin una buena razón no sé iría de la empresa hasta no verme; esa mujer es insistente, cuando quiere hacerme la vida imposible.Mientras manejaba y pensaba en la rara acción de Amalia recibí una llamada de mi hermano quien no paraba de preguntarme acerca de mi vida aquí, algo bastante inusual, pero de todos modos le comenté de mi hijo y de Karina.Cuando estaba a punto de entrar a la cochera me detuve de golpe tras ver como Karina subía a una camioneta y decidí seguir
Horas antes:Axel estaba en su nueva habitación de juegos que había mandado a crear su padre exclusivamente para su hermoso bebé. Axel no dejaba de tomar entre un muñeco y otro, soltando cada uno con más molestia.La niñera lo miró teniendo en cuenta que ese comportamiento no es digno de él; ella ha sido su niñera desde que el pequeño apenas tenía tres meses de haber nacido y sabe que a pesar de su gran inteligencia y capacidad no suele ser así.Ella empezó a tomar los juguetes intentando hacerlo reír al pretender imitar la voz de bob esponja que tanto a él le gusta, sin embargo, él no se animaba por más que ella se esforzaba.—&iqu